Our Sun (Minsung)

1. Lee Minho necesita ayuda

Nota de autor : para una mejor lectura, cuando aparezca este símbolo 🎧✨
recomiendo reproducir en Spotify u otro la canción : The Winner is - Devotchka
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Minho despertó de golpe tomando un montón de aire en sus pulmones. Nuevamente había soñado con esa desastrosa noche. Aquella en la que tras haber bebido demás, había terminado por confesarle a su ahora ex esposa; su recientemente descubierta homosexualidad.

Volteó a ver el reloj en su mesita de noche, eran las siete veinte de la mañana, otra vez iba tarde. Se destapó rápidamente haciendo que el cubrecamas cayera al suelo, y de un salto salió corriendo de su habitación en medio de un gracioso alarido.

🎧✨

Al otro lado de la casa, un adorable dormitorio de tonos pasteles se hallaba en silencio. La ventana del segundo piso se encontraba entre abierta, por lo que la brisa matutina ya comenzaba a invadir todos los rincones de la habitación infantil.

Dos pequeños pies se asomaban por debajo de una esponjosa frazada llena de coloridos cohetes. Los deditos se estiraban y cerraban esperando a que, como todas las mañanas, un joven castaño de sonrisa perfecta apareciera por la puerta.

Yong-sun oyó el ruido de esta misma ser golpeada con fuerza contra la pared, y rió con la cabeza aún oculta bajo la manta. Su papi era todo un caso.

--- ¡Sunnie, Sunnie! ¡Arriba, mi amor, vamos tarde!

Yong-sun no quería destaparse, quizá si fingía estar dormido podría faltar a clases y entonces papá lo llevaría otra vez a su trabajo. La biblioteca era demasiado entretenida.

--- ¡Vamos, Sunnie! ¡arriba!

Sintió sus tobillos ser jalados hacia abajo y entonces frente a él apareció el joven más apuesto, valiente y divertido de todo el universo. Lee Minho, su padre adoptivo.

El pequeño Yong-sun sabía que no compartían la misma sangre, pero Minho le había dicho que en cambio compartían la misma alma y eso le bastaba para ser feliz.

La cara de urgencia de su papá se le hacía muy graciosa, por ende no pudo evitar soltar una carcajada.

--- ¿de qué te ries, enano? ¡Vamos, corre, corre!

--- ¡Levantame en brazos!

--- Pero si ya estás grande. Ay dios, bueno ven aquí.

Lee tomó a su hijo desde las piernas y lo levantó en el aire. La cabeza del pequeño "Sun" como lo llamaban todos, quedó boca abajo y se mecía de forma graciosa. Finalmente terminó por cargarlo como bulto bajo su brazo derecho y salió corriendo por el pasillo hacia el baño.

Luego de haber tomado una rápida ducha, ambos cepillaban sus dientes frente al espejo. Minho estaba ansioso, la ultima vez que había llegado tarde, la maestra del jardín infantil casi lo había aniquilado con la mirada. Definitivamente esta vez se ganaría un reclamo.

Para sentir como si estuviera haciendo algo más, comenzó a dar saltos en su sitio mientras terminaba de cepillarse los dientes. Sunnie lo observó divertido y comenzó a imitarlo, no pudieron evitarlo y terminaron doblándose de la risa.

Una vez estuvieron listos, Yong-sun esperó junto a la puerta de salida. Minho corría por toda la sala buscando las llaves de su furgoneta Volkswagen amarilla, desordenando todo a su paso.

El pequeño bajó la mano hacia el bolsillo de su chaqueta y allí apretó el manojo perdido. Definitivamente él iría a la Biblioteca.
El trabajo de su papá estaba lleno de lugares escondidos y libros maravillosos. Por el contrario, la escuela era demasiado aburrida.