¿Puedo tocarte?/Jenlisa(G!P)

T‐21

Pov. Lisa

Conozco a Ruby Jane desde hace unos meses, pero nunca la hubiera considerado una broma.

Hace sólo una hora y media ella había tenido miedo de violarme.

Y una fracción de segundo después estoy besando su cuello, con mi erección desnuda frotando su estómago.

No me malinterpreten: no tuve reparos en el método que eligió para ayudarme a entender, cómo una persona ciega siente atracción (quiero decir, funcionó)

Era su alejamiento, justo cuando estaba convencida de que ella también sentía algo por mí, con lo que tenía problemas.

¿Y la peor parte?

Son las secuelas.

No me habían concedido un momento para lamer mis heridas, por la repentina pérdida de su proximidad física y emocional.

Ni la dignidad de poder volver a vestirme después de un rechazo tan contundente.

De acuerdo esta ciega, así que no podía ver lo vulnerable que estaba de pie desnuda frente a ella, mientras me tocaba las partes más íntimas de mi cuerpo.

Reducida a su esencia, me sentí usada.

Descartada y excitada.

"Dios, desearía poder odiarla ahora mismo" pienso, mientras sus suaves dedos presionan y arrastran mi nalga izquierda.

Si la odiara, tal vez mi miembro se haría flácido y pequeño.

Había terminado mi espalda baja y mi nalga derecha en dos horas, lo que era un nuevo récord para ella.

No había exagerado, cuando dijo que se daría prisa por esa zona para mi beneficio.

Si no estuviera sufriendo por horas de bolas azules, estaría impresionada por lo uniforme que ha ido la parte inferior del cuerpo a pesar de su prisa.

-Ya casi termino-dice en voz baja-Después de esto, necesito trabajar la parte superior de tus muslos desde el frente para que tu gemela, tenga una base plana sobre la cuál mantener el equilibrio ¿Estás de acuerdo con trabajar un turno más largo hoy? Me gustaría quitar esa... área del camino para que podamos pasar a las piernas mañana.

Desearía poder reírme de lo mal que está seguir trabajando, mientras mi miembro endurecido, está a unos centímetros de sus manos.

Pero me obligo a decir:

-Sí, no te preocupes.

-¿Por qué no tienes un descanso de quince minutos, mientras termino esta sección en el tocadiscos?-ofrece en voz baja, como si tuviera miedo de que me vaya a escapar, cuando me da la espalda.

Tal vez deberia.

¿Cómo diablos voy a ocultar mi erección, cuando ella está parada frente a mí?

"Tienes quince minutos para tranquilizar a Limario ¡Corre el tiempo!"

-Voy a ir al baño ¿Crees que es seguro caminar hasta tu casa en una toalla o Rosé está en casa?

Ver el rígido subir y bajar de los músculos de su cuello, se siente como un bálsamo para mi ego herido.

Al menos no soy la única que sufre las secuelas.

Sí, pero ¿Está sufriendo de frustración sexual o simplemente de incomodidad general?

-Rosé está en el trabajo, así que adelante-sin necesidad de más estímulo, corro rápidamente por el césped y salto dos escalones a la vez en un intento de ponerme detrás de la seguridad de una puerta cerrada.