Ella ha estado enamorada de él desde hace tiempo, pero no sabía cómo hablarle sin morir en el intento.
Por eso cada día le dejaba una notita en su cuaderno.
Él nunca se había fijado en ella, ni siquiera sabía quién le dejaba las notas, pero la esper...
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•ETHAN•
Los lunes no son que digamos uno de mis días favoritos, de hecho, no conozco a nadie que le fascinen los lunes.
Cuando llegué al instituto me encontré con Orlando en uno de los pasillos, él estaba hablando con una chica que no conozco, debe ser otra de sus conquistas. Me acomode detrás de él saludándolo como siempre y saludando a la chica que lo acompañaba, que como siempre era otra típica chica rubia y ojos claros ¿nunca se cansa de ellas?
La chica le da un beso antes de alejarse.
Después de unos segundos ella desapareció de mi campo de visión y mis ojos enfocaron otra silueta que reconocí enseguida. En el jardín que se encontraba a la lateral de la entrada se encontraba Olivia recostada bajo un árbol, no sabía bien que estaba haciendo, pero sostenía una libreta mientras comía una manzana. Sonreí involuntariamente y devolví mi vista a mi amigo que me estaba viendo confundido.
—Ni lo pienses Wallas, yo la vi primero—me dijo, yo lo voltee a ver arqueando una ceja, no sé a lo que refería, pero tenía una mirada de advertencia—
—¿Olivia? —le pregunte con mi ceja enarcada.
—¿Olivia? No inteligente, me refiero a.... ahhh, tú estabas pensando en Olivia —me dio un codazo con una mirada picara, se lo que estaba pensando, lo miré con una mirada de pocos amigos. No quería que el pensara cosas que no eran.
El giro su cabeza para ver en mí misma dirección, y ahí estaba ella.
Orlando me volteo a ver para decirme que no tuviera miedo, que ella se parecía alguien agradable y que era muy linda.
A ver, le di la razón mentalmente por sus dos puntos, pero jamás lo admitirá frente a él.
Me deshice de su brazo con el que me dio dos palmadas en la espalda y antes de irme con Olivia le respondí en tono de fastidio.
—Ya Orlando, solo me preocupo por ella. El viernes se le veía súper mal, si tu hubieras estado con ella en la enfermería lo entenderías.
—Si te creo, pero a ver, ¿cuándo en tu vida me habías pedido el numero de una chica? ¡NUNCA! y de repente el día de ayer me preguntaste si yo la conocía, me pediste su número, pero como no lo tenía me pediste el de su mejor amiga para que se lo pidieras a ella.
—Era para preguntarle como seguía —okey eso tampoco sonó bien como excusa ya que él me dio una mirada como diciendo "Ves, te gusta" así que mejor decidí dejar el tema de lado e ir a ver a Olivia, que aún seguía sentada tan tranquilamente bajo el árbol.
Aun no tocaban el timbre para entrar a clases así que me apresuré a llegar hasta ella, le di la vuelta al árbol y me senté a su costado, cuando me acomode por completo vi que estaba dibujando algo en su libreta, decidí quedarme callado porque al parecer ella no había notado mi presencia y no quería interrumpir la concentración que tenía.
