Celos

90 5 0
                                    

A la mañana siguiente me sentía mucho mejor, era sábado por lo que no tendría que preocuparme por los deberes hasta el domingo por la tarde. 

Hoy iríamos a Hogsmeade y había planeado lo que me pondría desde antes de venir al colegio. Me puse una falda blanca corta tableada, con unas mallas de lana con doble vista, eran calientes por dentro pero parecía una tela suave parecida a mi piel por fuera, un saco negro y unas botas altas negras de cuero. Peine mi cabello en ondas y maquille un poco mi rostro. Me veía estupenda.

Por primera vez fue Daphne la que tuvo que esperar a que estuviera lista en la sala común. Al verme dio palmaditas de orgullo y me roció con un perfume fresco de lavanda y vainilla. Decidimos no esperar a los demás y dirigirnos directamente afuera. La nieve cubría el camino y Daphne y yo platicamos todo el trayecto sobre la noche de la fiesta de Slytheryn. Acerca de su encuentro con Blaise que termino en besos y palabras de lo mucho que se gustaban. Las notas que aveces le dejaba en su dormitorio y lo mucho que se estaba ilusionando con la situación. 

Cuando toco hablar de lo mío con Thimothèe trate de desviar el tema varias veces, pero conociendo el carácter de mi amiga y lo renuente que podia ser cuando algo se le metia a la cabeza, fue en vano. -Pero no me puedes decir que no pasa nada entre ustedes, si ya no están ni la mitad del tiempo juntos de lo que estaban antes, eran como uña y mugre- me dijo frotando su nariz y mirando hacia arriba, ella era mucho mas bajita que yo así que cuando dejaba de seguirme el paso me tomaba del brazo para seguir el ritmo. 

-Daph. las parejas cambian ¿de acuerdo?. Estamos en otra etapa, es todo- dije golpeando con mis botas la nieve a mi paso. Me miro de reojo y sonrió para si misma.

-¿Qué es tan gracioso?- dije con una sonrisa de complicidad.

-Que eso es algo que diría una pareja casada-. Y sonrió aun mas amplio. -Una pareja casada con severos problemas en la cama- Rio

-Cierra la boca- Dije escapando una risa. No era cierto. Yo podia tener relaciones con Tim cuando quisiera. ¿No es así?.

Hicimos una primera parada en Honeydukes, compraríamos un rato dulces y me encontraría con Tim en las tres escobas después para tomar unas cervezas de mantequilla. Comenzamos a merodear la tienda y vi a los gemelos Weasley llevar una gran bolsa de todo tipo de dulces explosivos. Estaban riendo y me parecían adorables, eran los únicos otros gemelos que habían en el castillo, pero a diferencia de nosotros, nunca se despegaban el uno del otro. -Hey, ¿ya estas mejor?- dijo una voz detrás de mi sobresaltándome.

-Ah, hola Ron, si yo... siento mucho que hayas visto eso- dije poniéndome nerviosa al recordar el estado en el que me encontraron. -No tienes porque disculparte, te ves bien hasta en un estado psicótico- Fruncí el señor y se arrepintió al instante. 

-No psicótico, es decir... yo no quería decir eso sabes, me refería a que tu eres linda y... aun en un estado así....- Sus mejillas se tornaron completamente rojas y parecía que estaba por colapsar si seguía hablando. 

-Esta bien Weasley, gracias de todos modos- Y le regale una sonrisa. Sus ojos eran de un verde muy hermoso y cientos de pecas cubrían su nariz y mejillas. Ladee la cabeza notando que se ponía nervioso con mi mirada y le hice un gesto para despedirme, parecía un chico dulce.

-Huele como a basura aquí dentro- escuche la voz de Draco acercándose a nosotros antes de que pudiera irme. Y luego dirigió su mirada fría a Ron que estaba frente a mi. -Ah, ya veo de dónde viene-.

Ron empuño sus manos pero no dijo ni una palabra, se dio media vuelta y salió de la tienda hecho una furia. -Eres tan molesto ¿lo sabes?- dije poniendo mis ojos en blanco mientras cruzaba mis brazos. 

-Vamos, una chica mala como tu no puede andar con un perdedor como el- dijo quitando uno de sus guantes de cuero que llevaba en sus manos, dejando a la vista los anillos plateados que adornaban sus dedos, brillaban a la vista delatando el precio que debían valer cada uno de ellos. 

-¿Y eso que andas solo?. Y no traes al guardaespaldas de mi hermano o Crabbe y Goyle siguiéndote a todos lados- dije mientras caminaba para elegir algunos dulces de los estantes.

-Les di el día libre- Dijo con sarcasmo tomando una rana de chocolate. -Así que puedo darte el privilegio de mi compañía unas horas pequeña Nott, ¿a que no es el mejor día de tu vida?- Reí regalándole un pequeño golpe en el brazo y después de agarrar bastantes dulces me dirigí al mostrador a pagar. -¿Cuanto seria?. Dije sacando del bolsillo de mi capa algunas monedas.

Antes de que la señora pudiera responderme Malfoy la interrumpió. -Dame 2 bolsas mas de los mix sorpresa-
Ella los tomo y se los dio ahora dirigiéndose a el.
-Serian 30 sickles- dijo estirando su mano.
El rubio que se había vuelto a colocar los finos guantes saco de su bolsillo una moneda y se la entrego. 

-Solo llevo galeones, quédese el cambio-
La señora le regalo una sonrisa verdaderamente entusiasmada y yo me reía por dentro viendo a Draco regodearse con tanta arrogancia. 

Unas estudiantes de Ravenclaw a nuestro lado veían a Draco con una expresión mucho más interesante y murmuraban cosas a su espalda. Salimos de honeydukes y el frio viento pego nuevamente con nuestros rostros. Habia perdido a Daphne en la tienda, pero habia quedado de encontrarla mas adelante así que no pretendía volver a entrar al bullicio de gente dentro de la tienda de dulces.

Draco comenzó a seguirme mientras comíamos algunos caramelos. -Era cierto lo de regalarme tu tiempo, ya veo- dije llevándome el dulce anaranjado a mis labios. 

-Depende, ¿a dónde vas?- dijo acomodándose su saco y guardando algunos de sus caramelos en el bolsillo. -Veré a Tim en las tres escobas- dije sin dejar de ver la nieve. Se paro en seco y tarde unos segundos en darme cuenta que habia dejado el paso. 

-¿Qué?- dije cruzándome de brazos y con una genuina expresión de confusion. 

-Nada, solo me sorprende que pierdas tu tiempo con alguien como el- dijo emprendiendo el paso de nuevo, lo tome del brazo y lo gire a mi. 

-¿Alguien como él?, ¿Quieres decir guapo, listo, cariñoso...- Le regale una sonrisa y me pase la lengua por los labios. El puso los ojos en blancos y soltó un bufido. 

-Yo soy guapo, muchísimo más listo, pero jamas seria cariñoso. Creo que ese es el problema Nott, tu necesitas a alguien duro, que sepa ponerte en tu lugar- se acerco a mi y me regalo una mirada divertida. Me puso nerviosa al instante y sentí como algo me cosquilleaba en el ombligo. 

-Estas celoso Malfoy- dije susurrando peligrosamente cerca de sus labios, me miraba de manera intensa pero no le solté la mirada. Me ponía muy nerviosa pero quería que no lo notara.

-No hay nada que haga él, que pueda ponerme celoso- Me paso la mano por la cadera y se acerco a mi cuello. -Al contrario, si fuera el tendría miedo, de imaginar todo lo que Draco seria capaz de hacerle a mi novia-. Su aliento era cálido en comparación con el frio aire a nuestro alrededor. Me quede congelada con los labios entreabiertos respirando su aroma.
-No sabes lo que seria capaz de hacerle a tu cuerpo si te hiciera mía- Subió su mano por mi muñeca y la apretó con fuerza, mientras seguía susurrando cosas a mi oído. Olía a manzana fresca y menta, su colonia cara penetraba en mis fosas nasales de una manera deliciosa. Baje mi mirada y recorrí su mandíbula. Tan definida y fina, siempre me pregunte cuantos labios habrían pasado por ahí.

Draco era un sueño, no... era una pesadilla.
Sin embargo, representaba el fruto prohibido que todas queríamos probar.
En el colegio se le conocía a gritos su reputación de caprichoso, mimado y exasperante. Pero queríamos probarlo de todos modos. Como si de un capricho mas tachado en su lista se tratase.

-Te aviso cuando haya cupo en mi lista, para agendarte una cita princesa- 

Soltó una risa y le levante el dedo del medio. -Eres un imbécil- dije empujándolo hacia la pared. 

-Y para tu información, jamás seria tuya- Agregue mirándolo directamente a sus ojos grises.
-Porque para estar conmigo tendrías que superar las expectativas que tengo de una buena follada, y créeme, conociendo a Tim.. son BASTANTE GRANDES- le devolví una ultima sonrisa y me fui. Mirando de reojo cómo me lanzaba una mirada para nada divertida.

DIRTY SNAKES  +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora