Carlos.
Daniel me dio una segunda oportunidad, está vez tengo que tratarlo bien, me esforzaré para formar una familia con mi omega y mi cachorro.
Lo primero que tengo que hacer es cancelar mi matrimonio con Ashley, pero hoy pasaré el día con mi omega, me ganare su confianza y está vez haré bien las cosas, el orgullo es importante pero mi omega lo es más, apenas me di cuenta de eso, lo bueno que no fue demasiado tarde. Aún tengo oportunidad.
Dejaré que mi padre se encargue de mi mamá y mis hermanas, no las quiero volver a ver y ya se los deje claro.— A Do-donde vam-os.— Estoy caminando junto a Daniel alrededor de las casas de la manada, quiero llevarlo a comer algo dulce.
— Es una sorpresa, ya lo verás.— Esta temblando un poco pero no lo culpo, todos lo miran atentamente.
— Carlos quiero volver.— Me detengo al escucharlo hablar sin su constante tartamudeo.
Llegué a pensar que era de nacimiento, ¿Yo lo cause?
— ¿Porque? Nadie va a hacerte daño, yo te cuido, vamos a comer algo dulce, te va a gustar.— Me quedé mirandolo, el pareció dudar pero luego tomo mi mano.
Yo apreté su mano y note como se relajo al instante, seguimos caminando hasta llegar a un pequeño negocio de dulces. Daniel quedó fascinado con los dulces que hay en este lugar. Caminamos alrededor de la tienda, el mira atentamente todos los estantes donde hay dulces pero no me pide ninguno.
— ¿Cual quieres?— Le pregunté.
El me miró por un rato para luego negar.
— N-no quiero molestar.—
— No molestas, pídeme lo que quieras, yo te lo conseguiré te lo mereces. Vamos escoje los que quieras.— El me miró por un momento.
Parece estar dudando, en sus ojos hay algo de desconfianza pero al final se decidió por escojer, aunque solo eligió uno, por más que le dije que tomara más no quiso, así que compre algunos de los que vio antes para que los coma en la casa.
Salimos del local después de pagar y caminamos de vuelta, Daniel se comía un muffin que le compré. Parece disfrutarlo mucho porque sonríe con cada bocado que da.— ¿Está rico?— Le pregunté mirándolo fijamente.
— Sii, ¿Quieres probar?— Acercó el muffin a mi, yo le di una mordida y efectivamente, está rico.
— Está muy rico.— Es sonrió y siguió comiendo el muffin.
Seguimos el camino a casa, la tarde la pasaremos viendo películas mientras comemos pizza y comida chatarra. El doctor dijo que Daniel debe tener una alimentación sana pero una vez al año no hace daño. Pedí pizza y hamburguesas, luego prepare papas fritas, refresco de fresa y unos dulces de los que compramos en el local.
Puse películas animadas lo que pareció gustarle a Daniel, cuando llegó la comida y estuvo todo preparado comenzamos con las películas.Películas animadas y de comedia, Daniel parece estar feliz y si el es feliz entonces yo también lo soy. Se hizo de noche, Daniel se durmió en mi pecho mientras veíamos una película. Apague la televisión y nos acomode mejor para cubrirnos con las cobijas, Daniel se aferra a mi camiseta mientras deja salir su dulce aroma y respira tranquilo.
Es bueno estar así con el, es relajante y me hace enamorarme de el, es demasiado lindo.⁂
Desperté primero, Daniel sigue aferrado a mi camiseta, me quedé observándolo por unos minutos hasta que despertó. Cuando me miró se tenso un poco pero se relajo segundos después.
Bese su frente.— Buenos días.— Dije.
— Bu-buenos días.— Respondió sonrrojado.
— ¿Que quieres desayunar?— El me miró por un momento.
— L-lo que sea e-está bi-en.— Aveces tartamudea mucho pero aveces casi no lo hace, llamaré a un doctor para que lo revise, tal vez es algo físico, si no tendré que buscar a un psicólogo para licántropos.
— ¿No hay algo que quieras? Tal vez unos hotkakes o un huevo estrellado u omelete.— Pregunté, el pensó por unos segundos pero negó.
— E-estoy bien con cu-cualqui-quier cosa, d-de verdad.— Suspire rendido.
— Está bien, entonces serán hotkakes,¿De acuerdo?— El asintió feliz, parece que tome la desición correcta.
Nos levantamos de la cama para ir a desayunar, mientras Daniel se baña yo le pido a Perla qué haga nuestro desayuno.
— ¿Dónde está Ashley?— Le pregunté a Perla.—
— Ella salió temprano a visitar a sus padres, dijo que desayunara ahí.— Asentí.
— Está bien, me avisas en cuanto llegue.—
— Si señor.—
— Hermano!— Bruno bajo las escaleras con una maleta en sus manos.
— Bruno, ¿Te vas de nuevo?—
— Así es, Dani ya está bien así que puedo irme tranquilo, confío en que lo cuidarás, iré a buscar a alguien.— ¿Alguien?
— ¿A quien buscaras?— Pregunté curioso.
— Alguien importante.— No me dejó preguntar más porque salió corriendo.
— Volveré cuando lo encuentre!— Gritó desde la puerta para salir corriendo de nuevo.
Daniel bajo las escaleras, está vestido con ropa mía, un shorts que normalmente uso como pijama y una camiseta gris que le queda grande, resalta un poco su vientre abultado. Se ve demasiado tierno.
Desayunamos y volvimos a pasar el resto del día juntos, jugamos en el jardín, yo en mi forma de lobo mientras Daniel me lanzaba una pelota, fue algo humillante pero ver su risa me hizo olvidar todo el orgullo para complacer a mi omega.

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Silencio
WerewolfDaniel es un pequeño omega que fue abandonado por su manada a los 7 años, su hermano mayor, Jonathan, se quedó con el y lo cuido y crío el solo, Jonathan es uno de los pocos alfas que saben de la importancia de los omegas en el mundo, por eso cuido...