LUNA DE CRISTAL

CAPÍTULO 16

- Alfa esto se está volviendo una masacre. Debemos de atacar de una vez o mas personas inocentes morirán - el general es quien me explica la situación actual.

- Pero a quien vamos a atacar. A los vampiros? Ellos también están sufriendo bajas y el rey me dio su palabra de que ellos no son el enemigo.

- Entonces seguimos aceptando las muertes de los que viven en las fronteras? Alfa, el consejo sobrenatural no está haciendo nada al respecto; los vampiros andan con muertes al igual que nosotros, en el aquelarre de los brujos hay secuestros, todo el mundo sobrenatural está siendo un campo de guerra; si no empezamos una batalla nunca sabremos quién es nuestro enemigo.

Ahora que lo pienso, el general tiene toda la razón, nos hemos estado defendiendo más no atacado y ya es el momento de mostrar ira por los caídos.

- Me diste una gran idea, por eso te hice general del ejercito. Muy bien, haremos lo siguiente.

Le explico el plan que tengo en mente, si nadie hace nada pues es momento de tomar las riendas de la situación; el plan también incluye a Ethan, le comentaré todo y cómo se desarrollará.

Terminada la reunión con el general que es hijo de un gran amigo de papá y amigo mío de la infancia, voy donde mi familia; Perla cada día se siente más cansada y me preocupa, ando con una paranoia que no me deja tranquilo y es obvio que la situación en la que estamos no ayuda para nada.

- Amor, ya llegué.

La llamo pero nada, ninguna respuesta, en eso Sansón se acerca corriendo y ladrando desde el segundo piso; me alarmo y voy corriendo a donde me indica el canino.

Abro la puerta de nuestro cuarto y veo que Perla está tirada en el suelo mojada por un líquido con el celular en la mano e inconsciente, sin perder mas el tiempo la levanto con todas mis fuerzas para llevarla al carro y dirigirme al hospital de la manada.

- Lobito, mis bebés - me habla con una voz débil y sin poder abrir sus ojitos hermosos.

- Ya estoy aquí amor, no me vayas a dejar, ya casi llegamos al hospital.

Llegamos al hospital y no me preocupo en estacionar bien, la salud de mi Luna anda en peligro.

- AYUDA!! QUE ALGUIEN AYUDE A MI ESPOSA!

Una enfermera se dirige a nosotros y detrás de ella unos paramédicos con una camilla aparecen, la llevan a la sala de parto, le ponen la ropa adecuada y comienza a gritar por los dolores; al parecer ya despertó. Me cambio con la ropa que me dan y entro con ella para acompañarla en este momento.

- Muy bien, empezaremos. Señora, a la cuenta de tres pujará. De acuerdo?

Ella solo asiente, le doy mi mano para apaciguar el dolor, el doctor indica que puje y con todas sus fuerzas lo hace aunque en el proceso casi rompe mi mano. Un primer llanto inunda la sala y le dedico una sonrisa a su progenitora, el doctor indica lo mismo y un segundo llanto llega a nuestros oídos.

- Amor, lo hiciste bien, gracias mi Luna hermosa, gracias por llegar a mi y darme una familia.

- Gracias a ti lobito por darme la familia que siempre quise - me inclino para darle un beso en sus labios y en su frente que está sudada.

Terminan todo el proceso correspondiente para luego llevar a Perla a una habitación en donde nos traen a nuestros hijos ya limpios y con sus mantitas.

- Alfa, aquí están sus hijos, felicidades.

- Muchas gracias - me acerco para cargar a mi princesita y se lo paso a su madre para yo cargar a mi príncipe - Hola mis amores, que alegría tenerlos en brazos, no saben cuánto los hemos esperado junto a su mamá.