⇋ 025.

1.1K 134 0
                                    





CAPITULO VEINTICINCO

CAPITULO VEINTICINCO

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


2172.  Bosque de Pandora.

-Estas seguro que no te castigaran? -preguntó la joven riendo.

Neteyam revoleo los ojos, alejando unas lianas para que ella pase hasta llegar a la reserva que siempre iban en noches especiales.

-Ya hace unos dias pedí permiso -el toma sus manos caminando delante de ella- Tenemos que festejar tus diecisiete.

Ella ríe -y a mi padre también le pediste permiso?

-Claro que si. Fui y le dije "Querido Norm, me permites llevar a tu hija muy lejos de ti para besarnos como regalo de cumpleaños?"

Ambos rieron, Neteyam se acostó en el suave césped mientras ella seguía de pie saboreando el frío suelo con sus pies.

-Las estrellas se ven muy bonitas hoy -compartió el chico. Shafira inclino su cabeza para ver las estrellas.

-Viste que hoy la Tsahìk me dijo que mi comida era muy rica? lo notaste?

Neteyam sonríe estirando su brazo para que la chica se recueste a su lado y así poder abrazarla.

-Por qué estas hablando de mi abuela?

La menor se ríe, apoyando una mano en su pecho para elevar la cabeza y conectar sus miradas risueñas -Por que no podría hablar de ella?

-Porque no quiero que hables de ella.

-Y a mi que me importa?

La ceja inexistente de Neteyam se alza, la chica se ríe y agacha la cabeza.

-Tengo una teoría de por que Ivol y Tilí podrían estar profundamente enamorados.

Shafira suelta una carcajada, asustando a los pocos insectos que los rodeaban. -Que dice tu teoría?

-Bueno -Se prepara tragando un poco de saliva y empieza a acariciar inconscientemente los costados de la chica. -Los ikranes están conectados a ti de por vida, lo que significan que es parte de tu ser. Y yo te amo y eso hace que ame también a Tìlì y por lo tanto Ivol también te ama a ti y a Tìlì.

Una amplia sonrisa se dibuja en el rostro de ella -Neteyam, los Ikranes pueden tener sus propios sentimientos...

-No importa.

-Si lo hace.

-No voy a discutir con tu necedad, así que mejor dejemos el tema aquí.

La chica se ríe mientras transforma su tranquilo rostro a uno confundido. -donde aprendiste esa palabra?

-cual?

-Necedad.

El suspira mientras siente a la chica enderezarse para estar mas cómoda frente a el, a continuación ella empieza a trazar las líneas azules de su cuerpo con su dedo índice; a su tiempo, Neteyam copia su acción y empieza a trazar sus lineas de la cadera con su pulgar.

-Me la contaste en una de tus historias- el informa tocando ahora una de las trenzas de Shafira.

-Tienes que volver a hacérmelas, no quiero que se me hagan rastas como a tu papá.

El mayor se ríe inclinando un poco au cabeza hacia adelante. Esta acción provoca un tipo de revoltijo en el estómago de Shafira, siente sus hormonas alterarse tan rápido como volar un banshee.

Neteyam humedece sus labios, solo con la intención de que la chica concentre su atención en estos. Cosa que logra por cierto, percibiendo una sonrisa aparecer en los labios de ella.

Shafira se inclina sobre sus rodillas para acercas sus rostros; creando ahora esa tensión que tanto les gustaba a ambos. Ella sonríe de manera coqueta provocando que el se incline hacia adelante tomando sus caderas para que ella no caiga hacia atrás. Ante esta acción Shafira lleva su torso hacia atrás un poco, disfrutando de vacilarlo.

El empieza a reírse, pero es interrumpido por los suaves labios de la chica, que encontraron su desesperado camino hacia los de el. Shafira lleva sus manos a sus bíceps, sujetándose de estos para no tambalear. Con menos tardar, ella se sube de costado sobre su regazo, teniendo que doblar todo su torso para poder besarlo.

La incomodidad no era un factor importante para ella en estos momentos, solo quería seguir besándolo un rato más. Una intuición extraña lleva a Shafira a hacer lo siguiente:

Torpemente va bajando sus besos hasta llegar al inicio de su quijada. Los pulgares de Neteyam hacen presión en su cadera creando una sensación placentera para ella.

El deja el contacto llevando sus manos a la parte superior de sus muslos y con toda la fuerza posible la levanta de su regazo para poder sentarla de nuevo pero esta vez con ambas de sus piernas en los costados de el.

Shafira da un ultimo chupeton a su quijada para separarse y sonreírse a través de sus ojos. Neteyam se endereza más aún y levanta el mentón buscando sus labios.

Ambos vuelven al beso, disfrutando cada parte de este. Pero la chica empieza a tratar de separarse.

-Deberíamos volver...

-No -dice el, profundizando aun mas el beso.

-Si.

Ella ahora apoya su dedo indice en el pecho de Neteyam, provocando que el vuelva a apoyar su cuerpo sobre la roca. Un sentimiento malhumorado se hace presente en el pecho de Neteyam.

-Tu quieres volver? -pregunta, acariciando los costados de sus muslos de arriba a abajo.

-No -Ella deja un rápido beso sobre sus labios- pero tenemos qué.

-Vamos Shafira, están todos durmiendo a esta hora. Nadie te va a estar controlando.

Ella empieza a dudar, encontrando la razón en las palabras de el, ademas su contacto físico no ayudaba en nada a la persistencia.

Neteyam vuelve a lamer sus labios, provocando que las hormonas de la chica den un vuelco. Ella sonríe antes de juntar sus labios otra vez, disfrutando de cada uno de los movimientos de el.

Inconscientemente, Neteyam empieza a apretar las caderas de la chica y a guiar sus movimientos. Ahora, con ayuda, Shafira movía su pelvis de un lado a otro.

Shafira y Neteyam no habían llegado tan lejos como para rozar sus sexos, solo besos. Esto era una nueva experiencia para ambos.

Sorprendente, pero placentera.

Shafira abrió los ojos y se separó cuando se dió cuenta de lo que estaba pasando. -Eso es...?

Sus movimientos no se habían detenido, solo intensificado. Neteyam esboza una gran sonrisa -Si.

Shafira piensa un poco antes de hacer su próximo movimiento.
Con ayuda de sus manos, se mueve hasta salir de arriba de Neteyam y se recuesta en el frío césped.

El chico la mira confundida, hasta que ella abre un poco sus rodillas y el chico se mueve tan rápido como puede. Se posiciona entre sus piernas y apoya sus antebrazos a los costados de la cabeza de la menor. Ambos se vuelven a unir en un profundo beso, pero distinto a los demás esta vez.

Neteyam se separa de ella un poco, a una distancia aceptable para poder hablarle sin escupirle en la cara.

-Ey yo... -Shafira sonríe, acariciando las trenzas que caían a los costados de sus ojos.

Entonces ella se une en un beso de nuevo, dejándolo sin habla. Shafira empezó a detallar con sus dedos todos los músculos abdominales del chico. No paró de tocarlo hasta que llegó a donde sus músculos se acentuaban hacia abajo, creando una v poco marcada.

Neteyam sonríe sobre el beso, sintiendo como su cuerpo se empezaba a llenar de sensaciones extrañas; justo como se las describieron sus amigos.

BIGGER THAN THE WHOLE SKY• Neteyam Sully Donde viven las historias. Descúbrelo ahora