✯ El pibe de al lado ✯ Reese Wilkerson ✯

Tenemos tiempo

Al despertar sentí unas manos alrededor de mi cintura, me giré lentamente para ver a la persona a mi lado... Reese... Seguramente era un sueño... O quizás no, lo último que recuerdo de anoche es que estaba llorando en los brazos de Reese y que luego comencé a beber más, patético.
Él babeaba y de su nariz salía un pitido, su cabello despeinado, definitivamente no era un sueño. Que yo sepa no hicimos nada... O eso espero, él no tiene remera pero creo que lleva una bermuda, no la veo por las frazadas pero la siento en el roce de sus piernas con las mías.
Pará, yo anoche no tenía puesto el short.
Me senté de golpe, me chupa un huevo que el cara se despierte, me destapé y me puse de pie, me miré al espejo... LLEVABA MI PUTO PIJAMA, ¿¡EN QUE MOMENTO ME CAMBIÉ!?

— Adara, ¿qué pasa? — Él me miró, aún medio dormido bostezo.

— ¿¡ME COGISTE!? — Parecía algo asustado cuando grité así, me tapé la boca algo arrepentida.

— No! No te tocaría jamás sin tu consentimiento — De todas las personas en el mundo nunca pensé que Reese diría algo así.

— ¿Y cómo explicas mi ropa? — Murmuré, sentándome a los pies de mi cama.

— Te vomitaste toda, con Cynthia te trajimos a tu casa, ella te ayudó a bañarte y a vestirte, tú suplicaste que me quedara, le dije a mamá que te sentías mal y me dejó quedarme lo cual hice... Oh... — Tomó el vaso con agua y una pastilla que estaba en el mueble a su lado y me lo extendió — Para la resaca — Me dió una sonrisa, yo tomé las cosas, puse la pastilla en mi boca y con ayuda del agua la tragué.

— ¿Sabes?, la primera vez que me emborraché fué cuando tenía 10 y fué por accidente — Dije, sentándome a su lado de nuevo, él me miraba — Recuerdo que habíamos salido con mi hermano, él tenía una novia y compraron una botellita pequeña y tenía algo azul adentro, me dejaron sola con la botellita y me la bebí entera... No recuerdo que pasó después pero sé que al otro día me sentía horrible.

— Una mini Adara borracha — Soltó una risita al imaginarse eso, yo reí.

— Durante el verano mi hermano vendrá — Dije, gateando hasta sentarme junto a él, apoyé mi cabeza en su hombro.

— Nunca me has hablado de él... ¿Cómo se llama? — Sus dedos jugando con mi cabello.

— Iván, tiene 20, capaz se lleva bien con Francis... ¿Francis viene en las vacaciones? — Murmuré, no le había contado lo que pasó con su hermano y tampoco lo haría.

— Eso espero, cuándo lo conozcas sabrás lo genial que es — Con su tono deduje que sonreía, levanté un poco mi vista, viéndolo sonreír... Tan lindo.
Tomé sus mejillas y lo besé, no fue un beso muy largo pero si puso su mano derecha sobre mi cintura, al alejarme nos miramos en silencio, sus mejillas sonrojadas, probablemente igual que yo.
— Realmente me importa un carajo que hagas conmigo mientras estemos solos — Murmuró, sus ojos pasando por mis labios por un segundo — Sé lo que sientes por mi y con que yo lo sepa me basta aunque tú no quieras nada más que amistad por ahora — En sus ojos se podía ver todo el amor que sentía por mí, acariciaba mi cintura con amor por debajo de mi remera.

— ¿Qué fué lo que dije?... Después de que lloré — Él frunció el entrecejo algo confundido, una sonrisa divertida en sus labios.

— Adara, lloraste millones de veces, eres la persona más sensible que conozco — Soltó una risita, yo le miré mal — Pero sé a lo que te refieres — Suspiró — Dijiste que sentías un montón... Bueno, más bien dijiste millón de cosas por mí y que no sabías cómo explicar esas cosas que sentías, que no querías que te dejara nunca, que si era necesario jamás regresarias a Argentina y olvidarias a todos los de allí... Exagerada — Otra risa escapó de sus labios, yo le tiré un almohadón a la cara, él lo apartó y rió, yo ahora lo miraba atenta — Y otras cosas más, pero el resumen sería que por ahora no quieres nada más que amistad y que te gusto... Oh, también que quieres que te met- Cállate — Puse mi mano sobre su boca antes de que dijera alguna estupidez que arruinara todo lo tierno de esta conversación.