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¿De verdad estoy aquí?

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¿De verdad estoy aquí?

¿Esto es real?

¿Merezco vivir mejor?

Tres preguntas que cuestiono todo el tiempo, tres grandes dudas que inundan mi mente todas las noches, hasta parecen ponerse de acuerdo para atormentarme cada que quiero descansar y es que todo parece irreal para la vida que llevaba desde hace unos meses, años.

Ojalá poder decirle al pequeño Seungmin que ya somos felices, que no somos inútiles y que si merecemos abrazitos y besitos, daría todo por decirle al pequeño Seungmin que no merecía nada malo.

Todo parece tan irreal que cuando me levanto en las mañanas aún parece que escucho a mi madre llamarme, que cuando me equivoco en alguna cosa la escucho regañándome y sigo soñando que me golpeará si hago algo que antes no hacía, un gran ejemplo, comer tres veces al día. Si ella lo supiera estuviera tan enojada, según ella se desperdicia comida.

Papá me ha dicho que es sano comer bien y de ahora en adelante creeré en él y en todo lo que me diga será bueno para mí, lo sé, mi corazón y mi cerebro lo dicen.

Confianza.

La confianza, la que nunca tuve de niño y que ahora me cuesta tener.

La confianza para un niño, suele presentarse cuando se sienten respetados, comprendidos, alentados y acogidos en una situación de diálogo y respeto. La razón de la confianza reside en lo profundo e íntimo de cada uno de nosotros y cada persona vive esa sensación de confianza según su personalidad, según la persona quien está a cargo.

¿La confianza en Kim Sunghyun alguna vez existió?

Claro que existió por un par de años, pero no fue suficiente tiempo para un pequeño niño.

No fue suficiente para mí y jamás lo será si se trata de ella.

Pero, ¿ahora importa eso? No, porque yo estoy avanzando, estoy saliendo adelante y recordar eso jamás me hará bien. Jamás avanzaré si pienso en aquello todo el tiempo, jamás avanzaré si sigo pensando en todo lo que pudo pasar si papá jamás se hubiera ido, en todo lo que pudo pasar si yo hubiera sido un mejor hijo para mi madre.

Y todo recae en el hubiera y como muchísimas veces dicho, el hubiera no existe y no existirá jamás.

Pero, ¿así de fácil es dejar atrás el hubiera?

Claro que no lo es y no lo será, porque estoy dañado por dentro, estoy dañado emocionalmente y eso jamás se podrá superar ni dejar atrás.

Jamás.

Y si alguna vez alguien me pregunta si podré olvidar todo el daño que recibí por años, yo me atreveré a responder que no, muchas personas pensarán que es fácil porque ya estoy seguro, porque ya estoy con las personas correctas que me aman y me tienen paciencia.

❝¿𝗧𝗼𝗱𝗼 𝗯𝗶𝗲𝗻, 𝗞𝗶𝗺?❞ ˒•🖤 ݈݇⎼ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora