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Jimin le platico a Suni todo lo ocurrido hace unos minutos. La omega se quedó perpleja al oír todas las palabras del menor y más porqué este parecía ya no tenerle miedo al alfa.
—Jimin — pronunció ecuánime, el menor la miro, sonreía tierno —. ¿Ya no le temes al señor Jungkook?
El omega no dijo nada por unos segundos, no sabía con exactitud si aún le temía.
—No lo sé— suspiro confundido, al sentarse en uno de los taburetes de la cocina miro a la mayor —. Él me ayudó y estoy agradecido por eso.
La omega sonrió.
—Trata de acercarte más a él Jimin, verás que no es malo.
—Creo que tiene razón.
Ambos omegas siguieron por minutos platicando de cosas triviales y ordenado todas las comprar hechas por Suni.
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Jungkook conducía rumbo a su mansión, se encontraba muy cansado. En los últimos días tenía mucho más trabajo y eso era un poco tedioso ya que no dormía muy bien y sus energías se desgastaban con facilidad.
Unos minutos después, llegó finalmente a la mansión. Las rejas se abrieron automáticamente dando paso a su auto, cuando estuvo dentro lo estaciono.
Bajando del auto soltó una gran bocana de aire por el cansancio y por sentir su cuerpo demasiado tenso. Se adentro a su mansión y miro a ambos lados, se extraño un poco al no encontrar a los omegas, pero sus aromas aún permanecían. Sonrió débil y camino en dirección a la cocina, intuía que ahí se encontraban.
Jimin al sentir el aroma del alfa sonrió sin darse cuenta, ya no temía tanto su llegada como las otras veces. Se puso de pie y miro a las puertas de la cocina, su corazón comenzó latir demasiado rápido al ver al mayor parado mirándolo con una sonrisa.
—Buenas noches señor — la omega hizo reverencia, recibiendo al alfa.
—B-buenas noches señor Jungkook — farfulló nervioso, también hizo reverencia.
Jungkook solo asintió y se acercó un poco a ellos.
—¿Cómo estás? — su pregunta fue dirigida al menor —. ¿Ya no te sientes asustado?
El omega trato de calmarse, suspiro bajito y decidió responder a las preguntas del alfa.
—N-no — respondió sonriendo con sutilidad —. Muchas gracias por lo que hizo por mí.
