Parte dos: 27

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Xiao

Meses despues...

Venti desapareció hace 3 meses y desde ese entonces no he sabido anda de el.

Lo ultimo que supe fue cuando salio de mi casa a ninguna dirección especifica. Por un momento pensé que estaría con Childe o con alguno de sus amigos cercanos, pero a la final no estaba.

No sabia nada, absolutamente nada.

Y conforme pasaban los meses, se sentía una tortura continua el no estar a su lado. Tal vez, sea por la marca que ambos teníamos., lo que me hacia necesitarlo cerca. O tal vez solo sea amor.

No podía soportarlo mas.

—Maldita sea—grito arrojando el espejo del baño al piso propienda a pedazos. —Te necesito tanto.

Lagrimas de desespero volvían a salir de mi rostro. No podía contenerlas por mas que quisiera, simplemente salían y salían.

Odiaba este dolor, odiaba esta sensación de necesitar a alguien cuando se supone que jamas lo haría.

Pero a final de cuentas solo fue una suposición.

—Donde mierda estas—aprieto el puño con rabia mientras recuesto mi cabeza en la fría pared.

Estiro mi mano volviendo a agarrar la botella de licor que tenia antes arrogando la bebido directamente a mi boca a la vez que salgo del baño para volver a acostarme en la habitación que era antes de Venti.

Todavía seguía su olor ahí y era la única manera en la que podía tenerlo cerca.

Me tiro en la cama con mi cabello desarreglado y con una pijama que realmente no recordaba la ultima vez que cambie.

Saco de mi bolsillo un cigarrillo y lo llevo a mi boca mientras desabrocho la camisa de pijama que llevaba puesto, poniendo al aire mi cuerpo marcado.

Prendí el cigarrillo y volví a tomar de la botella de licor regándola ligeramente por mi boca hasta llegar a mi pecho.

—Puta mierda—bufo dando otra calada.

Me veía tan lamentable.

Y me sentía de la misma forma.

No recordaba la ultima vez que me afeite, o cuando arregle mi cabello y peor aun cuando tome un baño.

Cerré los ojos por un momento sintiendo ligeramente el olor de feromonas esparcidas por el lugar. Y no eran cualquier feromonas, eran las feromonas de mi Venti...

Frote un poco las almohadas de la habitación sintiendo como se exparcian mas por el lugar.

Se sentían tan bien.

El olor a Cecilias y a manzanas inundo mi nariz. Y sentí como si de nuevo, mi pequeño omega estuviera ahí conmigo.

Sentía como si sonriera en mi pecho, llenándose de mi olor o como estuviera jugando con sus cedidos en mi pecho buscando algo de calor de mi cuerpo.

Pero a la final, solo fue un fugaz sentimiento que poco a poco se desvanecía.

Ahora que ambos teníamos la marca del otro, podía sentir sus feromonas esparcidas por el lugar con mas fuerza que antes. Pero como ya habían pasado 3 meses, poco a poco esas feromonas empezaban a desaparecer.

Lagrimas espesas empezaron a rodar de mis ojos mientras los recuerdos de mi pequeño llenaban mi cabeza.

—Te amo tanto, mi pequeño—murmure al aire como si Venti estuviera ahí.

Reí irónicamente por lo bajo sintiendo como iba a delirar un día de estos.

—Señor—escuche una segunda voz sacándome de mis pensamientos.

Ladee mi cabeza mirándolo con las pocas fuerzas que me quedaba.

—Que quieres Kazuha—volví a darle otra calada al cigarrillo.

El peliblanco asintió algo nervioso.

—Su padre llamo de nuevo y dijo que-

Corte su habla antes de que pudiera decir algo mas.

—No me interesa, Kazuha—volví a darle otro bocado a la botella. —Y si no tienes nada que decir es mejor que te vayas.

Lo reprendí viéndolo salir del lugar de nuevo.

Solté un largo suspiro de contracifra mientras pasaba una de mis manos por mi rostro.

Mi padre insistía con demasiada fuerza su comunicación conmigo, cada día volvía a llamar esperando una respuesta de mi parte.

Lo cual no iba pasar.

No tenia fuerzas para hablar con el, y peor aun para hablar con alguien mas allá de las personas que estaban en mi casa.

Por mensaje de Kazuha me había enterado que mis hermanas también querían hablar conmigo y sobretodo cierto fatui molesto también lo requería.

Probablemente Childe también se haya enterado de todo lo que paso con Venti, pero aun así el menor no estaba en casa de dicho Fatui.

Volví a dar otra calada a mi cigarrillo sin tener la menor idea de que hacer.

Las únicas medidas que tome en respecto a la búsqueda de Venti, fue decirle a Aether que divagara acerca de información importante de su paradero. Pero por mas que buscara y buscara.

No había nada.

—Maldita sea—volví a insultar bebiendo lo ultimo del licor antes de arrojarlo a algún lado de la habitación.

Necesitaba respuestas, necesitaba saber donde estaba el menor.

Necesitaba de mi omega.

Di otra calada a mi cigarrillo a la vez que sentía ciertos pasos que veían corriendo a la habitación. Supuse que era Kazuha con otro mensaje de mi padre o de mis hermanas.

Di la vuelta a mi cuerpo en dirección contraria a la puerta mientras estiraba mi cuerpo y olía las frazadas de la cama.

—Pedazo de idiota, te vez como la mierda.

Escuche una voz familiar desde la puerta pero para mi sorpresa no era de Kazuha, a su vez era de mi rubio asistente que venia con todas sus prendas desarregladas, sudando y con su cabellera rubia pegada a su frente.

—Ya se que me veo como la mierda, no necesitas recordarmelo—divague volviendo a estirarme en la cama. —Pero porque te vez tan desalineado—reclame mirándolo de arriba para abajo.

Aether soltó una sonrisa victoriosa a la vez que se le iluminaban los ojos.

"Algo paso.." "Acaso sera..."

No, no podía hacerme vanas ilusiones, durante estos meses existieron muchas ocasiones en las que supuestamente habíamos encontrado a Venti y no quería volver a ilusionarme de la misma forma que lo hice antes.

—No, lo digas si no tienes información verídica—rete captando su atención.

Aether saco de detrás suyo una carpeta la cual me arrojo a la cama.

La abrí de mala gana sin ilusionarme mucho con la idea, pero rápidamente la sangre se me heló por completo cuando mire esa silueta...

Esa silueta, junto con esa cabellera y sobretodo esa sonrisa que conocía tan bien.

Lo mire de vuelta con una palpitación increíble en el corazón y una pequeña señal de esperanza.

—Xiao, encontramos a Venti—aseguro finalmente con una sonrisa de orgullo y satisfaccion.

Finalmente se donde estas, mi pequeño.

Paga Con Placer || Xiaoven Fanfic Omegaverse || Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora