El lado oscuro de la corona © ✔️ [+21] [Oscura Monarquía #1]

~|CAPÍTULO 19|~

CAPÍTULO 19

Amber.

—¡Ya no lo soporto más! — la voz de Leila entrando en el salón me hizo dar un respingo.

—Nena...¿Qué pasa?

—¡Marcos , eso pasa! Es tan...insaciable ¡Menudo asco! Es que no lo entiendes ¡Quiere follar a todas horas! ¿Tienes idea de todas las veces que he tenido que fingir un orgasmo? El muy capullo es tan...

—Estás hablando de mi hermano, Leila—gruñí. A pesar de la mierda de relación que tenía con mi padre , Marcos y yo no teníamos ningún problema.

—¡Es que me da asco!—me sujetó de las caderas y me pegó a ella—Sabemos que él no tiene lo que me gusta...

Cuando sus labios se dirigían a los míos, me separé.

—Leila, aquí no.

—¿Qué ? Pero si a ti te da igual. Hemos follado en cada salón de este sitio ¿Por qué te echas para atrás ahora?

—No estoy de humor, es todo.

—Echemos un polvo y verás que te pones de maravilla...

—Oye...

Sus ojos me examinaron cuando se detuvo frente a mí.

—Solo déjamelo a mí , súbete en esa mesa.

Miré la mesa con el ceño fruncido. Un poco de sexo no me vendría mal. Después de todo, si todo salía bien todos mis planes saldrían pronto a flote.

Me subí en la mesa. El vestido que llevaba ese día era por las rodillas y de falda abultada. Ella me examinó.

—Abre las piernas.

Sus palabras fueron suficiente para que me prendiera. Me sentía rara. Es cierto que habíamos tenido sexo millones de veces. Me atraía pero...¿estaba enamorada? Por momentos creía que sí, pero también creía porque era mi primera experiencia sexual. ¿Se sentiría igual de bien con un chico que sí me gustara? Había estado con Guillermo, pero a pesar de estar muy bueno y ser un experto en la cama no me gustaba tanto. Al principio creí que era sólo porque me gustaban las chicas , pero luego pensé que tal vez y solo tal vez no había conocido al chico indicado.

Sus manos levantaron mi vestido y me quitaron las bragas. Su boca fue directo a mi sexo, besándolo y chupándolo. Gemí con fuerza cuando introdujo la lengua, aumentando las sensaciones. Era delicioso. Aunque me gustaran también los chicos sabía que seria difícil olvidar a Leila , con ella había sentido mi primer orgasmo y lo más cercano a una aventura.

Me estaba a punto de correr cuando separó su boca y comenzó a usar los dedos. Sacó y metió tres de sus dedos en mi interior llevándome a la locura. Puse los ojos en blanco cuando otro dedo se hizo presente y me corrí sobre su mano. La jalé del vestido para ponerla de pie y la senté en la mesa. Esta vez fui a por su vestido y lo safé , dejando sus enormes pechos al descubierto. Me apoderé de ellos con la boca y ella me sujetó de la nuca , guiándome. Mordí sus pezones haciéndola gemir. Estaba tan caliente que podría...

Entonces la puerta se abrió.

Entró Francisco , a quien llevaba días sin ver , por cierto.

Al ver la escena se quedó petrificado. No es para menos, la verdad. Mis bragas estaban en el suelo y yo tenía uno de los pechos de Leila en la boca mientras amazaba el otro. Pensé que estaba roja de vergüenza. Esta clase de situaciones no me gustaban mucho. Pensé en girarme hacia Leila para decirle que nos piráramos de allí , pero ella fue hacia Francisco. La miré con el ceño fruncido cuando a medio camino se giró hacia mí.