La Sultana Nurbanu

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Narra Nurbanu

Por lo que había explicado Canfeda, ahora que el príncipe Selim había sido nombrado el gobernador de la provincia de Manisa, eso lo convertía en el heredero principal al trono y eso le daba mucho más poder.

Estaba recorriendo mí nuevo palacio en compañía de Canfeda, hasta que algo llamo mí atención.

Una mujer que nunca había visto en el Harem, y se notaba que no era una criada ya que por su atuendo era alguien de mí nivel, estaba por acercarme para presentarme, pero me detuve abruptamente al escuchar lo que había dicho.

-La llevaré a sus aposentos, su alteza dijo que debe prepararse para esta noche- dijo una criada del Harem que estaba con ella.

-Esta bien, por favor informale al príncipe que iré a verlo en un momento-

Allí mis impulsos me dominaron y me acerque a ella para aclararle ciertas cosas.

-Sultana- dijo la criada que estaba con ella haciendo una reverencia hacia mí, ella en cambio no lo hizo.

-Quien eres tu? Y quién te crees para ir a ver a su alteza cuando se te de la gana-

Ella se sorprendió al ver cómo le hable, me miró de arriba a abajo, algo que me molestó aún más.

-No se quién eres, pero te aclaro que yo soy la única mujer en la vida del príncipe Selim, así que apartate de mí camino- al escuchar el nombre del príncipe Selim relajo su expresión e hizo el ademán de hablar.

-Disculpa sultana, pero se esta equivocando, yo no-

-Solamente te estas humillando ya me cansaste, llevate a la criada de aquí y no permitas que se acerque a su alteza el príncipe Selim- dije a la criada del Harem que estaba con ella, ella estaba por hablar pero la mujer solo hizo una reverencia y se fue dejándome con Canfeda a solas.

-Quien es esa mujer Canfeda?-

-No lo se sultana, jamás la había visto-

-Averigua quién es, no dejaré que nadie intente ocupar mí puesto-

| En la noche |

Canfeda entro en mis aposentos, diciéndome que el príncipe Selim quería que fuera a sus aposentos.

Me alegre de saber que no había rastro de esa mujer por ningún lado mientras me dirigía a los aposentos de su alteza.

-Bienvenida Nurbanu- dijo su alteza al verme ingresar a sus aposentos.

Me sorprendió ver que había una mesa y cuatro asientos.

-Alguien nos acompañará esta noche su alteza?- pregunté con curiosidad.

-Asi es, olvidé decírtelo, esta noche nos acompañarán a cenar mí hermano mayor el príncipe Murad y su favorita- dijo su alteza con una sonrisa.

-Su alteza, el príncipe Murad y su favorita ya están aqui- dijo un sirviente que había entrado a los aposentos.

-Que entren- ordenó su alteza.

Hice una reverencia al estar ante la presencia del príncipe Murad.

-Hermano, bienvenido, me alegra verte- dijo su alteza y vi como abrazo a su hermano cariñosamente -Déjame presentarte a mí favorita y madre de mí hijo, Nurbanu-

-Es un placer conocerlo príncipe Murad- dije con la mirada baja.

-Es un placer Nurbanu, ya ansiaba conocer a la madre de mí sobrino- dijo sonriendo -Ella es mí favorita y la madre de mí hijo, la sultana Emine- dijo el príncipe Murad, refiriéndose a la mujer que estaba a su lado.

Dirigí mí mirada a la favorita del príncipe Murad, pero al ver quién era un nudo se formó en mí garganta.

Era la mujer que había visto hoy.

-Me alegra verlo con salud príncipe Selim, le deseo lo mismo a su hijo y es un placer conocerla sultana Nurbanu- dijo ella sonriendome.

La Sultana Olvidada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora