015: ¿La verdad?.

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Al día siguiente »(NARRADOR)

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(NARRADOR)

Era demasiado temprano y Pablo había madrugado para llegar a la casa de los Lombardo y darle clases a Lucía.

- ¡Óyeme tu!.- pero no contaba con que alguien amaneciera de más mal humor.- Aquí la que manda soy yo, no tú.- Pablo giró los ojos.- ¿Te puede quedar claro?. Yo decido si yo quiero o no la clase ¿Te queda en esa cabecita?!.

- ¡Deja de comportarte como una niñita berrinchuda!.- bufó molesto.

- ¡Yo no soy ninguna niña berrinchuda!.

- ¡Asume tu compromiso Lucía!.

- ¡No voy asumir nada. No quiero tomar clases, le voy a decir a mi papá que te corra!.- amenazó.

- ¡¿Eso quieres, que renuncie!?.

- ¡Si, eso quiero. Por favor renuncia!...- sus palabras quedaron en la boca de Pablo al juntar sus labios con los de la chica pelinegra.

Mientras que la tía Inés se mostraba sorprendida ante tal acto de valentía por parte del chico.

- Ahora si tienes un buen motivo para que me corran ¿No?...- serio tomó su mochila para poderse dirigir a la salida.- Con permiso.- la tía Inés asintió ante su despedida para después acercarse a su sobrina.

- No puedo creer lo que hizo ese muchacho, tan decente que se veía.- ella se cruzó de brazos.

- Ya lo se tía, pero ahora sí mi papá lo va a saber.- Lucía fue detenida por la mano de su tía.

- Primero tienes que calmarte, no puedes irte en este estado a ver a mi hermano.- negó preocupada.

- No te preocupes tía, ahora sí ese estúpido me las va a pagar.- molesta y dando grandes pisadas, salió del jardín.

El elevador de la empresa se abrió dejando ver a Pablo entrar furioso a lo que sus hermanos se miraron confundidos desde la recepción

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El elevador de la empresa se abrió dejando ver a Pablo entrar furioso a lo que sus hermanos se miraron confundidos desde la recepción. Aidan salió de su puesto de trabajo para rápidamente detener a su hermano al notar las intenciones de llegar a la oficina de su jefe.

ᴸᴬ ᴹᴬᴰᴿᴬˢᵀᴿᴬ // ᴬᴵᴰᴬᴺ ᴳ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora