Magnate ( Hyunlix)

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Ya habían pasado 3 meses desde que Yeji comenzó con su quimioterapia y toda va bien, hace días la había acompañado a que le corten el cabello, ya que se le comenzaba a caer, después me había convencido de ir a comprarle unas pelucas, las compro de diferente colores, se había puesto una roja para molestar a su hermano, Hyunjin escupió el café cuando la vio, luego la regaño porque le hizo desperdiciar su preciada cafeína.

Yo seguía alternando entre la empresa y los hoteles que tengo, Hyunjin a veces venia, trabajábamos juntos y luego se iba, toda nuestra atención iba dirigida a Yeji, ella se veía bastante alegre estos últimos días, había hecho una amiga en el hospital, no paraban de hablar durante las quimio y para mí era reconfortante verla así, no se dejaba vencer y eso es lo que más admiraba de ella.

Bajo de mi auto, con las flores, mientras voy llegando, veo los árboles que se mueven por la ligera brisa, al llegar suspiro y saco las flores viejas y las cambio por las nuevas.

-He vuelto, hace tiempo he regresado a Corea pero no he tenido el valor de venir a visitarte, no me creía capaz, sé que no es excusa, que prometí que siempre te visitaría, tú me lo hiciste prometer, pero tú tampoco cumpliste con tu promesa, encontré al amor de mi vida, a mi destinado y tú no estás acá para decirme te lo dije, no te quedaste y no sabes cuanta envidia tengo al cielo de que pueda tenerte, Jeongin, no sé qué clase de juego está jugando el destino conmigo, está volviendo a suceder, Yeji tiene el mismo entusiasmo que tú y los estudios dicen que está mejorando, al igual que dijieron sobre ti, pero te acuerdas de ese día, cuando te descompensaste y todo fue empeorando, cuando te encontrabas en esa camilla haciéndome prometer que te visitaría para contarte si había encontrado a mi destinado y yo me reí de ti diciendo que esos son cuentos, que no existen los destinados, que ironía no, cuando tus padres decidieron enterrarte aquí fue la última vez que pise Corea –me arrodillo – te extraño tanto-sollozo-me haces tanta falta, aun me persigue esa noche, aún recuerdo como las enfermeras me sacaban a rastras de tu habitación y yo lo único que podía ver era tu cuerpo siendo sacudido por el desfibrilador como último recurso para traerte de vuelta, pero ya nada funciono.

Cubro con mi mano mi boca tratando de controlar mi llanto pero es imposible, todo me hace recordar a ese día, solo he ido 2 veces con Yeji a su quimio, el segundo día cuando la vi hablar con su amiga me recordó tanto a Jeongin.

-Felix-escucho.

Me levanto con rapidez y trato de limpiar los rastros de mis lágrimas antes de dar la vuelta.

-Minho-saludo.

-Hola, como has estado.

-Bien, vienes a visitar alguien-apunto al ramo de rosas en su mano.

-Si-aprieta más el ramo en sus manos-a mi padre.

-Te dejo entonces- hago una reverencia y me alejo.

-Felix-grita- estoy intentando algo con Han- se acerca a mí-quería pedirte perdón por...

-Está bien-lo interrumpo- aunque tengo curiosidad de saber que te hizo pensar que yo era tu destinado.

-Mi lobo se inquietó cuando te vi y tuvo celos cuando te vio con Hyunjin.

-Eso es raro, nunca he escuchado algo como eso.

-Lo sé, ni yo encuentro explicación-suspira-sé que Hyunjin no va a querer que este a tu lado, pero no puedo tener un problema con el jefe de mi futuro novio.

Me rio y niego divertido.

-No te preocupes, podemos ser amigos y por Hyunjin, no te preocupes, yo me encargo de él, nos vemos.

Al regresar a la empresa me encuentro con Han revisando su celular, golpeo su escritorio y él se asusta.

-Dios, Felix, un día me vas a matar-exclama.

-Debes estar atento- me burlo e ingreso a la oficina, pero salto del susto cuando veo a Hyunjin sentado mirándome fijamente.

-Hyunjin-exclamo, llevo mi mano a mi corazón para sentir lo rápido que está latiendo, escucho la escandalosa risa de Han a mis espaldas.

Hyunjin me sonríe y me señala el sofá.

-Que quieres tener sexo aquí-me burlo sentándome en el sofá.

-Si-responde- pero ahora no, debes tener energía para mañana.

Se sienta a mi lado y coloca su mano sobre mi espalda y me atrae hacia él.

-Mañana-inquiero.

-Mañana es mi celo-comienza a dar castos besos sobre mi cuello.

Me tenso de inmediato, sabía que esto iba a pasar y lo he estado pensando bastante, quiero tener una vida junto a Hyunjin, no me veo con nadie más. Entrelazo nuestros dedos y Hyunjin apoya su mentón sobre mi hombro.

-Quiero que me marques-digo seguro.

-Estas seguro-inquiere.

-Sí, lo he estado pensando y la verdad lo he estado queriendo desde hace tiempo-me suelta despacio y coloca una mano en mi mentón y me hace mirarlo.

-Desde cuándo-pregunta.

-Hace un mes-susurro.

-Mi ángel, si querías la marca, me lo hubieras dicho, tu sabes que yo haría todo lo que tú me pidas- me besa lentamente- aunque no necesitamos de una marca para que sepas que tú me perteneces y yo te pertenezco solo a ti-deja un casto beso sobre mi labio- lo sabes verdad.

-Si-respondo.

-Perfecto, prepárate ángel, porque no sabes los lugares de la casa que quiero que inauguremos.

Hace poco leí un comentario en tiktok, que decía que sufría con los fines de semana y le pregunte porque y me respondió por la tensión que se acumula en ellos y ahora las vuelvo a dejar así y no es porque lo planee, los capítulos ya están escritos y cada uno esta programado para una fecha especifica. 

Ahora si, no me maten, las quiero, que tengan un lindo fin de semana.