𝙱𝚘𝚞𝚗𝚍 𝚝𝚘 𝚢𝚘𝚞 💎

Capítulo 9.-Llamado

—¿Son tuyas Wanyin?— cuestionó su madre apuntando las pruebas de embarazo sobre el suelo.

A-Cheng que ni siquiera pudo procesar la noticia antes de tener que enfrentar a su familia intentó mantenerse indiferente, pero era tan evidente su nerviosismo que solo pudo espetar.

—Están mal....No...Y-yo... no puedo estar embarazado. Eso es una auténtica locura.

Al ver la mirada impasible de Madam Yu y la preocupación de A-Cheng, Huaisang no dudó en colocarse frente a su amigo y a pesar de que le temía horrores a Yu Ziyuan respondió.

—Son mías, pero salieron defectuosas.—dijo rápidamente agachándose para tomarlas todas y después trató de cambiar el tema— Pero que inesperada sorpresa... A que debemos su visita.

Madame Yu rodó los ojos y se cruzó de brazos antes de interrogar al Nie.

—Dices que son tuyas pero ¿Por qué tienen el olor de A-Cheng? ¿Por qué mi hijo esta tan nervioso? ¿Y por qué me estas mintiendo tan descaradamente?

Huaisang se congeló de inmediato en su lugar, no obstante Yu Ziyuan no lo estaba mirando a él, sino a Wanyin, el cual rápidamente suspiró con fastidio y confesó.

—Son mías, pero deben estar equivocadas...

—Oh, A-Cheng. Wow...— musitó Yanli acercándose a él con auténtica alegría.— Quiero decir, estoy muy feliz por ti, no puedo creer que tu amor y el de Lan Wangji vaya a dar frutos tan rápidamente, pero estoy segura que será un bebé fuerte y ...

Jiang Cheng se sintió mareado al escuchar a su hermana, quiso reír al escuchar la palabra amor y también la parte esa de los frutos. Él simplemente había cedido a sus impulsos y el Lan a su calentura, por eso estaba hasta el cuello de problemas y ahora con un embarazo no planeado. Así que sin querer demostrar lo frustrado y molesto que estaba con toda esa situación simplemente declaró.

—Estoy cansado iré a mi habitación.— No quiso seguir escuchando a su hermana y mucho menos ser juzgado por la mirada de su madre, solo caminó a su habitación y se tumbó en su cama para pensar en  lo que debía hacer a continuación.

—Iré a verlo— musitó Yanli pensando que su pequeño hermano estaba nervioso. Lo entendía, supuso que sus palabras lo habían avergonzado, pero antes de poder seguirlo su madre la detuvo.

—Yo iré— espetó decidida. Tanto A-Sang como su propia hija la miraron con nerviosismo, pero antes de que dijeran una palabra, ella agregó.—Ustedes vayan a comprar algo de comer en lo que hablo con A-Cheng.

Ninguno de los dos supo si Jiang Cheng estaba en problemas o no y antes de poder replicar, Yu Ziyuan les dio una mirada feroz y los echó del lugar.

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Jiang Cheng estaba contemplando lo mal que lo pasaría ese bebé con alguien como Wangji o él como sus padres, pues ninguno de los dos realmente se toleraba y ni siquiera habían cruzado más de dos palabras. Se sentía tan perdido con este nuevo descubrimiento que ni siquiera se levantó de la cama cuando su madre entró a la habitación.

— ¿Qué estás pensando Wanyin? ¿Quieres tener al bebé o no?

A-Cheng levantó el rostro y miró a su madre confundido.

— ¿Tengo opción?—susurró creyendo que su madre solo estaba fastidiándolo.

—Nos guste o no, siempre hay opciones. Solo que a veces son tan difíciles como para siquiera tomarlas en cuenta. Así que estas son las opciones; tienes al bebé y te lo quedas, o puedes dárselo a tu hermana. No sé si lo has notado pero tiene problemas para embarazarse, sino puedes interrumpir el embarazo, todavía estas a tiempo. ¿Qué piensas?