𝙱𝚘𝚞𝚗𝚍 𝚝𝚘 𝚢𝚘𝚞 💎

Capítulo 32.- Destinado

Wanyin no se despidió ni dijo nada más después de la desastrosa cena en el departamento de su cuñado. Solo caminó apresurado de regreso a casa y para su asombro Lan Wangji no se despegó de su lado.

Sabía perfectamente que estaba molesto porque podía sentirlo en su aroma y a través de su vínculo, pero en lugar de preguntar o reñirlo por lo sucedido. Wangji simplemente buscó hielos y los colocó en un paño antes de presionarlo sobre su mejilla.

Al ver que no diría nada, A-Cheng solo se relajó y terminó recostándose sobre el sofá antes de encender la Tv.

—Lamento lo que paso— dijo para intentar borrar la cara seria del Lan. El cual suspiró pesadamente y mirándolo a los ojos respondió.

—No, no lo lamentas.

Jiang Cheng quiso sonreír y preguntar cómo es que sabía eso, pero al sentir que Wangji acariciaba su vientre con delicadeza prefirió no decirlo. En su lugar palmeó ligeramente la mano del Lan y compresivamente expresó.

—El bebé está bien, no te preocupes.—murmuró tratando de calmarlo. A lo cual A-Zhan negó y mirándolo directamente exclamó.

—Tú me preocup...

Su oración se vio interrumpida por la llegada inoportuna de Nie Huaisang y su tío. Quienes todavía alterados se acercaron a Jiang Cheng para saber cómo se encontraba.

—Todo está bien, no hay nada por lo que deban inquietarse —respondió Wanyin intentando calmar su apresurado hablar. Sabía que no estaban felices con lo sucedido e incluso le hablaron un poco del sermón que Lan Qiren dio a Meng Yao, sin embargo tanta efusividad de su parte y lo considerados que estaban siendo cuando A-Cheng sabía que no había sido una blanca paloma en todo ese problema, lo hizo querer olvidar el tema.

Y al parecer su incomodidad rápidamente fue captada por Wangji, que sin mucha paciencia expresó.

—Es tarde y A-Cheng debe descansar.

Al ver como el alfa ayudaba a Wanyin a ponerse de pie, Huaisang no dudó en intervenir y proponer.

—Yo lo llevare a su habitación. Además dormiremos juntos—explicó por si el Lan había olvidado que se quedaría a pasar la noche. Sin embargo Wangji solo rodeó la cintura de Jiang Cheng y negando con la cabeza respondió.

—Wanyin dormirá conmigo. — mencionó, y como si quiera justificarse agregó—No sé cómo te comportas mientras duermes y no quiero que por un descuido lo lastimes.

Su preocupación alegró a Qiren y sorprendió demasiado a Huaisang, quien de inmediato quiso refutar su conjetura, pero A-Cheng no fue de mucha ayuda.

—Sí, tú a veces pateas mientras duermes. Además, la cama de Wangji es más grande.—Jiang Cheng notó la mirada traviesa y cómplice que Huaisang le dirigió, aunque en lugar de reparar demasiado en ella simplemente se despidió de él y Lan Qiren antes de subir a descansar.

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Jiang Cheng no deseaba más que dormir como un bebé y olvidar esa noche, pero mientras se colocaba su pijama y Wangji también se preparaba para dormir. Fue que el alfa no pudo seguir guardando silencio e inesperadamente preguntó.

—Tu invitaste a nuestro tío a la cena ¿Cierto?

A-Cheng que estaba batallando quitándose su pantalón dejó de intentarlo en cuanto escuchó la pregunta del Lan. Se encogió de hombros al ver que estaba siendo observado y sin realmente querer mentir confesó.

—Sí, llamó una hora antes de irnos y le dije que debería acompañarnos aunque sea unos minutos.

No agregó que por sus charlas anteriores sabía que a Lan Qiren no le agradaba Meng Yao, o que su tío le pidió que no dijera nada para llegar de sorpresa. Sin embargo eso no fue necesario, ya en cuanto Wangji se acercó para ayudarlo, mencionó.