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Capítulo 31.- Preferido

Todos los presentes observaron a Jiang Cheng abrir la puerta y notaron lo contento que se puso en cuanto recibió a la inesperada visita. Lo escucharon saludar e invitar a la persona a entrar, por lo que de inmediato sintieron curiosidad al respecto.

Aunque no tuvieron que esperar o siquiera ver a la persona para saber quién era, ya que con solo escuchar su familiar tono de voz lo reconocieron.

—No sabía que estabas aquí A-Cheng, pero me alegra. Justamente estaba pensando en decirles a mis sobrinos que saliéramos a cenar, y obviamente tú y mi nietecito no pueden faltar.—mencionó Lan Qiren tocando brevemente el vientre del Jiang.

Jiang Cheng le sonrió amablemente y después de cerrar la puerta tras su espalda respondió.

—Eso habría sido genial, pero de hecho ya estamos cenando. Así que por favor únase a nosotros.—Sugirió entrelazando su brazo con el del mayor y guiándolo al comedor.

Los Lan se pusieron de pie al verlo y se apresuraron a saludarlo. Ganando de inmediato un gesto de desaprobación por parte de su tío antes de expresar.

—Mira que hacer una cena familiar y no invitarme. ¿A quién debo agradecer por eso?

Wangji no hizo ademan de responder después de todo ni siquiera era su casa en donde estaban cenando, y Xichen aunque quiso disculparse por no haberlo tomado en cuenta estaba tan apenado que Jiang Cheng tuvo que tomar la palabra.

—No se lo tome a mal tío. Es solo que esta cena fue improvisada para presentarme formalmente a Meng Yao y...

Wanyin no tuvo que seguir explicando, pues en cuanto Lan Qiren escuchó aquel nombre rápidamente lo buscó con la mirada e interrumpió a su querido A-Cheng.

—Meng Yao, no sabía que ya habías vuelto del extranjero—espetó  fríamente y sin agregar ningún saludo. A lo cual el aludido puso una deslumbrante sonrisa en su rostro y se acercó con la intención de saludarlo.

—Buenas noches t-tí....— estuvo a punto de llamarlo tío cuando rápidamente recordó que al mayor le desagradaba que lo llamara así , por lo que en su lugar solo optó por llamarlo por su nombre — Lan Qiren, es bueno verlo aquí. Y sí, llegue hace unos días, pero déjeme disculparme por no haberlo visitado o contemplado para esta cena, me asegurare que no vuelva a ocurrir.

El omega extendió su mano para estrechar la de Qiren, sin embargo el Lan solo agitó su mano en el aire restándole importancia al asunto e ignorando deliberadamente su saludo.

—Ya no importa, ahora estoy aquí. Así que porque no me traes un plato para unirme a su cena, te lo agradecería.

Jiang Cheng notó la incómoda sonrisa de A-Yao, quien fingió amabilidad y asintió al pedido del Lan. Por lo que sumamente confiado y sabiendo que no lo rechazaría, A-Cheng volvió a tomar del brazo al mayor para llamar su atención.

—Tío, ven. A-Sang quiere saludarte...

Mientras Meng Yao servía la cena para Qiren, no pudo evitar sentirse irritado por la facilidad con la que el Jiang se lo había ganado. El llevaba años tratando de complacerlo y mostrarse perfecto a su alrededor sin obtener siquiera un saludo apropiado, por lo que ahora que veía a Wanyin presumir lo cercano que era al mayor lo hizo enfurecer.

Lo cual rompió un poco su perfecta fachada de calma e incluso Lan Xichen lo notó.

—No mires tan mal a Wanyin, él no tiene la culpa que mi tío lo favorezca. —murmuró en un tono bajo.

Meng Yao quiso replicar diciendo que tampoco era su culpa que a su tío no le agradara, sin embargo solo guardó silencio y continúo con la cena tranquilamente.