[3] I Hate You, Don't Leave Me (Saga: Out Of The Woods)

Capítulo 5

Kimberly

Él se ofreció a llevarme, ¿por qué? ¿Ese tonto cree que puede conseguir conquistarme con algo así? Pues, no funciona así para mí. Un favor como este no es algo que se hace para conseguir una chica. Además, estoy segura de que va a estar muy impresionado cuando conozca a mis amigos. Sonreí para mí. Mi padre y mis hermanos caminaban adelante así que no podían verme. Ansió llegar a la casa y enviarles mensajes a los chicos avisándoles que estaría de regreso. Aunque solo fuera por unas horas... Una idea se me vino a la mente. ¿Por qué tenían que ser unas horas? ¿Qué tal si... Me fugo? alguno de mis amigos podría ayudarme, invitarme a quedarme en su casa. Es disparatado pero no es tan mala idea. Maldición, haría lo que fuera por permanecer en la ciudad. 

Al entrar en la casa mamá nos recibió con una gran sonrisa.

- ¿Cómo les fue? - Pregunto. Ignore la pregunta y como si nada subí a mi habitación. Cerré la puerta con llave y busque mi celular. Escribí un mensaje que les enviaría a todos: "Mañana en la noche estaré en la ciudad, ¿Dónde los encuentro?"

No envié el mensaje, me lo quede mirando. ¿Y que si yo enviaba ese mensaje y el tonto chico rubio se arrepentía? Quedaría como una tonta. Parecía muy decidido cuando lo dijo, y si por alguna razón se retracta lo obligaría a ir, aun no sé cómo, pero lo haría. Envié el mensaje a cuatro números y espere una respuesta, la cual llego dos horas después. "En el viejo callejón"

Sonreí. Ese lugar era el más apestoso y peligroso lugar pero lo echaba de menos.

Mamá me llamo para la cena y cuando me encontré con mi familia en la mesa intente fingir que no me sentía infinitamente contenta por el viaje de mañana. ¿Qué iba a decirles a mis padres? No había pensado en eso, pero ya se me ocurriría algo, siempre era así. 

En la ciudad de vez en cuando tenia que mentir sobre irme a dormir temprano o ir la casa de alguna compañera de escuela para hacer una tarea cuando en realidad salia con mis amigos e iba a algunos lugares que estoy segura que a mis padres les daría un ataque si se enteraran. Madrugando en un callejón oscuro, pasando la noche en la habitación del hotel de peor reputación o una que otra vez terminábamos fuera de la ciudad. Era divertido conocer aunque no me sentía del todo segura y menos cuando la policía terminaba persiguiéndonos. Mis amigos consumen drogas y alcohol y siempre se les sube tanto a la cabeza que se ponen gritones y destructivos. De alguna manera, echaba todo eso de menos. Quiero estar con los míos en mi hogar, mi ciudad y no donde a mis padres se les ocurra mudarse. Si tenia la oportunidad de quedarme en casa de alguno de ellos lo haría, después de todo son mis amigos desde hace tiempo. Aunque no me sentiría segura quedándome en la casa de Jared, él... Bueno, es un chico realmente atractivo pero también es peligroso para mi. Siempre que tiene oportunidad me manosea y si no lo detengo sé que él querría llegar tan lejos como le fuera posible, quiero decir, hasta tenerme en su cama. No estoy lista para eso. Me gusta coquetear y cosas así pero no estoy lista para tener relaciones.

- ¿Kim? - Llamo mi madre desde el otro lado de la mesa.

Estaba tan enfrascada en mis pensamientos que había olvidado donde estaba.

- ¿Quieres servirte mas? Te acabaste todo - comento ella.

- Que bueno que hayas terminado con tu absurda protesta - agrego mi padre.

Mire al plato vació frente a mi, claro en mi inmensa felicidad había olvidado lo enfadada que estaba y mi promesa de no probar bocado hasta regresar a la ciudad.

- ¿Te diste por vencida? - Quiso saber Cynthia.

- En realidad no. Pero matándome de hambre no conseguiré nada. - Me serví un poco de ensalada de verduras y algo de carne. - Encontrare otra forma de protesta.