Kimberly
Me limpie las lagrimas con el dorso de la mano, que imagen detestable debía ser. Eliot me miraba en silencio. No podía verlo, no quería ver sus ojos gélidos dirigidos a mi. Estaba muerta de miedo, porque estaba segura que esta iba a ser nuestra ultima conversación.
- Eres un chico estupendo pero no quería verlo. No quería aceptarlo - admití.
- Solo quiero saber una cosa.
Me abrace a mi misma mientras esperaba su pregunta. Sin mirarlo.
- ¿Por que te fuiste con Jared?
Debería haber supuesto que querría saberlo, aunque la verdad esperaba un adiós rápido. Solo que, aquí venia el momento donde por primera vez confesaba mis sentimientos. Me reí de mi misma, nunca pensé que estaría en esta situación.
- Porque no quería aceptar que me estaba enamorando de ti - reí amargamente y llore al mismo tiempo. Era raro, era un desastre.
Nos sumimos en el silencio. No podía creer que al fin lo había dicho, estaba aceptándolo y Eliot no dijo ni una palabra. Tal vez quería que ya me fuera. Por supuesto, esto parecía un retorcido juego. El se enamoraba de mi, yo lo rechazaba y luego yo me enamoraba de él cuando ya no había posibilidades. Quisiera saber si lo que dije cambiaría algo, pero no podía ser, esto ya estaba bastante mal. Nunca podríamos ser los de antes, eso no iba a volver.
- No se me había ocurrido que quererme era tan terrible como para hacer algo así - dijo con un toque de diversión y tristeza en su voz.
- Lo siento.
- No debiste ir con Jared. Cualquier cosa podría haberte pasado y nunca me lo hubiera perdonado.
Se había preocupado por mi. Este tipo es tan encantador todo el tiempo que es casi increíble.
- Quería alejarme.
- ¿De mi?
- De lo que siento por ti.
- ¿Y que conseguiste?
- Acabar de aceptar que estaba enamorada y no podía ser algo tan fácil de ignorar. No debí hacer esa estupidez. Fuiste por mi y te trate jodidamente mal - temblé.
- Kim - dijo con voz tranquila -, mírame.
Me negaba a verlo. No soportaría verlo odiarme.
- Mírame, por favor.
- No.
- Lo siento.
Inconscientemente, lo mire sorprendida, ¿Por que se disculpaba?
- ¡Tu no tienes que disculparte! - chille.
- Por supuesto que si - sonrió levemente -. Lamento haberte acosado todo este tiempo. Tienes razón, te force a quererme porque necesitaba que alguien me quisiera ya que estoy roto y nadie me quiere. Todo lo que dijiste es cierto. Lamento haberte gritado en ese momento. No debería haberlo hecho - sonrió aun mas, las lagrimas caían por su rostro empapado.
- ¡Idiota! ¡Tu no tienes que disculparte! Me merecía que me gritaras, estaba siendo una estúpida y claro que no tenia razón, eres genial y esta bien querer que te quieran, Eliot.
- Pero te force...
Negué.
- No lo hiciste. Era inevitable que me enamorara de ti. Eres el tipo de chico del que cualquiera se enamoraría - dije calmada -. Te quiero, Eliot. Y no merezco que me perdones, pero quería disculparme de todas formas. Espero que te recuperes pronto.
- Kim - llamo, pero salí rápidamente de la habitación, sin dudar, sin detenerme.
Camine con la mirada en el suelo hacia la sala de espera donde mis padres y los amigos de Eliot estaban sentados mirando en todas direcciones.
- ¿Como esta él? - pregunta mi madre preocupada.
- Va a estar bien - respondo antes de volverme hacia Joy -. No te culpo si me odias, Joy, solo quiero saber una cosa. Ella me miro expectante. - ¿Su familia vino a verlo?
Joy bajo la vista al suelo.
- Solo vinieron a pagar los gastos. Acaban de salir.
- ¿Ahora? - señale hacia la puerta de salida.
Ella asintió y corrí por el pasillo hacia el umbral, lo cruce y busque con la mirada a los padres de Eliot. Reconocí a su madre justo cuando entrando en su lujoso auto y corrí hacia allí, estaba lejos así que los alcance cuando el auto ya salia del estacionamiento, me pare frente a este y se detuvieron de golpe. Ambos me miraron desconcertados.
- ¿A donde creen que van? No han visto a su hijo.
- Tenemos prisa. Debemos regresar al trabajo - me dice Elizabeth enfadada.
- Quítate del camino, por favor - ordena Simón perdiendo la paciencia.
- No me voy a mover hasta que no entren y vean a Eliot, ¿Acaso no les importa?
- Por supuesto. Pagamos los gastos médicos...
- ¡A la mierda con eso! - grito interrumpiéndola. Me inclino sobre el auto y los ojos del padre de Eliot vuelan al capo donde mis manos están apoyadas -. Eso no tiene nada que ver, ¿Por que no pueden ser sus padres por una vez?
Ellos me miran confundidos pero no retroceden.
- Por favor, hazte a un lado. Tenemos que regresar al trabajo - se queja Elizabeth.
- ¿Es eso, no? - apreté los dientes tan fuertes que dolía - ¡El trabajo no puede ser mas importante que su hijo, maldita sea! - golpeo los puños en el capo del auto.
- ¡No hagas eso! - grita Simón, bajando del coche y caminando hacia mi. También veo a Joy y a los dos amigos de Eliot correr hacia mi del otro lado -. Es la ultima vez que lo digo, quítate del camino.
- ¿Por que no les importa? Usted no tiene ni una maldita idea de como Eliot sufre su rechazo, el sentirse menos que un trabajo estúpido. A ustedes solo les importa su dinero, y solo hablo por Eliot pero estoy segura que sus demás hijos deben sentirse de la misma forma, ¿no sienten nada por ellos? - pregunto finalmente.
- Los amamos - responde firmemente Elizabeth -. Pero hacemos lo mejor que podemos para que ellos lo tengan todo.
- Solo tengo diecisiete pero puedo asegurar que nada es suficiente si no se tiene el amor de los padres. Puede que trabajen duro y viajen mucho debido a eso para complacer a sus hijos pero, ¿alguna vez se preguntaron si eran felices con eso?
Nadie dijo nada. Ya no había mas que decir, así que por propia voluntad me quite del camino.Los padres de Eliot regresaron al auto y se fueron.Me abrace a mi misma, les había dado una gran charla y no había cambiado nada. Al menos lo había intentado pero que mas da, convencer a un adulto no es fácil y menos si solo tienes diecisiete.
Mi madre puso una mano en mi espalda comprobando el terreno y cuando no retrocedí, me abrazo.
- ¿Por que no dijeron nada? - solloce.
- Quien sabe - me dio un beso en la cima de la cabeza -. Hiciste bien en expresarles lo que Eliot siente pero son adultos, ellos deben tener sus razones.
Asentí y comencé a caminar hacia nuestro auto, cuando pase junto a Joy le dedique un leve asentimiento como saludo de despedida y luego nos fuimos.
Quien sabe lo que los amigos de Eliot hicieron después, o si sus padres cambiaron algo después de mi charla, o si hablaron con Eliot sobre lo impertinente que soy. Y si Eliot iba al pueblo a escondidas para evitar encontrarse conmigo a pesar de que ya no iba, pero eso él no lo sabia.
Prácticamente no me aleje de mi casa después de que regresamos del hospital y él tampoco se acerco a verme. Pero, ¿por que iba a hacerlo? Así que no volví a ver a Eliot en los meses siguientes. Horas, días, semanas pasaron y cuando me di cuenta tres meses habían pasado desde que lo vi en el hospital.
Él nunca vino por mi y me sentí terrible.
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[3] I Hate You, Don't Leave Me (Saga: Out Of The Woods)
Romance~ Tercera parte de mi saga Out Of The Woods ~ Kimberly esta acostumbrada a su ciudad natal y a sus amigos como cualquier persona lo estaria, pero ve todo eso alejarse cuando sus padres la suben al auto y la obligan a mudarse. Esta tan jodidamente mo...