Capítulo 10

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Eliot

¿A que se debía eso? Quiero decir, muy rara vez mi madre necesitaba hablar conmigo. Sin embargo lo que mas me preocupaba era que Kim se fuera con Clare. Ella podía ser un inconveniente con sus problemas de confianza. Esperaba que no le dijera nada a mi Chica Mala.

Encontré a mis padres en el estudio, exactamente donde esperaba encontrarlos, ellos estaban sentados en los lujosos sofás de cuero marrón con copas de champan en la mano. Estaban conversando con una pareja que se encontraba sentada en el sofá frente a ellos, riendo y luciendo joviales. Solo se mostraban de esa forma cuando había gente presente. Como toda esta fiesta, solo era apariencia. Debíamos aparentar que eramos una familia feliz y ahí debía estar la razón de porque me llamaban.

- Eliot, ven aquí - me invito mi padre -, quiero presentarte.

Camine hacia él y mire a la pareja que sonreía hacia mi.

- Ellos son Marion y Ed, amigos míos, chicos, el es Eliot, el menor de mis hijos - dijo mi padre luciendo orgulloso pero yo sabia que solo actuaba. Él nunca estuvo orgulloso de mi. Dolía, no importaba cuantas veces lo pensara.

- Mucho gusto - fingí una sonrisa amable al tiempo que estrechaba sus manos.

- Un placer conocerte al fin, Eliot - Dijo Ed sonriendo genuinamente hacia mi. Eso me tomo por sorpresa, siendo amigos de mis padres esperaba algún tipo de actitud seria y reservada.

- Tienes unos ojos hermosos, cariño - comento Marion, estrechado mi mano fuertemente -. Es un color muy peculiar. Me encantan - ella sonrió hacia su marido.

- Muchas gracias - sonreí, esta vez de verdad -. Usted también tiene unos ojos preciosos, si me permite decirlo.

- ¡Por Dios, cariño, eres todo un galán! - se burlo juguetonamente la mujer.

- Hace tiempo que queríamos conocerte. Vemos a tus hermanos en casi todas las fiestas pero a ti nunca habíamos tenido oportunidad de conocerte. Creo que solo te vi una vez cuando eras un niño pero eso hace tiempo.

- Eliot no es muy fanático de salir, prefiere quedarse en casa - Le contó mi madre.

Ahí estaba mi madre, hablando de mi como si me conociera. No tenia idea de nada acerca de mi. Pero no me moleste en corregirla.

- ¿En serio? No entiendo como puede ser eso teniendo unos padre que salen todo el tiempo de viaje. ¿No los extrañas? - Pregunto Marion.

Una pregunta bastante comprometedora. Sentí la mirada de mis padres quemando en mi. Sonreí y respondí:

- Si.

- Ya me lo imagino - dijo Ed -. Hey, Eliot, tienes que conocer a Killian.

Arquee una ceja hacia ellos y sonrieron. Al mismo tiempo miraron hacia el otro extremo del estudio y seguí su mirada. Una chica de cabello largo y rojizo se sentaba en el borde del escritorio con un libro en la mano, totalmente ajena a la conversación. Sus padres la llamaron varias veces hasta que finalmente levanto la mirada hacia nosotros. Juraría que sus ojos se veían del mismo tono rojizo oscuro que su cabello, brillaron al encontrarse con la luz y me encontraron.

- Kill, ven aquí - llamo Marion. Ella se bajo del escritorio dejando el libro sobre este. No imagino como se sentiría mi padre con esa chica sentada sobre su preciado escritorio, no se quejo -. Él es Eliot, el hijo menor de Eli y Fred. Eliot, ella es Kill, mi hija. Tienen la misma edad -termino con una sonrisa, me pareció una sonrisa insinuante.

- Un placer conocerte, Killian - estreche su mano. Ella miro nuestras manos juntas y parpadeo.

- Hola, Eliot - se soltó escondiendo ambas manos detrás de su espalda y inclinándose hacia mi con una sonrisa alegre. Era alta, probablemente cinco centímetros mas baja que yo. Llevaba un vestido rojo que resaltaba su pálida piel y golpeaba contra mis muslos - ¡Cielos, que hermosos ojos! - Comento al tiempo que colocaba sus manos en mis hombros y me estudiaba de cerca.

[3] I Hate You, Don't Leave Me (Saga: Out Of The Woods)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora