FACHADA DE LA IGLESIA
GWENDOLYN intenta vender sus flores en el centro, frente a la iglesia. Tan solo una anciana se detiene a comprarle un par de rosas.
GWENDOLYN — (Viendo la canasta aún llena; acomodando las flores). Méndiga suerte la mía...
JORGE DAVID se acerca desde el sur; la posada se encuentra a menos de dos cuadras de la iglesia.
GWENDOLYN — ¡Ah! ¡O-Oiga..!
JORGE DAVID — ¡Hala! ¡Qué conveniente! (Sacándose el bolso de monedas). Dame cinco... ¡No! Diez... Cinco y cinco...
GWENDOLYN — ¡Ay, bendito...! Aquí están...
JORGE le entrega cuatro monedas y la joven las diez flores.
JORGE DAVID — Perfecto... A Celia le fascinarán... (Divagando) si no es alérgica a los tulipanes; creo que algo dijo de... ¡Ehh...! Nada, disculpa... Gracias, niña...
GWENDOLYN — ...No hay de qué, vejete...
DAVID la mira un segundo y se ríe.
Vacila unos instantes, queriendo decirle alguna otra cosa, mas al ver a los demás acercarse en sus caballos, decide finalmente seguir su camino.
SALÓN Y COCINA DE LA POSADA
JORGE llega a la posada y espera sentado a que aparezca CELIA.
Transcurren varios minutos. LUIS y ESTEBAN atan sus caballos a un lado de la calle y entran junto a las chicas.
Las flores empiezan a marchitarse.
JORGE DAVID — ...Tal vez ni siquiera esté en su habitación... (Poniéndose de pie). Hablaré con la dueña, a ver si sabe algo de ella...
IRENE — Ve, ve... Yo también subo... No veas tú la siesta que me voy a echar después de este paseito...
DAVID busca por los pasillos y el comedor, pero solo encuentra algunos huéspedes.
Volviendo al salón, escucha unos ruidos que llegan desde la cocina y los sigue.
Allí se encuentra a la DUEÑA de la posada, preparando la cena para la noche.
DUEÑA — ¿Celia? Ay, hijo... Creo que salió a encontrarse con su prometido...
JORGE DAVID — (Confuso). ¿El...? Oiga... ¿Cómo dice?
LUIS y ESTEBAN conversan junto a la puerta.
JORGE regresa desde la cocina, con el semblante algo decaído.
ESTEBAN — ...¿Y bien?
JORGE DAVID — Vámonos... Voy a necesitar ese trago...
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Jorge Juglete
HumorJorge David ha acabado como bufón en la Corte del Reino de Torapa, gobernado por Arturo I de la Familia Cullions. Cuando una decisión impulsiva del Rey genera un vacío en su Corte, a Jorge le tocará cambiar su oficio y parte de su vida para rellenar...