Heart to Heart [Sproier🌻]

Capitulo 9(Bonus day)

10:23 a.m

(Grabación de audio llamada con el señor de Luque)

-Si pa- respondió el joven azabache

-¿Estas bien cachorro?.— pregunto una voz un poco aguda pero dominante.

-.obvio estoy bien.-silencio

-Me preocupas mochuelo.— suspiro del otro lado del móvil

-flasheas una Banda, solo voy a comprar algo para Roier.— resopló el joven, mirando hacia delante por la calle pudo notar a un joven llorando con una distintiva Bandana de color azul. - Chau pa.- dijo antes de colgar para acercar al joven castaño.

(Fin de la llamada)

12:23 p.m

Estás con Spreen ahora me hacía sentir mejor, nunca crei encontrar un buen amigo en un paciente, esto está mal, si continuo viéndolo de esa forma seguramente me quitaran de ser su médico.

-¿Spreen te gusta la navidad?.— pregunté abriendo la puerta de la cafetería para salir.

-obvio pa ¿a quien no?.— pregunto alegre, más de lo normal.

-Solo era una pregunta.- rasqué mi nuca para después caminar, la ventisca había terminado pero los estragos del frío haciendo helar mis manos. -que frió- me queje, soplando mis manos en busca de calor.

-Dame la mano.— propuso Spreen a lo que acepte, dándole mi mano y esté entrelazándola con la suya.-¿mejor?.— pregunto dedicándome una sonrisa, que hizo enrojecer mis mejillas.

-Si capo.— sonreí para disimular mientras seguíamos por nuestro camino, dos chicos con las manos entrelazadas como pareja.

Caminamos durante una cuántas horas mirando de establecimiento en establecimiento que sería lo ideal para comprar, Spreen nunca decidiéndose del todo, comprando cuanta cosa pudiera, en una pequeña joyería en la cual nos detuvimos, pude ver un pequeño collar con un oso de medalla, tal vez sería perfecto para aquel chico obsesionado por comprar cuanta cosa que le salga de la pija como el diría.

-Disculpe cuánto cuesta esa cadenita con la medallita.— pregunté un poco ansioso pues no tenía dinero suficiente si me decía que costaba más de 400 dólares.

-Este.— sacó la joyería de la vitrina, mientras yo observaba si Spreen estaba distraído en otra cosa.- vale 250 dólares pero viene con un anillo de regalo.— una amable sonrisa salió de aquel viejo vendedor.

-Esta bien me lo llevo.— saque el dinero de mi billetera y este guardo en una preciosa caja azul ambos presentes un anillo y aquel dije de oso que sería mi regalo para Spreen.

Antes de que se acercara a averiguar que era lo que pasaba con nuestra plática entre el vendedor y yo, tomé del brazo a spreen sacándolo a rastras del lugar, debíamos escapar para que no se hiciera una idea del regalo, ambos reíamos, nunca me había divertido tanto haciendo las compras con alguien en estas épocas, también recordar que hoy estaría con sus padres me hacía poner nervioso, por lo cual cuando el reloj marcaba las 2:23 tuvimos que separarnos para la cena de esta noche.

7:23 p.m

-Bien Rogelio esto saldrá bien.— suspire.- animo cabron solo es una cena de navidad.— me miraba frente al espejo tratando de levantar mi moral.— eres un doctor chingon y solo son los dueños de casi medio ciudad, pero hey, le agradas a su hijo.— acomodo mi cabello en la bandana.— a demás mírate lo guapote que estás.— acomode el cuello de aquel saco negro que llevaba puesto, bastante formal, no quería llegar y no encajar aunque sea más fan de lo casual sin duda no me quedaba mal y a demás resaltaba mis preciosas posaderas, sin duda alguna prima de Spreen saldría enamorada de mi.

8:23 p.m

La entrada de aquella gran mansión sin duda era espectacular, no podía creer que uno de mis nuevos amigos tuviera una casa tan lujosa, acerque mi auto hasta la reja en donde dos hombre de seguridad me hicieron bajar del auto.

-eh que les pasa culeros, yo soy amigo del spreen.— mencione cuando comenzaron a registrarme, para luego indicarme que podía pasar.— pinché seguridad.— mencioné aparcando mi auto en la entrada, para acercarme a esa puerta de roble tallada con figuras de osos y lobos, muy exótico.

Procedí a golpear siendo esta abierta de inmediato.

-Roier capo, bienvenido.- Spreen fue el que me recibió dejándome pasar.— puedes sacar el abrigo y dejarlo en el closet.— mencionó abriéndome una puerta donde coloque mi abrigo.- vente pa.— tomó mi mano haciendo que lo siguiera hasta una enorme sala donde un montón de personas estaban charlando.

-Pensé que era una cena familiar.— le murmuré a Spreen el cual comenzó a reír.

-Si pero mis viejos siempre son así, invitan gente de las calles ricas de la ciudad.— spreen tomo mi mano de nuevo.— venite que quiero que conozcas a mi viejo.— no era muy normal verlo tan emocionado por algo y a mi tan nervioso, era como si fuera a conocer a los padres de mi novia.

Nos acercamos hasta un señor de buen porte con una distintiva corbata morada y sonriente, bastante mamado a mi parecer.

-Pa el es Roier, Roier el es mi viejo.— el Señor extendió su mano a lo cual yo por el nerviosismo solo sujete con ambas manos.

-Un gusto- trague saliva.— yo soy doctor y soy roier.— perfecto, ahora iba a quedar como un imbecil delante de una persona tan importante a demás de que su hijo es mi paciente.

(2/3)

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Doble capítulo por que pinto 😎
Y por que los quiero mucho ataque de besitos 🥰mua mua mua

Art:Kishu