Ya casi es hora de partir. Todo fue verdad. Ruben no mentía. En un acto de peligrosa compasión les ayudo con tiempo para que las sombras no se espaecieran más allá del refugio. Pero lo que no saben es que la otra gran parte del mapa ya está cubierta de la nube negra.
$: es hora de hacer justicia. - Ruben a estado buscando a Klaus, junto con su misterioso compañero de la flor de oro e Isaac.
$: ahí está el brujo. Solo. Es el momento perfecto para atacar. - Klaus se encuentra más débil que nunca. Cuando los cazadores lo dejaron tendido en el suelo, despegaron las espadas de su cuerpo dándole tiempo suficiente para recuperar sus heridas más delicadas, pero igualmente débil para sanar por completo. sigue caminando por los alrededores del prado enorme lleno de piedras y un poco de césped. Se percata que ya no hay pastillas y no hay ciudades perdidas cercanas. Parece que tendrá que volver a sobrevivir con sus garras y colmillos.
Las sombras detrás de el van brotando poco a poco. No le pertenecen a su cuerpo. Hacen su anuncio con el sonido de las piedras, saltando como lobos buscando una presa. Klaus los mira y comienza a huir moviéndose lo más rápido que puede a pesar de su actual condición. Su mirada se torna preocupada por la debilidad. Ruben ríe observando a quien fue su compañero. El fuego negro se propaga persiguiendo, la flor dorada y la lanzas van en camino detras de el. El las evade resbalando torpemente por la humedad de las piedras. Sus garras son las únicas que le dan la movilidad que sus pies no pueden brindarle. Las usa para moverse entre el resbaloso y desnivelado camino.
La cacería se alarga más de lo que esperaban. Sin darse cuenta el brujo está dando la vuelta por dónde vino, después corriendo en círculos. La persecución se alarga demasiado, parece que el brujo tiene muchos aces bajo la manga pues siempre responde a los arrinconamientod. Parece que a pesar de la desventaja sabe moverse muy bien y puede hacer que sus depredadores fallen ataque tras ataque les cuesta demasiado seguirle el paso. Pero ¿Será suficiente? Cada vez está más agotado, el campo está abierto y además ellos son tres. Es inevitable que en algún momento le alcancen y por supuesto sucede. La flor Lee uno de sus movimientos y lo hace engancharse a una pierna, derribandolo. La lanza de Ruben llega para atravesarle el pecho dejándolo indefenso ante las sombras. El brujo suelta un grito agónico, intenta escaparse cómo sea, pero el dolor solo se acrecenta
×: Mis compañeros, pueden vencer a su dios sin mi. - dice Klaus apretando los dientes y bufando.
$: El insecto ese optará por la paz. Al igual que su gente, solo usan la violencia si es estrictamente necesaria. Pero evitaremos que así sea, hasta que eventualmente sea imposible combatir a la nube negra. Tu eres el último cabo suelto. -
×: viejo... Siempre fuiste un cobarde. - el brujo empuja la lanza negra fuera de sus heridas. Con su fuerza física en ambas manos.
$: y tú un engreído odioso que se cree que puede hacer todo lo que quiera y salirse con la suya. Aveces deben entender que lo correcto es no hacer nada. -
×: Tal vez tienes razón. Pero no es mi estilo. -
$: Estas mal. Pero si crecieras un poco más lo entenderías. Me da pena que aquí tenga que terminar. - Isaac se acerca con las manos llenas del chapopote negro encendido en llamas. Pero un prisma sale disparada y golpea con fuerza a los seres de sombras. Las chispas alumbran todo el lugar.
¶: no puede ser... Creí que la bestia del mar te abría matado. - la máscara de hierro se levanta, la piel grisasea y llena de falsas cicatrices. Atlas comienza a girar su prisma. Prepara el siguiente ataque. Klaus prepara sus garras usando el líquido negro que sale por sus heridas.
El prisma va primero, el brujo después, la flor de hierro se intenta poner en frente, pero con un flagelo, Klaus la desvía y continúan cargando contra ellos. Las chispas del prisma al impactar alumbran el lugar completo. Parece que tiene partes del hierro brillante de los cazadores. Klaus usa el poder de su propia sombra que se fusiona con su mechon de cabello blanco para hacer una garra de zorrillo. Cada ataque es detenido y contestado. Chocar fuego contra fuego.
ESTÁS LEYENDO
Catástrofe.
FantasyMagia. Yo la definiría como el final de los "Por qué". Cuando ya la lógica no tiene ninguna forma de responderse la respuesta es un "por qué sí" o como a mí me gusta decir "por arte de magia". Siempre hemos hecho eso y siempre se seguirá haciendo...