Anonymous Texts | Wenclair

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| Wednesday's Pov |

Por más que le haya demostrado a Enid mi desinterés por haber salido y besado a ese chico, por dentro no opinaba lo mismo, estuve tres días seguidos sin inspiración pensando en que era lo que estaba sintiendo.

No me animé a charlarlo con Thing y muchísimo menos con Enid, era un sentimiento que tenía que descubrir por mi cuenta y saber cómo tratarlo. Luego de horas pensando opté por buscar en la web, llegando a un solo resultado; eran celos.

No había cura para los celos, tampoco era una enfermedad patológica, sino una experiencia emocional. Esta contiene tres emociones; ira, tristeza y miedo, las cuales están relacionadas con la sensación de disgusto o sentimientos de inferioridad, inseguridad.

Los celos son un sentimiento de malestar causado por la sospecha o temor de perder a alguien importante en nuestras vidas por alguien más. Es la inseguridad, la sensación de que otra persona sea más que uno mismo y suficiente para ocupar nuestro lugar.

Eso sentí cuando Enid salió con alguien más, aún sabiendo que para ella soy "la primera en su lista" eso no me quitaba la idea de que en algún momento piense que alguien sea mejor que yo.

Así que para disminuir eso llamado "celos" tenía dos soluciones; trabajar con mis problemas de autoestima, o pedirle a Enid ser algo oficial de una vez por todas, eso haría que ella no salga con otra persona que no sea yo, tampoco sea besada por un tercero.

Con ayuda de un Thing emocionado, comencé un plan para invitar a salir a Enid e intentar pedirle ser algo oficial de una vez, por más que sea una inexperta ajena a lo llamado amor no dejaría que eso no me permitiera hacer feliz a Enid.

"Flores, necesitas flores".

–No haré algo cliché, Thing, nada de flores– negué con la cabeza.

"Es Enid, flores sí".

–Thing..–

"Flores si".

–Bien, dejemos el tema de las flores, eso es irrelevante. ¿Debería de invitarla a salir antes?– pregunté mientras anotaba todo en una libreta.

"Eso es obvio, Ajax, Xavier, y yo nos encargaremos de planear la cita, tú ocúpate de mantener a Enid ocupada".

–¿Cómo hago eso?– pregunté confundida, tendría que salir con ella días antes de salir otra vez,

"Invítala a tomar un helado, entretenla".

Asentí con la cabeza abandonando el baño de la habitación, Enid estaba durmiendo plácidamente en su cama mientras abrazaba un peluche de oso panda.

Me acerqué para allí hasta que mis piernas chocaron con su cama, me senté en ella frente a una Enid dándome la espalda. No mintió cuado dijo que tiene el sueño pesado, intenté cinco distintas formas de despertarla y ninguna funcionó.

–En... Enid– murmuré impactando suavemente la palma de mi mano con su mejilla.

Solté un suspiro pesado a punto de hacer algo que nunca haría otra vez, acaricié el cabello y por detrás de las orejas de la licántropo, esta balbuceó cosas que no se entendían mientras que soltaba algunos ronroneos. Cachorrita tonta.