Ciudad del Pilar del Rango 39, Malphas, una ciudad compuesta por más de 500,000 Demonios.
Un Demonio Menor irrumpió a través de la majestuosa puerta del Palacio de Malphas y se arrodilló en el suelo.
"¡Mi Señor! ¡Han llegado!"
"¡Alucard está aquí, trayendo consigo una horda de más de cien Legiones de Demonios!"
"... Lo sé. Puedo sentirlo a pesar de que está tan lejos; no está tratando de esconderse."
"¿Qué debemos hacer...?" El Demonio Menor le preguntó al Demonio del Pilar, que medía 7 metros de altura y tenía largas alas, cola y cuernos Demoníacos.
"Qué pregunta tan tonta." El Pilar abrió sus ojos, y en su expresión se vio arrogancia y sabiduría.
"Pelearemos."
... Tal vez, no fue tan sabio...
"¡Generales!"
"Sí, mi Señor, estamos listos."
"¿Cómo van los preparativos?"
"Perfecto, aunque Alucard tiene tantos Demonios, hemos peleado peores batallas en el pasado-."
"Demonios."
Una presión abrumadora cayó sobre la ciudad, y todos sintieron la presencia de Alucard.
Inconscientemente, todos giraron en su dirección y vieron a Alucard parado en la cima de una montaña de hielo. Junto a él estaba un Demonio femenino con piel azul, cuernos prominentes y una cola larga y afilada; ella medía 180 cm de altura, con un cuerpo delgado que no era demasiado grande ni demasiado pequeño y perfectamente proporcionado.
Sus ojos brillaban con un azul helado, emitiendo una sensación siniestra debido a su esclerótica negra.
"... El rumor es cierto... Vepar se ha aliado con el invasor..." Comentó uno de los dos Generales en estado de shock.
"Tienen cinco segundos. Aquellos que deseen rendirse, abandonen la ciudad y únanse a mi ejército."
En el momento en que su voz atravesó el territorio, en el siguiente segundo, miles de Demonios fueron vistos volando por el cielo hacia Alucard.
"Cinco." La cuenta regresiva comenzó, incitando a los Demonios a usar toda su fuerza para escapar del territorio.
Algunos saltaban por encima de las casas, mientras que otros corrían por las calles.
Algunos estaban secuestrando Demonios femeninos y corriendo con ellos sobre sus espaldas.
En menos de tres segundos, todo lo que quedaba eran las Legiones de Demonios de Malphas.
"....." Malphas y sus Generales miraron el espectáculo con los ojos muy abiertos en estado de shock.
"Cero."
Los ojos de Víctor comenzaron a brillar con un Rayo.
RUMBLE, RUMBLE.
El ruido de Rayos se escuchó en todo el territorio.
"Vepar, sujeta a Junketsu. No toques la empuñadura, o te pasarán cosas malas."
"S-Sí, mi Señor." Vepar tartamudeó un poco mientras tomaba a Junketsu de Victor.
Víctor miró hacia el cielo y, con un impulso, desapareció y apareció sobre la ciudad.
Una tormenta literal de Rayos dorados comenzó a formarse en el cielo.
"¡E-Espera!"
"¡Espera, carajo!"
"¡Tengo que salir de aquí también!" Los dos Generales hablaron al mismo tiempo.
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Mis Tres Esposas Son Hermosas Vampiros『 4 』
FantasyVíctor era un hombre normal de 21 años, creció en una familia amorosa que lo ayudó a cuidarse sabiendo que tenía una enfermedad prácticamente incurable, la sangre RH nula, era dueño de un tipo de sangre raro.. Pero lo que Víctor no sabía, es que es...
