Mis Tres Esposas Son Hermosas Vampiros『 4 』

Capítulo 694 - Te Extraño. 2

"Si tuviera que describirlo en una palabra... Infernal."

Víctor soltó una risita divertida, con una melodía tan hermosa que hizo que Ana se retorciera interiormente, aunque no lo demostrara externamente.

Había aprendido a controlar sus impulsos.

'No era mentira cuando dijo que lo desearía inconscientemente.'

Tal vez, esa fue una de las mayores desventajas de convertirse en un Noble Vampiro.

'¿Por qué mi hijo es tan malditamente perfecto? Joder.'

"Hilda no se lo toma con calma", comentó Víctor.

"Sí, pero gracias a ella, ahora me conozco mejor." Anna mostró una gran sonrisa.

"¿Oh? Cuéntame más."

"Víctor, hijo mío... ¡Lo que me has dado es una bendición! ¡Nunca me había sentido tan fuerte, tan llena de energía y tan hermosa como ahora!" Anna parecía una niña emocionada a la que le habían dado un hermoso regalo.

Víctor sonrió con satisfacción cuando vio que ella estaba hablando honestamente.

'Por supuesto que lo estaría. Ella no sería mi madre si no hablara honestamente.'

"Me alegro de que te guste." Víctor asintió satisfecho.

"¡Mmm!" Ella asintió varias veces con satisfacción: "¡Estoy haciendo cosas que solo yo veía en las películas! ¡Es inmensamente gratificante! Es una pena que solo pueda disfrutarlo ahora..." Comentó un poco abatida al final.

"Eso es normal. Lleva un tiempo acostumbrarse a controlar los deseos. Solo cuando eres capaz de controlarte a ti mismo te das cuenta de la bendición que es esto."

"Eso es verdad." Ella se rió suavemente, volviendo a su anterior estado de excitación.

"Hablando de deseos, dime honestamente, ¿Cómo te sientes?"

Anna miró a los ojos violetas de Víctor durante un largo momento. Al ver que él no iba a dar marcha atrás, suspiró y decidió ser honesta:

"Para ser honesta, incluso ahora, quiero saltar encima de ti y montarte hasta perderme en la lujuria mientras bebo tu sangre hasta quedar satisfecha."

Sus ojos brillaron con un rojo sangre depredador. Se mordió el labio con deseo, pero pronto la intensidad de sus ojos disminuyó y apartó la cara:

"Pero al mismo tiempo, creo que está muy mal, y no quiero hacerlo. Sería una traición a mí misma y a mi marido; no quiero ser alguien que se deja llevar por sus deseos."

"Mmm." Víctor asintió suavemente, "No está mal dejarse llevar por el deseo, Madre."

"... ¿Huh? Pero dijiste..."

"Sé lo que dije, madre... Haah, ¿Por qué siempre llevas las cosas a los extremos?" Víctor suspiró.

"¿Qué quieres decir?"

"Equilibrio, Madre, Equilibrio."

"¿Equilibrio?"

"Correcto. No debes convertirte en alguien que solo actúa por deseo. Si lo haces, eventualmente te perderás si vas demasiado lejos. La moderación es importante. Pero al mismo tiempo, no debes contenerte demasiado, o te frustrarás tanto que no podrás contenerte más."

Al ver que ella seguía sin entender, Víctor decidió explicarse:

"Tómame como ejemplo."

"Pasé 700 años en el Infierno. Todo lo que hice fue entrenar, gobernar, entrenar y reclutar Demonios en mi tiempo libre."