Al pasar una hora si no estoy mal, llegamos a tierra firme, le agradecimos a Caronte por traernos y seguimos caminando hacia frente.
A la distancia se veía una gran puerta, era evidente que era la entrada al segundo anillo.
Fuimos corriendo ah ese lugar pero
Belcebu junto los insectos que pudiera haber en la cercanía y con su magia creo unos insecto los cuales usaría para crear una nube de insectos en la cual iría volando.Me toma de la mano y me sube a la nube.
—para que tienes alas si de todas formas vas a usar insectos para moverte por el aire....aparte ¿aquí hay insectos?
—tengo alas porque el creador lo quiso de tal manera....y si hay insectos debajo de la tierra otra cosa que parezca un desierto porque ellos se comen las almas rebeldes que se niegan a ir donde les toca sin olvidar que abajo esta mi anillo....parece que estar en la tierra por muchos siglos te ha nublado un poco la idea que en realidad es el infierno, es un lugar de pasada para las almas pero van a sufrir tanto como hayan hecho pasar a los demás.
—no se me olvida Belcebu....a que viene eso.
—por tu rostro que muestra un pánico oculto....aunque lo recuerdes pasastes mucho tiempo fuera, desde que rompimos nuestra relación, no volviste a bajar y pues no me sorprende que tengas el mismo rostro de asombro y terror el primer día que bajastes —me sonríe.
Yo solamente me sonrojo al escuchar lo que me decia.
—una última pregunta Muerte ¿por que siendo tan ágil te lastimaron tanto esos humanos?...no me digas que quieres purgar tu alma de los pecados que cometiste?.
Me queré sorprendida pero a la vez me esperaba que tarde o temprano se daría cuenta y me lo preguntaría.
—mi alma tiene que pagar los terribles pecados cometidos en el pasado ¡necesito el perdón divino! —levantó la voz.
—¡el perdón divino no existe y menos para los demonios!....como nosotros....acabamos en el infierno después de la guerra santa —exclama pero al poco tiempo Belcebu baja el tono de voz.
Desvío la vista y empiezo a llorar.
—yo que tengo que ver en eso, yo no participe en esa maldita guerra, nací después de que se librará.
—no puedo creer que me haya enamorado de ti Muerte....eres muy sensible.
Solamente sonrió ocultando la tristeza y melancolía que sentía.
Llegamos a la gran puerta que decía lujuria en hebreo.
Me limpie las lagrimas y abrí la gran puerta.
A espaldas Se encontraba una gran ciudad y en medio el gran castillo de asmodeo.
Habías casa por todas partes, estaban hechas al parecer con roca y madera, este lugar era todo lo contrario a lo que se contaba en la tierra, al menos lo que estoy viendo así era.
Por las calles iban caminando sucubos he incubos, eran la categoría de demonios que principalmente habitaban en esta zona, estos son demonios sexuales, los cuales se alimentan de la vitalidad sexual de los seres humanos....son Causantes del pecado principal de este lugar que es la lujuria.
No dimos más de unos pasos para que todos los demonios se dieran cuenta de nuestra presencia, todos formaron unas filas y se a rodilladon ante nosotros.
Gritaban a los cuatro vientos mi nombre, madam Muerte y algunos lord Muerte.
Me daba pena.
—Conque ha regresado al infierno —un demonio desconocido dice al escuchar mi nombre.
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La Travesía De La Muerte
SpiritualLa muerte, como hija de dios, se adentra en en una travesía por los distintos planos de la existencia misma para encontrar el responsable de alterar el estatus cuo de la vida al que las almas no llegan a al plano espiritual lo cual podría causar un...