Mi amada Lily

capítulo 16

me la pasé muy bien esta noche

También yo
Vi ese evento y supuse que te gustaría ver los fuegos artificiales

me encantaron
gracias Kevvv

Por nada, Lily
Ahora ve a dormir
Mañana es un nuevo día

vale, te quiero descansa

❤️

Te quiero. Le dijo te quiero. Y ni siquiera dudó en hacerlo. Porque de verdad lo quería.

Había disfrutado la mejor noche de su vida. Y gracias a él.

❤️‍🩹

29 de septiembre de 2018

—¿Invitarás a Kevin? —preguntó Raúl, estaba recostado en la cama mientras Lily terminaba de maquillarse.

—Sí quisiera, pero esta semana su curso ha estado lleno de exámenes, y siento que no va a poder. Y me pondré triste si le pregunto y me dice que no.

Raúl rió un poco.

—¿Y ya? ¿Es esa tu excusa? No. Yo creo que no quieres invitarlo porque planeas ponerte borracha y no confías en ti misma estando ebria y a su lado, ¿cierto?

Lily dejó su labial rojo a medio camino y suspiró. Miró a su amigo a través del reflejo del espejo y entrecerró los ojos.

—A veces me molesta que me conozcas tan bien.

—Eres predecible —replicó, encogiéndose de hombros. Y antes de que Lily pudiera ofenderse, él siguió hablando—: Vamos, invítalo. No puedes perder nada. Dignidad, tal vez, pero qué más dá, la perdiste desde la primera vez que le rogaste por un beso.

—Oh, mejor cállate o te arrojaré algo.

Pero, sin embargo, sí tomó su celular y entró al chat que tenía con Kev. Los días anteriores habían hablado muy poco, hablaban más por llamada últimamente, y era por eso que Lily sabía que estaba en semana de exámenes. Lo había mencionado ligeramente, por lo que ella había decidido mantener un poco la distancia para dejarlo estudiar.

hola, Keeev

—¿Qué clase de saludo es ese? —preguntó la voz de Raúl por encima de su hombro. Se había parado de la cama sin que ella se diera cuenta y ahora espiaba su conversación—. Suena muy puritano.

Lily escondió su teléfono.

—No seas metiche —regañó.

Él bufó y regresó a la cama. Unos segundos después, su pantalla se iluminó con un nuevo mensaje.

Lily
Qué pasa?

Bueno. Qué más daba lo que pasaba. Quería que él fuera.

hoy salgo de antro con unos amigos, quieres venir?

Ojalá pudiera, estoy atascado en exámenes):

Lily intentó esconder su decepción. Pero al parecer no lo hizo muy bien, porque enseguida Raúl se encogió en su lugar.

—¿Entonces no? —preguntó, y ella negó con un suspiro.

aaah, vale, ntp, en otra ocasión será

El que no fuera Kev le bajó el ánimo un poco. Había estado muy feliz por la salida, pero ahora que sabía que no había posibilidad para que él fuera, se sentía extraña.