Rudbeckia

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—Es raro que no sea congénito, pero es más raro que desaparezca después, por lo que es una situación muy especial. Sin embargo, si lo hubiera confirmado cuando era joven, no habría habido más confirmación después de eso, a menos que estuviera ocupada en el sacerdocio.

No suena muy claro. ¿No sabían nada cuando los miembros del Vaticano me interrogaron?

Además, no sé en qué estado estaba Rudbeckia antes que yo.

Sin embargo, en la historia original, ella nunca se enfermó como yo. Como nunca había estado asociada con las bestias, solo podía suponer que probablemente era un efecto secundario de haber entrado en el cuerpo de otra persona.

Con mi expresión sospechosa, Sergei suspiró con tristeza como si se sintiera incómodo.

—Lo siento, señora. Creo que debe haber una razón por la que ni siquiera lo sabía, señora.

—...

—Entonces, mi señora... Si fuera tal defecto, la parte que podría parecer un defecto no debería haber sido conocida. No sabía cuándo ni adónde iba...

Significaba que si se supiera que la hija del Papa, la Princesa de Romaña, no tenía una divinidad inherente, podría devaluarse cuando se vendiera.

Además, yo no era la hija biológica del Papa.

Incluso si otros no lo saben, sospechan. Si se supiera que no había un núcleo sagrado, habría sido lo mismo que infundir confianza en la sospecha.

Como era de esperar, fue así.

No hay manera en la que no lo supieran. Incluso cuando fingían ser amable conmigo, durante mi enfermedad anual, se burlaban de mí.

Es tan obvio que no es realmente sorprendente.

Entonces, desearía que mi médico dejara de mirarme así.

—No importa. Pero es extraño que mi hermano no dijera nada cuando vio este brazalete.

A pesar de que deliberadamente lo escupí de una manera juguetona, nuestro Sr. Sergei se deprimió aún más por lo que estaba mal.

Oh, mi.

—Probablemente sea porque no sabía lo que era... Probablemente sea lo único hecho con el corazón de un dragón en este momento. Si eres un sureño, realmente no lo sabrías, y ni siquiera lo notarías.

Incluso después de asentir con la cabeza para indicar que entendía, Sr. Sergei continuó sonriendo con una vieja mirada triste en su rostro.

De todos modos, hay bastantes personas que conocen mi secreto ahora.

Ellenia y su padre, los caballeros de escolta de Omerta, el rey, los Caballeros de Longinus, la Guardia del Palacio Real, el caballero del doctor...

Aun así, era sorprendente que no estuviera demasiado ansiosa o preocupada.

Ni siquiera sabía por qué.

Aunque no era particularmente fuerte ni nada, solo me sentía indiferente como si estuviera bien.

Dado que Isuke está vivo y yo estoy viva, parece que todo estará bien a partir de ahora.

Y nuestro cachorro de dragón, Popo y Griffin están a salvo.

Aunque el Palacio de Angvan fue aplastado tremendamente...

—Señora, el duque está aquí.

Me senté en una manta, abracé mi almohada, dejé de pensar y rápidamente me enderecé.

Nuestro duque, entró lentamente en la habitación con una atmósfera incómoda.