Rudbeckia

52

══════════ .˚♡˚. ══════════

¡Se suponía que yo debía ser quien lo sedujera! ¿Por qué estaba vestido como si me estuviera seduciendo?

¿Qué quiso decir con no tener tiempo para cambiar, él era el personaje principal?

Me estrechó la mano, levantó el cuerpo y extendió el brazo hacia mí.

—Es sólo una o dos veces que voy. Siento lo de la ropa.

'Veo. No quieres que vaya sola al banquete, así que no te cambias de ropa... ¿Quién eres realmente? ¿Es este un asesino disfrazado de Isuke?'

—No, es bastante nuevo para mí... tan genial. Es como un sueño asistir a una fiesta contigo.

Fue una gran mejora, considerando que me dejó solo en el otro banquete.

Mis ojos seguían girando hacia sus abdominales, así que solo agarré su mano extendida.

'Oh, ¿por qué te agarras con tanta fuerza? ¿Realmente parezco una niña?'

No parecía descabellado decir eso. Él era bastante alto comparado conmigo.

Estaba muy preocupado por cómo nos veríamos mientras bajábamos las escaleras que conducían al salón de banquetes, conmigo como rehén en manos de mi marido gigante y de aspecto rudo.

—Oh mi señor, mire eso, Lord Isuke...

Eres Lord Isuke, ¿no?

—¿No es ese el uniforme? He visto a mi hermano usarlo antes, ¿cómo puede sentirse tan diferente...?

—Nunca lo había visto así antes.

—Oh mi...

Todos, yo también estoy babeando. Entiendo.

Mientras tanto, la respuesta que dieron otros Paladines fue muy diferente.

—¿Qué está mal con él?

—No se cambió de ropa.

—¿Pero por qué aparece así? No tiene conciencia.

—Tan descarado.

No fue sorprendente, pero fue una reacción de desaprobación total.

De todos modos, en general, no fue una atmósfera de descortesía. De hecho, dado que estaba en una misión, no se pudo evitar. Mientras sean paladines, supuse que todo estaba perdonado. Yo también quería ser como ellos.

—Al lado de él...

—Escuché que estaba celebrando un banquete para su esposa. Supongo que estuvo bien.

—Por qué...

—No me importa si ella...

Por supuesto, también hubo murmullos sobre mí. 'Jajaja. Por supuesto que lo esperaba. Es entendible.'

Además, se sintió como si fuera ayer cuando me dejó en el banquete y, de repente, hizo esto...

Mi arrogante esposo no parecía tener reparos en el tema del que charlaban innumerables personas en el salón de banquetes.

Mira su figura arrogante.

—Eso estuvo cerca, hermano.

—Oye, si tienes conciencia, ¿no necesitas cambiar? No importa cuán apresuradamente hayas venido.

Cuando llegamos al salón de banquetes, fuimos recibidos primero por Ellenia y Sir Iván.

Ahora que lo pienso, esta vez Lord Iván ha escoltado a Ellenia... 'Mmm, estos dos. ¿Mmm?'