2.15

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Aaron Rivera

Me levante primero que ella y era hermosa tenerla desnuda a mi lado durmiendo.

La acerque a mi cuerpo para abrazarla.

Jamás me había sentido completo hasta este día.

Solo me faltaba mi hijo para ser un hombre feliz.

Mi cuerpo dolía un poco del cardio que habíamos hecho.

-Buenos días- escuche que susurro

-Buenos días fresa- bese su frente

-Tengo que bañarme, pero me duele allí- me reí

-¿Necesitas ayuda?- ella dudo un poco

-Posiblemente-

Sali de la cama sin importarme que llevaba la campaña en todo su apogeo.

-¿No te cansas?- señalo mi miembro

-Es rutina de la mañana, me encargo luego- la tome en mis brazos para ir a mi baño.

-No tengo olores de mujeres, pero mi aroma te asienta bien- ella rio negando

La deje parada frente al lava manos en donde le di un cepillo de diente nuevo.

Nos lavamos los dientes, mientras cada quién miraba al otro desnudo por el espejo.

-¿Te gusta mi cuerpo?- asentí sin pensarlo dos veces

-Estas curvas me vuelven loco- toque sus caderas

-¿Ahorramos agua?- me reí cuando me hizo la proposición

-¿Sabes lo que eso implica?- señale mi miembro

-Alguien me prometió todo un día de aventura y no falte a mi trabajo por nada- la tome de sus mejillas y la bese

Entramos a la ducha sin dejarnos de besar.

Ella se ponía de puntillas y solo alcanzaba a mi cuello.

Tome el jabón para pasarlo por todo su cuerpo.

La pegue a la pared para insertar mi miembro mientras le lavaba su cabello.

-Ah nadie me lo había hecho así- gimió

-Es mi primera vez también- confesé

Jamás lo había hecho en una ducha.

Incluso jamás había bañado ningún otro cuerpo que no fuera el de mi hijo.

La tomé de sus caderas cuando sentí venirme.

Claramente saque mi miembro de su interior porque no teníamos condón puesto y no somos tan irresponsables.

-Dios- mordí su hombro

-Me excitas demasiado- confesé

Nos quedamos recostado un poco de la pared mientras intentamos recuperar nuestra respiración

Terminamos de ducharnos para darle a ella una de mis camisa y un bóxer mío.

-Lavare tu ropa- informé mientras tomaba parte de mi ropa sucia también

-Gracias- me sonrió para salir de mi habitación

Todo olía a nosotros.

Me quede mirando la ropa de cama y sería mejor lavarla también.

-¿Qué quieres de desayuno?-

-Tú boca- ella negó riendo

-Hablo de comida Aaron-

Por mi hijoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora