Mujer De Los Martileni

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Amos

Tuvimos un delicioso almuerzo, Marko y Sofia hacen un buen equipo cocinando y la comida estuvo excelente digna de grandes cocineros. Ahora nos encontrábamos todos en la sala, Sofia enseñaba a bailar a Samuel canciones de rock and roll, funk o pop.

-Tienes que mover más los pies- Le dice a Samuel.

Todos los demás solo miramos, Sofia sabe moverse muy bien para toda clase de música, también parece que lo disfruta al hacerlo. Sonaba una canción de Michael Jackson, parece ser que es una de las canciones favoritas de Sofia y ahora nos están enseñado como bailarla para que en un futuro bailáramos con ella esta canción.

Blood On The Dance Floo

Sonaba por toda la casa, Sofia no dejaba de bailar sorprendiéndonos a todos, sus movimientos eran tan atrayentes que cualquiera podía acercarse y bailar con ella aun no gustarle esta acción.

Nos detuvimos al escuchar el celular de Sofia sonar, ella rápidamente va con el -Ya vuelvo chicos- Sale al jardín para contestar la llamada.

Marko apaga el altavoz -Estoy agotado, Sofia tiene mucha energía- Se tira al sofá.

-Se mueve muy bien- Me siento a su lado -Es sorprendente, hasta hace que Leonardo baile- Bromeo, los menores ríen al ver a nuestro hermano mayor.

-¿Cómo negarme a esos ojos?- Leonardo se sienta después de beber su gaseosa -Es como si estuviera viendo a Samuel pero mujer y hermosa-

-¡Oye! Soy hermoso- Se queja Samuel -Si no me creen entonces vamos a preguntárselo a Sofia-

-De seguro ella dirá que lo eres- Le dice Marius -O quien sabe y te diga que eres horrible-

Volvimos a reír -Eso no es gracioso- Samuel cruza sus brazos -Según escuche de su hermosa voz decirme guapo-

-A mi también me dice así- Reprocha Marko.

-Igual- Dice Oscar.

-Digo lo mismo- Suelta Marius.

-No es justo, ustedes son horribles- Samuel se burla de ellos.

-No más que tu- Dice Marko.

Niego varias veces, los menores le gustan pelearse por tonterías. Me levanto para ir al jardín, veo a Sofia sentada en una silla y voy con ella, la levanto para yo sentarme en la silla y dejarla a ella en mis piernas.

-Sí, todo está muy bien- Besa mi mejilla -Umm si he conocido a varias personas, pero pocas han logrado ser mis amigos- Coloca su cabeza en mi hombro -Aun no tengo novio-

Me tenso -Por los momentos- Le susurro.

-Pero hay algunos chicos que me llaman mucho la atención- Besa mi cuello -Se los presentaré si llega a ser formal, por los momentos es un secreto- Ríe y se acomoda mejor.

Paso mis manos por sus muslos, me concentró en tocar su piel y en como ella besa mi cuello antes de responderle a la persona con quien habla. Duramos así unos minutos hasta que ella cuelga la llamada y solo se queda viéndome con una hermosa sonrisa.

-¿Con quién hablabas cariño?- Beso su cuello y levanto la sudadera que trae para apreciar sus bragas.

-Con mis abuelos- Pasa sus manos por mi espalda -Siempre me llaman-

-¿Le cuentas sobre nosotros?- Muerdo mi labio al ver sus piernas, grande, suaves y muy apetecible.

Mi niña es hermosa.

-Sí, le he dicho que han sido muy buenos conmigo y que son mis mejores amigos- Se acerca más a mí -Amos- Dice mi nombre cerca de mi oído haciéndome dar escalofríos -Hace frio aquí afuera-