✧⁠*⁠。Úʟᴛɪᴍᴏ ꜱᴜꜱᴘɪʀᴏ{ ˢᵐⁱˡᵉʸ ˣ ᵗⁿ }.⁠｡⁠*⁠♡

21

-¿Y mamá y papá?- pregunté a keneya

este se giró, hechó el humo de su cigarro sobre mi, para luego pronunciar las palabras más duras que podía escuchar. 

- están muertos - dijo

me quedé en shock

- ¿qué? ¿cómo?-

- en un accidente de coche-

lágrimas caían de mis mejillas.
nono, esto no puede ser, no es posible, es todo una broma...

Me empezaba a costar respirar, estaba temblando, y caí de rodillas al suelo, mientras kaneya, estaba apoyado en el marco de la puerta viéndome, con una sonrisita de lado.
Me sentía desanparada, Ya no voy a poder hablar con ellos, ya no voy a poder comer las ricas galletas de papá, ya no voy a poder recibir un super abrazo de mamá, ya no vamos a poder hacer cosas en familia, ya no hay nada...
No los volvería a ver atravesar la puerta de la entrada, ya no volveríamos a reir juntos ya no veríamos pelis, no cocinríamos, no haríamos nuestras tonterías ni viajes en familia, ya no tengo padres...estás...muertos...
Me levanté, con mis ojos ahogados en lágrimas

- ¡acaso no te importa!- le grité a mi tío, mientras me acercaba a él - ¡era tu puto hermano!

kaneya solo me veía con un aire de superioridad

- ¿¡ ni una sola lágrima ?! ¿¡ no tienes puto corazón ?! ¿¡ acaso sientes algo!?- dije mientras le tocaba el pecho en el lado del corazón repetidas veces

No quería aceptar lo que había pasado, y la ira fue ka única cosa que me ayudaba para canalizar mi dolor

kaneya me agarró del mentón, y con el pulgar de su mano derecha, limpió mis lágrimas, para luego besarme.

- ¡ ALEJATE ! - decía mientras intentaba soltarme del agarre - ¡DEJAME EN PAZ! por favor...- decía mientras un mar salía de mis ojos.
Le pegué un puñetazo desesperadamente en el estómago, pero recibí una bofetada a cambio, este me arrinconó contra la pared, sacó una jeringuilla de su bolsillo y me la clavó.

- esto solo es para que te relajes - me susurró al oído

- ¡estás enfermo! - 

- te perdonaré eso si a cambio me haces un favor - dijo mientras se acercaba más a mi

intenté escapar de el agarre de kaneya, y me acordé de una navaja que tenía  en el bolsillo, la la saqué y se la xlavé en la pierna, lo cual me ayudó a escapar del agarre. Me quité la jeringuilla y me fui corriendo de casa, mientras cogía el móvil para llamar a naoki.

Tení las manos llenas de sangre

- mierda, no me contesta- murmuré

naoki iba a venir esta tarde, para reunirnos todos...

estaba caminando por la calle, con los ojos rojos, iba hacia el lugar dónde conocí a kenji, supuse que estaría allí. Por el camino, me encontré a una persona que se me hacía familiar.

- hey - me dijo, a lo que yo solo le miré con mala cara - ¿me recuerdas?

- no - le dije seca, no estaba de humor, aún estaba asimilando todo

- kisaki - añadió

- enhorabuena - le dije sin para de caminar

- eres linda, y fuerte - yo simplemente no le respondí

- no puedo hablar ahora - dije dejándolo atrás, para luego desmayarme

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