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Después de que Zoro me dejara muy en claro que para entrenar con él debía mantenerle el ritmo en lo que a rutinas respecta, regresamos con el resto de la tripulación, yo muy feliz por finalmente empezar a trabajar para dejar de ser una carga.

El peliverde, por su parte, se dedicaba a ignorarme, musitando bajo el aliento sobre la pobre decisión que había tomado.

Finalmente, encontramos a Luffy hablando con el viejo, este muy seriamente explicando que de hecho se rumora que existe un método para llegar a la supuesta isla del cielo.

Genial, más locuras, porque el querer ir al cielo no es suficiente disparate en sí.

— Cuando de pronto se hace de noche en el mar, esto es causado cuando las nubes se juntan de forma muy compacta. "Cumuloregalis", le llaman. Se forman sin corrientes de agua ni de lluvia. — Explicó con solemnidad, a pesar de los constantes intentos de Luffy por interrumpirlo.

Pude ver a Zoro comenzar a dormirse por lo que estaba narrando el viejo, claramente sin prestarle atención alguna, y no pude evitar soltar una ligera risilla ante la cara que ponía.

Aunque claro, sabía que no eran tonterías lo que nuestro nuevo amigo narraba, nosotros mismos lo habíamos presenciado, y habíamos huido con pánico de ello.

— Se dice que son nubes fosilizadas. — Continuó, retomando mi atención. — Es una nube que no se ha descubierto. Si realmente existe la isla del cielo, es su mejor opción.

— ¡Bien!, ¡Decidido!, ¡Iremos hacia esa nube! — Exclamó Luffy de un brinco.

— Esto será un desastre... — Murmuré, viendo al menos 3 detalles que nos lo complicarían, el mayor de estos siendo el hecho que parecíamos únicamente decir disparates.

— Ja, tendrás tantas cosas que reparar. — Se apresuró a burlar Zoro, a quién no había visto que se había parado junto a mi.

Le solté un pequeño golpe, pero sabiendo perfectamente que era cierto. Si queríamos... volar, bueno, habría que trabajar mucho. El pobre Merry apenas y puede flotar.

— Ni siquiera sabemos cómo llegar. — Le murmuré.

— Pueden usar la corriente ascendente, al menos eso dicen. — Me explicaron.

— ¿Tenemos que volar? — Preguntó Nami preocupada. — Nos podríamos estrellar.

Volteé a ver al rededor en busca de alguien que explicara que no, que de hecho todo era muy seguro.

Nada.

— Se supone qué hay un hueco en el mar donde se calienta tanto el agua que explota, creando una corriente que en un minuto llega al cielo. — Comentó el viejo tras de mi. — O eso dicen. — Añadió, como deslindándose de cualquier responsabilidad en caso que no fuera a funcionar.

— Son demasiados cálculos para evitar morir... — Murmuré, recibiendo una risa por parte de Zoro, quién agradecía que ese no era su trabajo.

— ¡Iremos! — Exclamó Luffy.

— ¿Bromeas? El merry no soportará. — Reclamó Usopp, con toda la razón.

— Pero no se preocupen, podemos hacer arreglos. — Añadió el viejo.

Ah, ese sonaba como un trabajo para mi. Un trabajo que no me emocionaba demasiado llevar a cabo.

Volteé a ver al destartalado barco, revisando mi lista mental sobre todas las cosas que había que reparar, y añadiendo las dichosas modificaciones que ahora era necesarias... Es demasiado trabajo, y de pronto llegaba a mi mente la idea que hacer algo por pura diversión sería genial, algo que balanceara la carga... Quizá disfrazar al Merry de gallina, para que tenga suerte volando o algo.

Sonrisas. ¦¦ Zoro Y Tú ¦¦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora