Alaska Malfoy había vivido toda su vida limitaba por su padre, estaba llegando al punto de que su mente estába muerta pero su cuerpo vivo.
Eso pensó hasta que le asignaron darle turorias de Encantamientos a James Potter un Gryffindor revoltoso aman...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Adelaine quería matar a Laena, quería que le dijera que todo eso que está diciendo es falso y solo era una pésima broma para ella.
Pero sabía que al pensar eso se estaría engañando, siempre supo que Laena tenía un lado que no había visto, lo quería conocer para así darle amor, pero en estos momentos odiaba ese lado, le quería reprochar a Laena por dejarse dominar, era inútil hacerlo, no tenía el derecho.
-Tal vez pienses que soy la peor persona y que merezco todo el malo del nundo, lo comprendo, yo misma lo estoy pensando en estos momentos.-Dijo Laena con una sonrisa triste.
Adelaine sintió como su corazón se ablandaba, pero lo que hizo Laena le vino a la mente y su enojo incremento.-No trates de manipularme, siempre haces lo mismo, me manipulas con tu "buen corazón" y al final terminas siendo una farsa total.
Laena transformó su rostro de arrepentimiento a uno serio.-Nunca te manipuló.
-Claro que si, cuando nos escapamos en la noche para ver las estrellas, yo no quería ir y tu me dijiste que si no iba ya no sería tu amiga.
-Para aclarar eso lo dije de broma y ambas sabemos que fuiste tú la que quería ir.-Dijo Laena con enojo acercándose a la salida.-Y te recuerdo que en esa ocasión era mi cumpleaños.
Adelaine puso una mueca de confusión hasta que el recuerdo de esa noche llegó a su mente haciendola sentir mal.-No trates de justificar tu gran error con el mío que es insignificante.
Laena sintió como su corazón se rompió un poco, Adelaine sabía la importancia de su cumpleaños y el simple hecho de que olvidará esa noche le dolía.
-Bien, ya entendí, me voy a ir y espero que no te arrepientas de lo que me estas diciendo Parkinson.
Adelaine la miro con un poco de tristeza.-Creme cuando te digo que no lo haré.
Laena asintió tratando de que las lágrimas no salieran de sus ojos.-Antes de irme te diré la razón por la cual oculte esto. Esa poción que dices que es para mis padres y así no los maten, no es para ellos. Me mostraste la carta de tus padres ¿y sabes cual fue mi primer pensamiento? Estoy segura que no, así que déjame decirte, crear algo para que así tu estés a salvo. Tu sabes el odio que le tengo a mi familia y aun así decidiste dudar de mi.
>>Dime algo Adelaine, ¿en verdad me conoces? ¿O solo finges hacerlo para que así esté de tu lado? La verdad no me molesta que estés haciendo lo segundo, porque hasta yo misma dudo de mi en cada momento. Muchas gracias por recordarme que por más que intente cambiar mi apellido nunca me dejará avanzar.
Dicho esto Laena salió de la habitación con gruesas lagrimas que bajaban por sus mejillas.
Adelaine queria sentirse mal, pero no permitiria está vez que los secretos de Laena la destruyeran, no de nuev, no podí seguir el siclo de siempre.