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Al siguiente día Marshall se preparó rápidamente viendo a Joel aún durmiendo tranquilamente pues su trabajo comienza a las 9 am:

- Lamento hacer que te preocupes...

El pelinegro sintió como de costumbre que sí mismo es una molestia solo cansando a la gente a su alrededor

La gente en la oficina siguen en lo suyo, dichosos ellos que no sé enterar de todo y siguen en lo suyo, Marshall camino por el lugar sin ser notado hasta estar en su propio escritorio al que no pensó volver a ver, todo parece seguir en su lugar, pero nada se siente igual:

- Marshall, el jefe nos llama

El chico se sobresaltó girando rápidamente, Lisa lo observó con su rostro serio como de costumbre llamándolo, Marshall se apresuró para entrar a la oficina y solo cuando pudo ver a Jules todo su cuerpo se tensó, ambos secretarios se pararon frente al amplio y oscuro escritorio esperando alguna otra instrucción:

- Informa Lisa

La mujer sostuvo su tableta apoyándola en su abdomen tecleando un par de veces:

- Esta semana se estará cerrando un contrato con la compañía FFI lo que nos ayudará a la expansión internacional de nuestra marca sin embargo aún es necesario mantener un buen contacto con los socios... este mes hay múltiples reuniones... la agenda del señor esta llena...

Marshall siguió las palabras cuidadosamente sin querer perderse la información a pesar de la incómoda mirada de Jules pudo recordar todo correctamente:

- Envíale la agenda a Marshall y vete...

La mujer envió lo necesario y salió del lugar, de nuevo solo hay dos personas, Marshall recibió la agenda rápidamente y la reviso:

- ¿Qué hay hoy?

Jules se levantó de su escritorio y se acercó a una jarra para luego servirse algo de agua, Marshall tuvo que tragar saliva antes de hablar:

- Hoy tiene una junta, posteriormente una vuelo a Francia para una reunión mañana por la mañana...

- Bien, prepárate por qué iras conmigo 3 días...

Todo el cuerpo del pelinegro se tensó y su corazón recibió otro dolor, de hecho su mente se quedó realmente en blanco por unos segundo:

- ¿Solos?

Jules terminó de beber y puso el vaso en su lugar para luego acercarse al chico quien no pudo evitar dar dos pasos atrás y bajar la mirada:

- Así es... Ve y prepara algunas cosas, quiero verte aquí al finalizar mi junta...

El hombre se acercó aún más dejando solo centímetros de distancia entre ambos, Marshall lo miró asustado:

- ¿Me tienes miedo?...

Su mano estuvo a punto de acariciar la mejilla de Marshall, pero este lo esquivo como reflejo, Jules se sintió extraño al ver su negativa, por un momento lo observó para luego suspirar y tomar el teléfono de escritorio:

- Lisa dile al conductor que lleve a Marshall por sus cosas para el vuelo de hoy...

Del otro lado se escuchó un "si señor" de la femenina voz de Lisa, Jules colgó y observó a Marshall:

- Él te llevará a mi departamento, llegaré y nos vamos ¿Entendiste?

- Podría llegar aquí y yo-

Los ojos de Jules fácilmente podrías confundirse con dagas pues apenas miro a Marshall el lugar se quedó en silencio, el hombre masajeo su sien:

- No lo repetiré, ahora vete que llegaré tarde a mi junta...

El pelinegro asintió y salió rápidamente con kas piernas temblorosas:

- Marshall por favor baja, está el conductor esperándolo...

Todos hablan tan rápido, Marshall sintió su cabeza doler, a pesar de estar acostumbrado a que le den muchas órdenes estas fueron rápidas y repentinas para sí mismo

Cuando subió al lujoso auto negro se sintió sofocado:

- ¿Qué dirección, señor?

- El xx de la calle xxxx casa blanca...

Él comenzó a conducir sin hablar, Marshall apretó sus piernas esperando a llegar pronto, al llegar simplemente se bajó y tomó una mochila pequeña y guardo lo necesario para tres días fuera y algunas cosas extras por si ocurre alguna emergencia, finalmente dejó una nota en el refrigerador diciéndole a Joel que estaría fuera unos días

El conducto apenas Marshall estuvo de regreso comenzó a conducir hacia los departamentos lujosos de Jules y finalmente lo ayudó cargando su mochila y abriendo la puerta para él:

- Dejaré la mochila en el sofá, el señor dijo que le dijera que puede tomar lo que dese de la cocina y la sala mientras él no está... ¿Requiere alguna otra cosa?

Marshall negó rápidamente preocupado:

- Está bien, gracias

El hombre agradeció y salió de la casa, Marshall pensó que Jules debía estar loco si deja a un desconocido en su propio departamento u e tomes su mente dio vueltas:

- "Tal vez hay cámaras y por eso es confiado o quizás sabe que me daría miedo hacerlo"

Las dos son factible superó no importa porque la puerta se abrió nuevamente, esta vez la esbelta figura de Jules se mostró:

- ¿Qué haces ahí parado?

Marshall no noto que mientras pensaba simplemente se quedó a un lado del sofá:

- No es nada ¿Todo transcurrió bien en la reunión?

- Sí...

Jules sostuvo su teléfono a un lado de su oreja con seriedad ignorando a Marshall:

- Sube y carga las maletas...

- Si señor

El chico no habló, sostuvo su propia mochila y estuvo detrás de Jules todo el tiempo, solo cuando estuvieron en Francia y entraron a la habitación Marshall lo pensó avergonzado:

- ¿No entrarás?

Jules ya había entrado a la habitación tomando una botella de agua y apreciando la vista del hotel en el proceso, pero giro nuevamente al no notar que Marshall entrara o se moviera más lejos de la entrada:

- No escuchas?

- Solo hay una cama...

Ambos miraron la cama doble con sentimientos diferentes.

Dos Veces Dos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora