Dos Veces Dos

29

Pero al abrir la puerta una figura oscura lo recivio y sintió que su pecho había sido presionado, Jules lo miró con ojos inyectados en sangre:

- Entra

Marshall dio un paso atrás aún sostenido la puerta y estuvo tentado a irse pero los ojos de la otra parte lo mantuvieron frío:

- ¿Por qué estás así?

- Entra y cierra la maldita puerta Marshall

El pelinegro cerro la puerta pero no se movió manteniendo la distancia entre ambos:

- ¿A dónde has ido cuando no respondes mis llamadas?

- ¿Eh?

Jules gruñó ansioso, Marshall no noto el olor a alcohol por el olorisante de casa, pensó que podrían hablar seriamente:

- Eso...

- No me lo dirás, porque en realidad estabas divirtiendote en bares ¿no? Encontrando a hombres para divertirte porque no estabas satisfecho con lo que te daba !¿NO?!

Su nivel de voz aumento y sus puños se apretaron, Marshall quería hablar y defenderse:

- ¿Quien dijo eso?...

- La persona a la que invitavas a salir contigo todas las veces ¿Sabes en donde olvidaste la maldita pulsera? En una habitación privada ¿Cómo debo pensar? Que eres una zorra que se regala como si nada

Jules se acercó y Marshall solo pudo mirar hacia el suelo en silencio:

- ¿No dirás nada? Claro que no por que no puedes inventar algo, no?

- Jules yo... Las cosas no son así

Esta vez fue sostenido violentamente, Jules lo siguió mirando lleno de celos:

- ¿No son? Vas a negar que hay fotos de ti desnudo siendo tocado por otros hombres

- ...

Su silencio molesto aún más a Jules quien quiso golpearlo repentinamente pero se limito a apretar su muñeca:

- Las tomo Harry y fue el quien me llamaba... yo

- ¿Crees que crere eso? Algo que dices cuando tengo la evidencia, no metas a Harry Maldita sea

Era imposible razonar, cuando Jules se acercó el olor a alcohol llegó a Marshall y comprendió, se sitio asustado y todo su cuerpo tembló como un pequeño animal a punto de ser atacado:

- El me drogo... tenía miedo, quería que me abrazadas pero no era algo que no podía decir

Jules sintió que era un Hipócrita y no soporto más, tomó una lámpara decorativa y la lanzó al suelo, el sonido fue repentino e hizo a Marshall cubrió sus oído aturdido:

- ¿CUANTA MIERDA INVENTARAS? Creo que voy a volver creer eso? No intentes hacerme sentir mal

- Basta...

El hombre no se detuvo, se movía por el lugar con un perro enjaulado, se acercó y sostuvo al chico:

- Bien, espero que no estés cansado porque quiero hacerlo

- No

Lo arrastro hasta la habitación, esta vez Marshall sintió desesperación y comenzó a intentar escapar de su agarre:

- No!! No quiero, para

Jules hizo oídos sordos y tiro se su cuerpo sin dudar, Marshall golpeó la mano del hombre:

- No de nuevo ¿Estas enojado? ¿Crees todas esas mentiras? Entonces terminemos

La palabra "Terminemos resonó en la mente de Jules quien giro y beso violentamente a Marhall obligando a que su boca aceptara su lengua invadiendo la cavidad bucal, la brusquedad lastimo a Marshall quien comenzó a llorar al ser sostenido con tanta rudeza, se intento apartar inútilmente, por un momento Jules se separo y el mordió su labio sin pensar al sentir que no podía respirar:

- Buak!.. uf uf

Marshall recupero el aire limpiando la sangre de sus labios, Jules no presto atención a la herida:

- No lo vuelvas a mencionar, Escúchame Marshall jamás podrás alejarte de mi

- Tengo miedo

Sus lágrimas cayeron mientras Marshall aun era sostenido para evitar que se alejara, Jules lo lanzó a la cama y se puso sobre el poniendo sus manos sobre su cabeza:

- Jules solamente tengo los ojos de Mica pe- pero no soy esa persona, jamás lo seré así que déjame ir, terminemos esto por favor

Jules fue impactado pero el solo mencionó un parecido de ojos, ¿fue algo que dijo Harry accidentalmente? Miró atentamente al chico tembloroso debajo de el:

- Ahora que lo mencionas, Mica tenía algo que se hizo a los 18 años... ¿Te gustaría un regalo?

Su voz fue retorcida y Marshall quiso escapar de ahí pero era imposible, estaba siendo sometido por alguien más grande y fuerte que el, solo podía rogar sin éxito:

- No quiero nada, solo déjame i...

Jules cubrió su boca y lo hizo a un lado, con la otra mano sostuvo su teléfono, busco entre sus contactos y sonrió al encontrar lo que buscaba, puso su teléfono a un lado de su oreja mientras seguía cubriendo la boca de Marshall quien sostenía la muñeca de la otra parte intentando hacer que se alejara:

- Hola Lucas ¿Me recuerdas?

No era posible escuchar las respuestas de la otra persona para Marshall quien luchaba para respirar correctamente, sus lágrimas mojaron la mano de Jules:

- Mmm

- Si, espero que recuerdes el tatuaje que hiciste para Mica hace unos años..... necesito que vengas hoy y lo vuelvas a hacer

Sus ojos brillaron peligrosamente, Marshall jamás pensó en hacerse un tatuaje principalmente por que nunca le gustó el dolor y no está interesado en esas cosas, jamás pasó por su mente, Jules terminó la llamada y se acercó al rostro de Marshall quien giro para no toparse con esos ojos:

- Se verá lindo, se quemo se veía en Mica ¿Que piensas?

Descubrió su boca y Marshall seguía llorando, Jules se sintió incómodo pero no quería recordar quién era este chico y que tantas mentiras dijo:

- No quiero, no quiero un tatuaje, quiero irme

- ¿Ir a donde? Esta es tu casa

Jules secretamente sostuvo una pastilla en su mano y beso el cuello de Marshall quien se movía intentando liberarse:

- Jules Te lo suplico, te ruego que me dejes por favor, no quiero

Era como una flor, una flor que Jules quería poner dentro de una caja de cristal para conservarla, pero la flor insistía en salir por lo que terminó volviéndose loco de esta forma, jamás golpeo a Mica, jamas lo hicieron así:

- Me volviste en esta forma, es rubio culpa

- Ah!! Ayuda por favor, no quiero estar aquí!! Por favor alguien ayúdeme