—Ahora es hora de volver —hablo mientras escribía en su celular.
Camino al aeropuerto, del asiento trasero de la camioneta sacó una caja.
—Es un regalo adelantado de tu despedida.
—¿La perla?
—Soy una madre a la onda.Abrí la caja y era lo que imaginé, lencería sexy, no sabía cómo sentirme al respecto, pero vergüenza fue uno de esos sentimientos.
—No he sabido de madres le regalen lencería sexy a sus hijas. ¡Menuda reina tiene Inglaterra!
—Son otros tiempos, y me lo vas agradecer a los hombres le gustan aunque algunos no lo admiran a tu padre...
—¡POR FAVOR! —la interrumpí antes que siguiera — ¡NO QUIERO ESCUCHAR DE LO QUE LE GUSTA A MI PAPÁ! —me dio escalofríos de solo escuchar padre.
—Eres una exagerada.
—te pareces a ita.
—¡No me digas eso! —parecía ofendida —tú ita nunca me regalaría algo así, es de costumbres muy arcaicas.
—Eso es verdad. Muchas gracias.La abracé porque quise y podía, me quede un buen rato así tanto que puse mi cabeza sobre su regazo y no me di cuenta que me había dormido hasta que sentí sus caricias en mi cabello, me levanté horrorizada por haberme quedado dormida de esa manera.
—Lo siento.
Ella me sonrió y miró tan maternal.
—Lo disfrute más de lo que imaginas —acomodo un mechón que se había salido de su lugar.
No imaginó cómo sería como madre siempre decía que no como mi madre por las constantes regaños que sufría de su parte, nada de eso se comparaba con estos momentos, antes decía que no tendría hijos que no los necesitaría, tendría a los hijos de Nadine o Carter para eso y salvar la dinastía, claro está que fue antes de que conociera a Nate, ahora quiero todos los momentos posibles a su lado incluyendo la maternidad.
Me aterraba la idea de ser madre, sin embargo tengo buena escuela de la mía y sabía que no me dejaría fallar ni ella y mucho menos Nate.
Mi madre supo ser reina y madre una muy buena madre y de esa manera también quiero serlo.
—Eres muy buena madre —confesé, no le digo mucho estas cosas, pero Justo este momento necesitaba hacerlo —No sé qué haría sin ti y papá.
—Y nosotros no sé qué haríamos sin ti, hija.
—tal vez tendrían a Nadine y Carter —bromeé.
—Y no tendría tantos corajes.
—lo más seguro.Empezamos a reír.
—Bien, nos esperan.
Nos abrieron las puertas de la camioneta, yo salí, mi mamá se quedó.
—Adelántate, tengo que atender un llamada.
—Bien.Camine directo al avión, subí las escaleras y mi mamá aún no salía de la camioneta, decidí entrar de lleno al avión, casi me hago del susto que me dieron Nadine, Harper, y todas las demás.
—¡Sorpresa, hermana!
—¿Cómo? ¿Por qué?
—Tu despedida —respondió Harper emocionada.
—Pensé que sería mañana.
—¡Te engañamos!
—¿Por esa razón no respondiste?
—Si.Salude a todas con entusiasmo.
—¿mamá irá?
—Yo no —la miré que ya había subido al avión —solamente ayude a entretenerte mientras ellas llegaban.
—¿a donde iremos?
—Hemos rentado una villa en Florencia.
—Bueno por lo menos no me llevarán a las vegas.
—Eso se lo dejamos a los chicos.
—¿Cómo? ¿Ellos irán a las Vegas? —pregunté
—No lo sabemos —respondió Harper —pero no lo creo son aburridos.Me acerqué a mi madre antes de que se marchara.
—Por favor dile a Cárter que no haga nada tan loco.
—Phoebe tranquila, para esos son las despedidas, un adiós la libertad.
—¡Madre! No puedo creer lo que dices.
—Diviértete. Solo que ya sabes...
—Lo sé.
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The Crown
RomanceAhora que la princesa Phoebe aceptó el trono y a Nate en su vida. ¿Por fin podrá tener su final feliz a lado del hombre que ama? ¿El pasado no se le interpondrá en el futuro? ¿La corona le quedará grande o estará a su medida? Son demasiadas las p...