Cambiando el destino

Una buena amistad me espera...entre sus ojos, el cielo y el mar.

Narra Mayte

Después de la pequeña pelea para que Manuel se tapara recibí al joven de servicio a la habitación que muy amablemente acomodó el desayuno en la mesita que estaba en el balcón, ya estando todo listo se retiró no sin antes agradecerle y darle una merecida propina, me acerqué hacia la puerta del baño y toqué un par de veces para avisarle a Manuel que el desayuno estaba listo.

Mayte: Manuel-Dije después de haber tocado la puerta.

Manuel: ¿Tan rápido ya me estas extrañando?-Preguntó burlón haciendo que me diera pena pues ni siquiera tenía 10 minutos en el baño.

Mayte: El desayuno está en el balcón-Dije recargándome en la puerta-¿Quieres que te espere?-Dije con pena pues de pronto sentí que lo estaba presionando a salirse del baño.

Manuel: Te acompaño-Dijo abriendo la puerta haciendo que casi me cayera pero por suerte me agarró rápidamente evitando la caída-Me debes la vida-Me dijo con una sonrisa.

Mayte: ¡Mijares!-Dije totalmente apenada sin poder evitar soltar una carcajada por el momento vergonzoso haciendo que el comenzara a reírse a carcajadas.

Manuel: ¡Lascurain!-Dijo mirándome con una sonrisa-¿Vamos a desayunar?-Dijo dándome un beso en la frente y me devolvió la estabilidad para ir al balcón.

Mayte: Vamos-Dije sonrojada mientras me separaba y comenzaba a caminar hacia el balcón con los nervios al mil.

El desayuno fue muy agradable, mis desayunos eran con Isabel o con alguno de mis hermanos, mientras resolvíamos pendientes en el trabajo, la platica con Manuel fue muy amena era un hombre serio pero muy interesante que realmente sabia muchísimo sobre la vida empresarial y en lo administrativo era un gran genio habían temas que no lograban interesarme tanto y me hacían disociar pero el me estaba atrapando, después de un rato comenzamos a hablar sobre proyectos que teníamos en marcha haciendo que me diera cuenta que aunque tenía muy buenas ideas se le dificultaba tener seguridad al presentar y ahí entendí como yo había logrado convencer a todos los inversionistas para que invirtieran en los proyectos que les presente.

Manuel: ¡No puedo creerlo!-Dijo sorprendido-¿Cómo lograste cerrar trato con todos ellos?-Dijo mirándome atentamente haciendo que me pusiera nerviosa y mi piel se erizara del solo tener su mirada fija en mí.

Mayte: La presentación de los proyectos siempre los convence-Dije con una sonrisa-Pero quien la presenta convence más-Le guiñe un ojo y le di un sorbo a mi café.

Manuel: Entiendo-Dijo serio y lo miré confundida-Ya casi es hora de entregar la habitación y creo que sería oportuno salir minutos antes-Dijo serio sin mirarme mientras dejaba la servilleta sobre el plato y se levantaba de la mesa, estaba confundida por su repentino cambio de actitud así que dejé la servilleta sobre la mesa mientras lo observaba como camino directo hacia su maleta y comenzó a guardar lo poco que había sacado, me paré e imite su acción estaba tan concentrada en mis cosas cuando me interrumpió una llamada que era de la única persona con la que no tenía ganas de hablar.

Llamada vía telefónica
con Fernando Iriarte

Mayte: ¿Fernando?-Dijo mirando confundida a Manuel quien me miraba serio y después respondí-¿Qué quieres?-Dije molesta y Manuel permanencia en silencio.

Fernando: Chiqui ¿Estás en ocupada?-Dijo angustiado.

Mayte: Estoy ocupadisima-Dije molesta y a la vez me respondió.