CAPSULAS

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HOLA CHIC@S, PERDÓN POR TARDAR TANTO EN SUBIR UN CAPITULO, PERO NO HALLABA INSPIRACIÓN, ESPERO  LES  GUSTE EL CAPITULO  Y GRACIAS POR SUS VOTOS Y SUS COMENTARIOS, POR CIERTO AQUEL GUAPO DE LA FOTO ES WILL.....


Primero apareció todo el sudor en mi cuerpo, mis manos inconscientemente temblaban y se negaban a dejar de hacerlo. De repente las mire y me di cuenta que había manchas purpuras, todas estas incrustadas a manera de dientes, tal y como en mis sueños.

El amanecer se alzaba con fervor y los rayos solares se sobreponían en las camas vacías de mis compañeros. ¿A dónde habría ido todo mundo? Pensé. Asustado salí a recorrer el bosque, tome una chaqueta negra y unos vaqueros que apretaban de manera tenue mis piernas y salí en busca de un misterio que descifrar, aquí, justo en este lugar, todo se trataba de eso.

No tarde en darme cuenta que todo había sido un error, un equívoco tan grande que reí cuando tuve a todos enfrente mío. Hoy era Domingo, un día coloquial en el que los chicos iban a ducharse en ese tipo de laguna profunda a la cual yo todavía le seguía teniendo un poco de miedo, aun no sabía nadar y siempre me quedaba en las orillas. Al verme llegar Will lanzó un suspiro molesto y se cruzó de brazos, me molestaba que siguiera actuando de esa manera, como si yo hubiera tenido la culpa de todo, sin embargo no le di importancia y decidí que por primera vez dejaría el miedo a un lado y me sumergiría hasta el punto más bajo del agua. Tomé fuerzas y me impulse desde la cúspide, para caer en terreno acuático y mi nariz se inundó de líquidos al instante. Cuando salí a flote Adán me envolvió en un abrazo, me quede un tanto desconcertado y le correspondí de la misma manera, los ojos de Will a lo lejos echaban centellas.

-Erick, ¿Preparado para una nueva lección de nado?- Inquirió mi amigo. Su rostro estaba acabándose, el cabello castaño que tenía, ahora estaba cambiando a un tono canoso como cuando llegas a anciano y tu melena se va haciendo blanca.- Te he extrañado y no he podido verte, porque, ya lo sabes, uno tiene que estar con su pareja, aunque últimamente me está hartando-

-¿Por qué te harta?- Cuestioné y baje la mirada. Pensé por un segundo que todo aquello no me debía de importar, pero Adán era mi amigo, era la prueba viviente de toques de suavidad cuando me hablaba. Entonces no dude más. Me importaba.

-Will quiere regresar- Contestó y no supe distinguir entre sus lágrimas y el agua cubriendo su rostro-

-Todos queremos regresar a la Tierra, Adán, supongo que tenemos más cosas que hacer ahí- Dije y le acaricie la frente con mis labios- Incluso podría ayudarte a volver-

-¿Cómo harías eso?- Preguntó con desconfianza-

-Marlone y Malcome me ayudarán a salir de aquí, si no acatan mis órdenes algo malo pasará y te aseguro que ese castigo les será eterno- Moví mis labios y me sentí poderoso, como si tuviera dinamita en ambas manos-

-¿Cómo es que quedaste en coma?- Me intersecto Will, estaba llegando hacia nosotros y parecía que había estado escuchando nuestra platica por unos escasos minutos-

-Velas- Le pude decir, así de simple, no deseaba hablar de eso.-

-Define velas- Me ordenó Adán- Define tu historia-

-Un día de cumpleaños aburrido, una herida, un deseo, pedir morir, todo es igual- Contesté con exaltación-

-Lo entiendo- Comentó Will. Después calló y después de lo que pareció una eternidad, trató de hablar de nuevo- Yo quede en coma de una manera diferente, incluso de una manera más cruel-

-No tienes que hablar de ello, si no quieres, amor- Remitió Adán y lo beso en las comisuras-

-Quieres dejarme en paz- Ataco Will- Verás Erick, yo fui agredido hace 4 meses, maso menos un mes antes de que llegaras aquí. Mi padre siempre estaba ausente en casa, a causa de la muerte de mi madre, era como un estúpido robot que solo sabía trabajar y apagar el modo de apagado para dormir. Un viernes, un 18 de hace muchos días, me encontraba en el baño del instituto, cuando ellos entraron- Un nudo se le formo en la garganta a Will- Llevaban un frasco de pastillas, no podía distinguir el nombre ni nada por el estilo, agarraron mis brazos por detrás y metieron cada una de las capsulas a mi cuerpo, después de eso no recuerdo mucho. Solo vienen a mi cabeza imágenes de mi padre en un hospital y los doctores diciendo que caería en coma, que las sustancia toxicas debían de ser extraídas, pero que eso tomaría mucho tiempo-

- ¿Y por qué te molestaban?- Quise saber. Yo y mi ingenua curiosidad éramos expertos en meternos en problemas-

-Yo solía tener un novio y ese tal novio era hermano de uno de los chicos que me molestaban. Cuando se enteraron de que andaba con él en secreto, me hicieron la vida imposible y a él le arrebataron todo, ahora debe de estar estudiando en una escuela militar o algo así, eso es lo que paso- Conto y ya no quiso decir nada más. Se inmuto y se volvió mudo y quien lo haría con esas situaciones por detrás-

-Saldrás de aquí, me importa una mierda como funcione este lugar. Te sacaré a ti y a Adán- Suscité. Me sentía vivo en muerte, era una tontería que me hacía tener esperanzas-

De la nada pude sentir un tirón desde mis pies hasta la espalda, parecía como si el mar que nos rodeaba me intentará tragar, ingerir y eso no me daba buena espina. Y tan pronto como tuve esa sensación algo me sumergió, me ahogo, me hundió, me ocultó de los demás y pude ver dos rostros, cuatro ojos que me inspiraban terror. Eran ellos.

Malcome y Marlone. Dos demonios que aunque ahora no implicaban una amenaza, se podía sentir una especie de pánico al verlos.

Recobré la cordura y me dí cuenta de que estaba atado a una camilla en medio de lo que parecía una cueva. Alguien sostenía una aguja y ese alguien era Malcome, sujetaba la jeringa con temblores y parecía un enfermero principiante.

-Rápido Malcome, tenemos que hacerle la estúpida prueba de sangre, para que pueda purgarse más rápido, para que salga de aquí y yo pueda volver a ver- Marlone salió de un espacio del cual no pude identificar y sonrió, como si supiera saber dónde estaba su víctima.

-No puedo- Articulo Malcome y dejo caer el instrumento que tenía-

-Dame esto, nunca puedes hacer nada - Le dijo Marlone a su hermano gemelo, con furia en las sienes- Esto se hace así, alzar camisa, clavar y extraer-

Tan pronto como lo propuso, lo hizo y un dolor fantasmal se cruzó en mi abdomen, la aguja había sido enterrada de una manera tosca y mi piel empezó a ponerse morada, no purpura como las mordidas, morada, como los moratones que te salen cuando te caes de la bicicleta. Mi sangre seguía teniendo ese punto rojizo que caracterizaba a los humanos.

-Las pruebas empezarán en dos semanas, pero solo para ti- Afirmo Malcome y me miro con pena en los ojos- Para tus amigos empezarán tal vez y en tres meses-

-¿Qué son las pruebas?- Exclamé-

-Pronto lo descubrirás- Dijo y me beso en los labios, un beso que tenía en su poder, algo mágico que me hizo dormir al igual que un niño que es arrullado con una canción de cuna.-


CAÍDOS(LOVEBOYFORBOY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora