DULCE SUEÑOS

[YG/23]

Agust mantenía su ceño fruncido, mientras que el hombre frente suyo tenía la mejilla totalmente adolorida y roja por la tremenda bofetada que recibió, desde el tiempo que llevan mirándose mutuamente ninguno ha querido dirigir ninguna palabra, pero en todo esto, había un tercer individuo que los estaba observando fijamente con la mirada neutra, esperando a que todo el teatrito terminará.

--Merecido lo tienes, bueno ya te divertiste lo suficiente. Ahora si podemos irnos, Yeonjun.

Su voz era gruesa y ruda, dándole un porte elegante, el cual iba muy bien a su estilo domínate y serio que mostraba constantemente, vestía unos zapatos de cuero, camisa blanca y un terno que en su totalidad era negro junto al pantalón que traia – C...Choi...-- él peli rosa río con nerviosismo y sin perder tiempo corre a él para esconderse detrás suyo – No te enojes primito querido, yo solo cuidaba de tu teléfono. Mira...está intacto –

--Min Agust ¿cierto? – él peli naranja asintió a la pregunta—Mucho gusto, Choi JI-Yung. Le pido disculpas por las travesuras que hizo este mocoso – el hombre de cabello platinado extendió su mano, pero Agust aun seguí tratando analizar el gran parecido que tenía ese tipo con ... -- Joven Min...-- el nombre sacudió la cabeza, sacando esos pensamientos y aceptando las disculpas del sujeto frente suyo, quien le dio un jalón de orejas al de cabello rosa y esté suelta un quejido por el dolor.

Después de todo lo sucedido Agust ayudó a llevar las maletas hasta la salida del aeropuerto, en donde inesperadamente se encontraron con el chofer personal de la mansión Min y sobre todo del matrimonio Min/Park – ¿Señor Lee? – el hombre hace una reverencia y le regala una sonrisa leve a los dos jóvenes que venían detrás del peli naranja -- ¿Qué hace usted aquí? – susurro al acercarse a él discretamente.

--Su madre me ordenó que lo viniera a ayudar. Joven Agust.

El blanquecino asintió a lo dicho, así que les indico a los recién llegados que subieran – Estas son...-- dijo Agust cuando ya estaba dentro del asiento del piloto, mientras intercambiaban las llaves de la moto y el auto con el chofer – También infórmele a Nana que no cenare en casa. Muchas gracias – fue lo último que dijo antes de poner en marcha la camioneta y el hombre fuera hizo una reverencia para despedirse.

En todo el camino nadie de los dos hablaba y eso le daba paz a Agust, haciendo que todo el viaje desde el aeropuerto hasta la empresa de su madre sea tranquilo y pacífica, hasta que... -- ¿Estás casado? – aquella voz chillona del peli rosa resonó en la camioneta, llamando la atención del blanquecino, quien lo mira a través del retrovisor, este negó como respuesta para seguir manejando ya que no quedaba muchas cuadras hasta llegar a su destino -- ¡Oh! Entonces ¿Quién es el chico lindo con el que estás en esa foto? – el menor señaló por la venta aquella enorme foto que estaba siendo exhibida en una pantalla enorme sobre un edificio.

--Yeonjun...

--Este chico lindo es mi cuñado y el que está a su lado no soy yo, es mi hermano gemelo. Sus nombres son Min yoongi y Pa ...—sus palabras fueron interrumpidas por los claxon de los demás autos que estaban detrás suyo y sin perder tiempo siguió su camino.

--¿Piensa que con dulces va a calmar mi enojo? ¡PUES NO!

Jimin cruzó los brazos, haciendo un puchero molesto, ignorando las casi dos bolsas llenas de golosinas que ahora estaban en la mesita pequeño frente al sillón en el que se había sentado cuando llegó a la oficina, la misma oficina en la que también estaba Yoongi, pero esta era dividida por una pared de vidrio que era imposible escuchar lo que decía la otra persona, aunque sí se podía ver lo que hacía.

🐱¿Ya terminaste de hacer berrinches?

🐣¡Chismoso! Por qué mejor no terminas de hacer los documentos,

¡ya quiero irme!

El de ojos felinos sonrió con gracia mientras colocaba el teléfono a un lado y guardaba los documentos sin terminar en los archivos, para luego cerrar el portátil y dando un suspiro profundo se alejó del escritorio hasta llegar al otro lado de la oficina – Nos vamos... -- Jimin elevo la mirada y asintió, así que con algo de dificultad se levantó del sillón para acercarse hacia su marido, quien se dio cuenta que unas cuantas envolturas de dulces estaban tiradas sobre la alfombra – ¿Te gustaron las golosinas?

--¡Cállate y vámonos!

Con una mano en la espalda y otra en su enorme vientre, Jimin salió de la oficina con el ceño fruncido, él aún seguía enojado con el mayor. Cuando estaban cruzando los pasillos, se encontraron a la pelinegra, quien sonríe con ternura al ver a su hijo y yerno discutir de manera graciosa-- ¿Ya se van? —pregunto y jimin asintió – Le dije a Jackson que los lleve en mi auto, la camioneta se la llevó el chofer para Agust – los dos asintieron y con un beso en la mejilla y otro en la pancita del rubio, la mujer se despidió – Salúdame a tu madre de mi parte, cariño y tu yoongi, no hagas enojar más a Minnie – ríe al final.

Cuando los dos ya estaban dentro del auto, una camioneta se estacionó frente suyo, en el cual se sabía que ahí estaría Agust y el representante de uno de los socios de la empresa -- ¡Agust! – Jimin grito por la ventana y él peli naranja agita la mano al darse cuenta. Después de eso, el guardaespaldas puso en marcha el auto, por órdenes de Yoongi, quien rodó los ojos al ver como sonreía Jimin, cada que sacaba la cabeza para ver Agust.

¿celos?

El camino desde la empresa hasta la casa de los padres de jimin, tuvo muchas paradas a causa de yoongi quien no dejaba de comprar cosas distintas en cada pastelería por la que pasaban y ninguna de ellas lograba obtener una sonrisa de su menor, el mismo que ahora escribía con rapidez en el teléfono, mientras hablaba con Agust y se reía de cosas que yoongi no lograba entender, pero lo enajaban mucho...