02

269 29 147
                                    

El escritor dice:
Hagamos de cuenta como que el ambiente tiene la canción multimedia de fondo jajaja

Ahora sí, la historia:

🔸🔶🔸🔶🔸

Llegamos a lo que era mi casa, realmente no era muy lujosa según las palabras de mi madre, pero al menos tenemos. Era pequeña, las habitaciones estaban en un segundo piso; la sala, la cocina y el comedor estaban abajo, al igual que la oficina de "mi mamá" y su pasillo con plantitas y cosas verdes.

Cuando llegamos mi mamá me dejó en mi habitación un rato para familiarizarme con las cosas que había ahí.
Mi cuarto tenía un ropero, una cama que parecía muy cómoda, una mesa (tal vez para mis tareas de la escuela) y un librero con juguetes, libros y demás.

Entre las cosas que estaban ahí encontré unos papeles que tenían mis datos:

Pedro García Solís
Nacido el día 27 de junio de 2006 (16 años, casi 17)
Hijo de Sandra Solís y José García.
Y más blablabla

Mientras recorría mi cuarto, iba recordando ciertas cosas de la vida del chico al que pertenece este cuerpo.

El era muy feliz con sus amigos Israel y Samuel cuando eran niños. En la secundaria se separó de ellos por ser muy introvertido y a los otros dos les gustaba más ir a fiestas y hacer relajo.

En la preparatoria se reencontraron él e Israel solamente, Samuel quedó en otra preparatoria. Todo estaba muy bien hasta que un día Israel desapareció y al día siguiente lo encontraron muerto, muchos habían dicho y creían que había sido un suicidio. Se desconocen las razones, pero al parecer para ese entonces volvíamos a ser buenos amigos, o algo así.

- Espero recuerdes poco a poco - me dijo mi madre que estaba junto al marco de la puerta, interrumpiendo mis pensamientos.

- de hecho, estoy empezando a recordar. - mencioné cómo respuesta a su comentario.

- Que bien y ¿Qué recuerdas?

- A... Israel...

Me tomó de las manos con una cara melancólica, ella lo sabía pero al parecer no quería que yo lo recordara como tal.

- De verdad siento mucho lo que le pasó, no sabemos lo que intentaba hacer o lo que pensaba para hacerlo.

- No importa, está bien. Estoy bien. - dije haciendo evidente los muy pocos recuerdos de esa situación.

Se alejo un poco cambiando su expresión y se dirigió hacia la puerta.

-bueno, te dejo otro rato y en cinco minutos bajas a comer ya que casi está el espagueti. - ordenó bajando por las escaleras.

- ok mamá - asentí al escucharla.

Me costaba recordar cosas pero supongo que podría hacerlo poco a poco.

Seguía recorriendo la habitación tratando de recordar cosas cuando algo vibra encima de la mesa.

Era un rectángulo que parecía una mini tele pero más pequeña y más plana. Me acordé de su nombre: teléfono.
Y así recordé todo lo que sabía de esa cosa al instante: cómo se usaba y las cosas que ahí guardaba.

No sé cómo lo hice, pero pude usarlo para contestar una llamada.

- ¿Bueno? ¿Quien habla?

- Soy yo, Jorge.

- aaahhh! Hola Jorge

- ¿Que paso chaparrito? ¿Todo bien en tu nuevo cuerpo?

- si - era extraño hablar con él, a pesar de que su voz era parecida, realmente se notaba que no era el Jorge que conocí en el pasado - todo bien, jaja oye... ¿Y como supiste que era yo?

Aquí Y En Otra VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora