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- ¿Por qué lo hiciste?

-...

- El ya no era feliz, junto contigo, el me quería más a mí. El me lo pidió a gritos.

- ¡Te odio!

Salía corriendo por una puerta y el resplandor de afuera y un ruido inexplicable me hizo despertar.

El sonido se convirtió en el despertador y la luminosidad en la luz que entraba por la ventana de mi cuarto.

¿Qué estaba recordando? ¿Era Samuel a quien soñaba? ¿Quién era mi novio? ¿Qué hizo el? ¿Que hice yo?

Demasiadas preguntas me invadían y yo simplemente necesito una respuesta para todas. Por el momento no le tomé importancia a éste asunto y seguí viviendo como si nada.

De nuevo me cambié, tomé mis cosas, bajé, me despedí de mi mamá y salí caminando hacia donde estaba Jorge.

-Buenos días mi- no culminó su frase y ya lo había interrumpido con un besito.

Luego del beso terminó su saludo
- mi corazoncito... Ahora te levantaste con mejor humor que ayer ¿Verdad?

- podría ser... Pero bueno, mejor vámonos que tal vez lleguemos tarde.

- pero dime algo lindo por favor ~

- bueno, mi amorcito, mi niño tal lindo - le dije mientras me acercaba a su mejilla la cual se le marca el hoyito y le planté otro besito; él solo sonrió mientras yo hablaba.

- ¡ay mi chaparrito de verdad me encantas!

- y tú a mí Jorge.

Después subimos al coche y nos fuimos a la escuela.

🔸🔶🔸🔶🔸

Durante el receso estuve comiendo con Jorge en una mesita súper tranquila, ahí le empecé a preguntar cosas acerca de lo que sabía del Pedro nuevo.

- oye amor - traté de iniciar la conversación acerca de lo que quería hablar desde la mañana.

- ¿Qué paso?

- ¿Que sabes acerca del otro Pedro - dije y solo me volteó a ver con una expresión de confusión que no sé ni cómo describir. - es que he tenido sueños con una persona que realmente no me acuerdo quien es.

- ¡uy amor si tú no sabes, yo menos! La verdad lo único que sé es que tú tenías a tu novio y el día que cortaron fue un día antes del accidente.

-¿Mi novio? - cuestioné sorprendido

- si... Israel.

- Ahh ¿él era mi novio?

- si, me lo había recalcado cuando yo le pregunté si podíamos ser algo.

- ah! Con que querías estar con el otro Pedro¿Eh?

- ¡No chaparrito, no! - lo dijo tomando mis manos - Lo hacía porque creí que ya habías llegado aquí también, en el cuerpo de éste Pedro. Me perdonas por haber coqueteado con tu yo del futuro?

Su cara se veía tan linda tratando de disculparse, no había manera de que no diga que no.
O tal vez si...

- Pero de todas formas, no te perdonaré así de fácil, tendrás que contentarme.

- ¿a si?

- sip - dije mientras cruzaba los brazos en muestra de autoridad.

- Y ¿Con que sería bueno "contentarte" mi amor? - preguntó mirando mi cara: primero mis ojos, luego bajo la mirada poco a poco, hasta llegar a los labios.- ¿Un besito estaría bien?

Aquí Y En Otra VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora