estocolmo - crenny

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Peinaba mi cabello, después de haberlo cortado de esa manera tan errática me vi sometido a recibir un urgente corte de cabello. Ahora estaba corto exceptuando los dos largos mechones a los costados de mi cara. En mi opinión quedaba algo extraño, pero a Craig parecía gustarle.

De todas formas, eso no importaba ya. Lo único que me interesaba era que Craig estaba feliz, después de toda la tortura a la que lo había sometido, el amor que Tucker me tenía seguía perdurando.

Por el bien de nuestra relación no volveríamos a tener otra mascota más que Stripe, la cual solo podía recibir atención de mi parte si él no estaba en casa.

Ahora miraba el hermoso anillo que mi pareja me había regalado, no puedo creer que se haya tomado semejante molestia. Había olvidado por completo el baile de graduación, es muy lindo de su parte crear un propio baile para nosotros.

Tomé el almohadón y lo pegué en mi rostro para amortiguar mi grito, estaba completamente enamorado de Craig Tucker, jamás hubiera creído que tuviera esta clase de relación.

Nunca tuve fe en el amor, siempre me había perdido una pérdida de tiempo ya que tenía otras cosas en las cuales ocuparme. Además que creía que sería incapaz de poder amar a alguien y darle esa exclusividad que a las personas tanto les gusta.

Sin embargo, él me cambió, me demostró lo que era el verdadero amor. Él me liberó de todas esas horribles responsabilidades que me mataban poco a poco, salvó mi vida.

Es por eso que este viernes, le daría lo mejor de mi, para agradecerle por todo lo que ha hecho. Literalmente había asesinado a toda su familia por mí, nadie hubiera hecho eso por mí, solo él.

El anillo me hizo sentir como si estuviéramos comprometidos, sería increíble poder casarme con él, sería como un sueño hecho realidad. Él esperándome en el altar, yo con cualquier cosa que él deseara, uniendonos para la eternidad.

Suspiré con una amplia sonrisa marcada en mi rostro, de pronto recordé que Craig llegaría en cualquier momento. Debía de preparar todo para él.

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Me encontraba rezando, quería que todo saliera bien. Últimamente Kenny estaba demasiado inestable, no lo culpaba ni me hacía amarlo menos, solo me tenía angustiado.

Lo que sucedió con el pájaro me hizo darme cuenta que el rubio no puede recibir ningún tipo de estímulo o información de afuera ya que eso solo alimenta a su locura. Aunque creo que no volverá a tener ningún tipo de recaídas.

No volvimos a hablar del tema, normalmente suele suplicar mi perdón infinidad de veces hasta que le dejé bien en claro que no guardo ningún tipo de rencor por ello. Sin embargo esta vez no sucedió eso, al día siguiente solo hablamos de lo bonito que sería nuestro baile. Eso me lleva a una conclusión, Kenneth se ha dado cuenta de lo que pasa cuando piensa las cosas dos veces, cuando él tiene estás recaídas o cuando piensa en su vida anterior.

Me lastima a mí, a los demás y a sí mismo. Esto de alguna forma lo llevó a reflexionar, yo creo que finalmente comprendió que contra más se resista, más dolerá, y puedo jurar que es lo mejor que me ha podido pasar en la vida.

Esperaba que esta sea la última vez que esto ocurra, pero con mi precioso Kenny nunca se sabe. Es tan inesperado, tan inestable que me dan ganas de controlar su mente para saber cuál va a ser su siguiente movimiento.

Tenía muchísimas ideas para nuestro baile, y obviamente el final asombroso que dará el fin de una era para nosotros. Esto terminaría con cualquier angustia o problema entre nosotros, no tendremos que volver a preocuparnos por alguna otra recaída, yo me encargaría personalmente que él no extrañe jamás el exterior.