[27] 2/2

239 34 80
                                    

-¿Aún estás esperando un mensaje de Stanley?- Mi mirada se levantó hacia el cenizo, quien recién despertaba, probablemente al escucharme salir de la cama para tomar mi teléfono.

-Si...me gustaría que me expliqué por qué me abandonó en la fiesta, yo creí que le importaba.- El menor rodó los ojos y se acercó a mí.

-Intenté decírtelo, él es como todos, jamás podría entenderte Ken.- Me mantuve en silencio mientras observaba los mensajes que le había enviado recientemente.- Sé que prometimos no hablar del tema pero...¿a ti te gusta? Porque los he visto besarse, no entiendo si le estás siendo infiel a Craig o-

-No, yo en realidad- No sabía cómo decirlo sin espantar a mi amigo, era como si mi lengua se enredara.- No es Stan con quien estoy saliendo, es solo que Marsh y Craig se parecen tanto, creeme que son como dos gotas de agua. Sé que está mal pero él está tan enamorado de mí que no pude evitar usarlo para sentirme cerca de mi Craig.- Los ojos del más joven se abrieron a modo de sorpresa, cosa que me alarmó.- P-Pero no puedes decirle a nadie, Tucker se moriría si llega a enterarse, esta es mi forma de sobrevivir sin él...de verdad lo necesito demasiado.- El de ojos avellana asintió de forma comprensiva, gracias a Dios, ya creía que volvería a tener otro ataque de pánico, y estaba seguro que no terminaría bien.

-Si quieres podemos ir esta semana, tal vez eso te va a alegrar.- Sonreí ampliamente, Thomas siempre sabía qué decir para hacerme sentir mejor.- Y después podemos ir a la casa que compartían, aún debemos ver el sótano.- Mordí mi cachete, hablé demasiado pronto.

-N-No lo sé, se supone que estoy castigado.- Mi comentario solo hizo rodar los ojos al de pecas.

-Podremos saltarnos las clases fácilmente, confía en mí.

-La otra vez que fuiste no te dejaron entrar, ¿crees que esta vez sea diferente? Es decir, tengo miedo que algo le esté pasando.- El rubio suspiró y se acercó a mí, tomando nerviosamente mi mano.

-Olvídate de eso, quizás Craig estaba ocupado ese día o tan solo no recibían visitas, no podemos angustiarnos por un solo día. Así que ya deja de sobrepensar las cosas, me vas a sacar canas.- Solté una risita mientras asentía.

-Lo siento, no he estado teniendo muy buenos días. De verdad solo quiero que esto se termine, me encantaría vivir en un lugar alejado de todos y cocinarle a Craig su comida favorita.- Cerré los ojos mientras me imaginaba aquel acontecimiento, podía sentir la mirada del cenizo sobre mí.

-¿Sabes cocinar?

-B-Bueno cuando estaba con Tucker aprendí muchísimas recetas, en su mayoría veganas.

-¡Enséñame! Yo también quiero aprender a cocinar.- La emoción del menor se sentía desde aquí, supongo que le alegraba aprender algo que le podría gustar al azabache, no lo culpaba, yo aprendí solo para tener su atención.

-Bien, creo que tengo algo en la cocina que podremos hacer.

Era gracioso, Thomas me hizo olvidar que hace tan solo horas había asesinado a una vieja amiga a sangre fría, no solo eso, también me había ayudado a deshacerme de todos esos pensamientos suicidas. Incluso si sentía que dentro de mi cabeza aún seguían haciendo eco.

Sin embargo, fue una tarde amena junto al que consideraba, actualmente, mi mejor amigo. Kevin también lucía feliz, obviamente parecía traumado de por vida, pero no nos había quitado la mirada de encima en todo el día.

Pero mi felicidad solo duró hasta ese día ya que los posteriores a ese solo provocaron que mi mente decayera. La muerte de Tammy comenzó a acechar, obviamente que todos comenzaron a notar su desaparición por lo que su nombre estaba en boca de todos. Kevin me repetía que todo estaba bien y que no habíamos hecho nada, sin embargo, no podía dejar de soñar con ella. Sus gritos, su sangre, su rostro, era horrible, jamás pensé que me convertiría en esto.

estocolmo - crennyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora