Stephanie
Ruedo los ojos con exasperación porque llevo media hora intentando que David me
deje salir con mi amiga, pero me ha dado un sermón e insiste que no es bueno salir con el peligro que nos asecha. Lo comprendo perfectamente, pero no podemos ocultarnos como unos cobardes.-Amor,.. Deja la paranoia.-le pido con cansancio.
-Stephanie, no solo se trata de una salida sino que te estás poniendo en peligro a ti y a nuestra hija.-me dice con seriedad.
-Jamas pondria en riesgo a mi hija, y tampoco podemos vivir con miedo toda la vida.- Contrataco comenzando a enojarme por su insistencia.
-Sabes que solo busco lo mejor para ambas.-me asegura cansado de la discusión que él mismo empezo.
-Es fácil,. me dejas salir con Martina y no discutimos más.-le digo encogiendome de
hombros, no retrocedere, saldre le guste o no.-Bien, pero como te dije me llamaras cada quince minutos y no puedes negarte.-me
advierte acurrucando más a nuestra hija en su pecho mientras ella juega con los botones de la camisa de su padre.-Si a todo, pero ya debemos irnos porque se nos hace tarde.-le digo negando divertida
por su advertencia.-Asi que dame a mi hija.-le pido extendiendo mis manos para
cargarla, él duda unos segundos hasta que me la termina entregando. La acomodo en
mis brazos y ella solo me observa mientras juega entretenida con mi cabello, al parecer
hoy se ha levantado de buenas.-Te amo, Dav.-le digo dejando un beso en sus labios.-Te amo, las amo.-susurra correspondiendo mi beso.-Vayan antes de que me
arrepienta.-me dice y se que se está conteniendo para no encerrarme e impedir que me vaya.-Entendido, nos vemos mas tarde -digo al tiempo que con mi mano libre agarro el bolso con las cosas de mi bebé para seguidamente empezar a caminar con ella hacia la salida que es donde nos esperan Sophia, él señor Emilio y dos guardaespaldas más, creo que esta exagerando un poco, pero después de lo que hemos pasado lo entiendo perfectamente.
-Buenos dias, Sophia.-le saludos sonriente a mi "cuñada", creo que puedo llamarla asi.
-Buenos dias, Steph.-me saluda acariciando la mejilla de mi princesa que solo se ríe por su toque.-Buenos dias, Princesa Mía.-le dice sonriendo.
-¿Sabes que tendrá tu hermana?-le pregunto Curiosa, y es que se trata de mi futura sobrina o sobrino.
-Solo tiene tres meses.-me responde un poco incómoda por la situación.
-No debes sentirte mal, entiendo que la estás cubriendo.-le digo sin rencores.
-Gracias por no presionarme.-me agradece.
-Solo quiero lo mejor para mi sobrino y para su madre. Cualquier cosa que necesiten no
dudes en decirmelo.-le digo mientras caminamos hacia una de las camionetas blindadas que ha comprado David para estar más seguros.-Ella está bien, ambos lo están, solo que con el corazón roto.-me cuenta, y se que es por todo lo que mi hermano le hizo pasar-Ella realmente lo ama.-me asegura y le creo, vi muchas veces a Sienna mirando a mi hermano con admiración y amor.
-Lo se. y no pretendo defender ni justificar a mi hermano, pero puedo asegurarte que
esta muy arrepentido y que siente algo por ella.-digo recordando a mi hermano llorando oor no dar con el paradero de Sienna y su hijo.-Se dió cuenta muy tarde. dice en voz baja y asiento totalmente de acuerdo, él lo perdió
todo y recién reaccionó.-Buenos dias, señora Williams.-me saludan los hombres que me acompañaran apenas
llegamos a su lado.
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Contra el mundo
Romance2° Libro de "Mi amor prohibido" Dos enamorados que no tuvieron miedo de luchar por su amor, así el mundo estuviera en su contra, sin importar que la gente pensará que su amor era prohibido. Lograron ser felices, pero todo esto se complica cuando p...