Gay Island ◎ Kookmin

Capítulo 14

¿Alguna vez han estado sumergidos en una especie de huracán de emociones?

Son de esas emociones que te dejan muy confuso pero igualmente te hacen feliz.

Jungkook se sentía de esa manera.

El chico que le gustaba confesó que él le hacía sentir cosas que nunca había sentido y eso lo ponía inmensamente feliz, pero no todo en la vida es bueno y su cerebro pareció recapacitar.

Jimin era hetero, sí, puede que le guste como se siente con él y pidió por más de eso que no comprendía, al final de cuentas solo quería experimentar y por eso fue que pidió ayuda.

No le gustas Jeon, solo se está descubriendo a sí mismo — Pensó dentro de sí mientras observaba el suelo.

Jimin esperaba expectante una respuesta de su parte, y él, no sabía que hacer. Ya la parte oscura de su vida había terminado, salió de la depresión que le dejó su ex anterior y estaba brillando más que nunca, ¿De verdad debería arriesgarse a algo que parecía terminar relativamente mal?

Levantó su vista y sus ojos chocaron los bellos orbes miel del menor, no debió haber hecho eso. Con solo ver sus ojos podría fácilmente decirle que si a todo lo que el portador de estos le pidiera.

Diablos, diablos, diablos, Jungkook estas mal — Se reprendió pues ya tenía su respuesta.

Y por muy malo que fuera quería aceptar y después pensar en las consecuencias.

— Ah... Si no quieres no importa, no puedo obligar-

Su oración fue interrumpida por la acción del castaño, quien tomó su cintura y lo acercó a él, dejando sus rostros muy cerca.

— ¿Que quieres que haga exactamente, Jimin? Tu dimelo y yo lo haré — Su voz sonó más grave de lo normal y eso logró que una corriente bajara por la espalda del menor.

— No se... — mencionó con timidez sin despegar sus ojos del contrario — Solo hazme sentir así, como lo haces en este momento, dame más de estas sensaciones — Jungkook tragó con fuerza ante esa respuesta y ahora no sólo tomo la cintura de este, sino que con un brazo la rodeó por completo.

Al ver la cara decidida del menor ya nada lo restringía por lo que hundió su cara en el cuello de éste y dejó un beso en su blanquecina piel. Jimin jadeó de la sorpresa, pues no esperaba tal acto, sin embargo no podía esconder lo mucho que le gustó, por lo que sonrió.

— No quiero reprimirme más — Soltó sin más, haciendo que Jeon lo mirara de frente otra vez — He pasado la mayor parte de mi vida encadenado a mi mismo, quisiera ser libre — a través de su voz se notaba la verdad detrás de aquella oración.

— No te reprimas más conmigo, Jimin, usame — eso palabra iba más allá de lo que el castaño quería y puede que traiga consigo muchas consecuencias, pero en ese momento Jungkook no lo pensó — Usame para poder liberar tus emociones.

Jimin sonrió haciendo que sus ojos se cerrarán un poco y con su corazón latiendo rápidamente se colocó de puntillas y dejó un tierno beso en los labios del mayor.

Otra cadena fue rota dentro de él.

Fue un pequeño y simple tacto, solo unos segundos sus labios se tocaron, ni siquiera estos se movieron, entonces ¿Por qué Jeon quedo tan encantado?

Sí, estaba acabado.

— ¡Oigan! ¡Ustedes! ¿Que hacen aquí? Esto es propiedad privada — Una voz los hizo salir de su ensoñación. Giraron para encontrar al dueño de esa reprensión y Jimin se asustó al ver al guardia de Seguridad mirandolo con una molestia notable.