Se dice que a traves de los ojos se podían ver hasta los sentimientos más profundos de una persona.
¿Ese dicho era real?
Jimin no lo creía.
Estaba en un restaurante no tan elegante, muy cómodo para su gusto, con Jeon jungkook al frente, la misma persona que le había pedido por llamada la noche anterior que se vieran, e intentaba descifrar en su mirada cual era la razón real para que en ese momento estuvieran ahí.
Se sentía muy nervioso, apenas habían pedido la comida y luego se encontraron en un silencio infernal, debía haber una salida para esa sensación que le removía el estómago, pero ¿Cual era?
— Bueno, Jenko, eh ¿Hay alguna razón que me llamaras a este lugar? — Sí, Jimin, podrias haber sido un poco más casual. La reacción del menor fué de un completo susto, quien al darse cuenta inmediatamente colocó una sonrisa en su rostro, aparentando estar bien.
— Solo quería comer contigo — Jeon respondió y su mirada cayó en el servilletero que se encontraba al centro de la mesa.
Debía ser una broma, para Park, el debía estar jugando, porque gracias a sus acciones se podía ver desde lejos que tenía algo importante que decir y eso enserio le hacía poner los vellos de punta.
— No creo que fuera solo por eso — se atrevió a decir y el castaño bufó rendido.
Tenía que hablar, claro que debía hacerlo.
— Jimin, tu me pediste que te ayudara a sentir más de esas sensaciones que nunca habías probado, ¿no? — El mencionado se sonrojó al instante, pero no pudo hacer nada más que asentir con su cabeza, el más alto tenía razón — Bueno, en realidad no se que somos y me gustaría ponerle nombre a lo que tenemos, pero respeto la idea que tienes y quiero seguir respetandolo, solo por eso, me gustaría saber los límites que debo tener contigo — Jungkook terminó de hablar y el pelinegro creía que estaba a punto de sufrir un colapso mental.
Eso no se lo esperaba, y es que siquiera él mismo había pensado sobre ellos, ¿Limites? Claro que habían, pero no entendía porque nunca los estableció. El mayor quería respetarlo, quería saber los límites para no pasarlos, era un gran chico sin duda alguna y eso lo hizo sonreír, dejando mucho más confundido a Jeon.
Vamos Jimin, reacciona — Se dijo a si mismo para luego darse un golpe mental, se supone que debía mencionar los límites, pero ni siquiera él sabia cuales serían tales limitantes.
— Oh, los límites, tienes razón — sus manos comenzaron a jugar la una con la otra sobre la mesa y Jeon se dió cuenta al instante que estaba nervioso.
— Sí, suena mal, pero quisiera saber hasta que punto puedo llegar contigo — La situación entre ambos se había puesto demasiado incómoda, incluso respirar se le estaba haciendo pesado.
— Es que si te entiendo y no pienso que suene mal, solo que... — Jimin dejó la frase en el aire y desvió su mirada a un punto en el suelo.
— ¿Solo qué? — Insistió Jungkook para que el pelinegro hablara, aunque pasaron segundos y éste ni siquiera levantaba su cabeza.
Jimin tenía un debate consigo mismo, ¿Debía simplemente decir la verdad? Abrir la boca y decir: Hey, Jenko, ¿Sabes? Ni yo se que límites debería establecer.
Solo ese pensamiento le hizo suspirar cansado, se vería completamente ridículo diciendo algo como eso.
Levantó su cabeza y sus ojos chocaron con los del castaño quien lo mirara expectante, solo quiso maldecir, tenía que decir algo, ¿Pero qué? Ni siquiera se le ocurría una excusa que fuera relativamente creíble, y si tardaba más Jeon se daría cuenta que era una mentira.
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Gay Island ◎ Kookmin
RomanceDonde Jimin, una persona que se asegura heterosexual, es obligado por su mejor amiga lesbiana a ir de vacaciones a "Pied Piper" la famosa isla para gays. Solo es una isla desbordada de homosexuales, ¿Que le podría pasar a un hetero? ¿Verdad? ◎ His...