CAPITULO 23

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SOPHIE.

Si ahora mismo pudiera entrar en el agujero más pequeño y luego volver a entrar a otro mucho más pequeño lo haría sin dudarlo.

La cara de mi abuela es desconocida, está aterrada y no culpo, al contrario, entiendo perfectamente. No es lindo ver como tu única nieta la cuál criaste, alimentaste, bañaste y le enseñaste valores, está sin blusa y encima de alguien que no conoces.
Jackson me entrega mi ropa y avergonzada me hago a un lado, termino de vestirme y ambos bajamos del auto.

El auto de mi abuela esta estacionado y el chófer nos mira apenado.

—No digas nada —le advierto de una vez.

Mi corazón  late de nervios, mi estómago me molesta y tengo ganas de vomitar de los nervios, estoy sumamente avergonzada, hasta siento con claridad como mis mejillas arden.

Jackson también lo está, no deja de acomodarse el cabello de un lado al otro.

—¿Que sucede contigo niña? —habla mi abuela, está enojada —Estaba por llegar a tu escuela y encontrarte en tu habitación pero de camino te veo en ese auto junto a él que ni siquiera sé quién es.

Jackson carraspea su garganta.

—Que horrible impresión debió tener de mi, —Jackson le extiende la mano—Soy Jackson compañero de clase y el novio de su nieta.

Lo miro desentendida, mi abuela abre sus ojos y me mira.

—Te lo iba a decir —hablo apresurada.

—Tienes novio y ¿ya estas haciendo estas cosas? —me regaña— ¿así te eduqué? ¿Para que tu primera vez sea en un coche?

Esto no está pasando.

—Es mi culpa, abuela —habla Jackson— no pretendía que fuera así, para nada, de hecho en mi mente era diferente.

—¿Lo pensaste? —lo encaro.

—Bueno, pensé en muchas cosas.

—Tres cosas Jackson, —mi abuela se acerca lentamente— primero, no soy tu abuela, segundo, no quiero que mi nieta esté con alguien que no se toma las cosas con seriedad y aprovecha estos pequeños momentos para tocarla. Y tercero, quiero que me dejes a solas con mi nieta.

—La entiendo, pero no tengo malas intenciones con Sophie, esto es algo  no que volverá a pasar y le doy mi palabra , y si quiere que me vaya para que la regañe pues me temo que me quedaré.

—Jackson vete por favor —hablo.

—Me quedo.

—Muy valiente tu novio, mejor hagamos algo mas bonito, —llama su chofer, y él se acerca— búscame el número de los padres de este muchacho, quiero contarles que hace cuando no está en clases.

Conozco a mi abuela, a ella no le gusta que le contradigan. Y es capaz de hablarle a su padre, no quiero más problemas y tampoco necesito una mala impresión.

—Jackson, no querrás que tu padre venga y se reúna con mi abuela, ¿Verdad?

Jackson, me mira y entiende.
—No, no quiero eso, entonces iré alistarme—me coge del cuello y me da un beso antes de irse. Mi abuela lo asesina con la mirada.

—No te reconozco Sophie —en su voz sale decepción.

—Déjame explicarte —me acerco tomándola de la mano.

Retrocede.

—Este colegio te ha cambiado mucho, y ahora ese chico ha vuelto de ti alguien diferente, dime, ¿Hace cuánto están saliendo?

¿Ella sabrá que sangramos igual?©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora